A veces me pregunto cómo es posible que tan solo una mirada te lleve a un frenesí de emociones, te de un subidón de energía, te enamore sin siquiera pensarlo dos veces.Quizás dependa de la mirada, de la persona que te mira, de los ojos que te observan...Aquellos ojos hechizantes de esa persona que te noquea.Aquella persona que no llegas a comprender del todo y tal vez sea mejor así porque de alguna manera siempre habrá algo para conocer.Tal vez observar a esa persona tratar de analizarla, le dé un poder sobre ti, tal vez esa manera de comunicación no sea mediante palabras sino por aquellas intensas miradas.Y aquellas miradas... Aquellas miradas que reconfortan y dan alivio con tan solo un segundo en tus ojos, una mirada segura y penetrante, una mirada fuerte pero dulce, una mirada intensa y hechizante.Aquella mirada, que enamora al caer en tus ojos, aquella mirada, que pasea por tu mente cada vez que te descubres pensando en aquella persona.A veces no suele suceder tan obvio, pero los ojos de la persona de la que te enamoras, representa de alguna manera tu "adicción", el océano, la lectura, el café... aunque a decir verdad de alguna manera esa "adicción" desaparece poco a poco y toda esa descarga de energía, aquel frenesí, etc., te lo dan esos ojos característicos de aquella persona.Aquellos ojos que de repente se vuelven tu droga, y se vuelven esenciales en tu existencia.Esos ojos donde encuentras tu cielo y te elevan más allá del propio universo.Esos ojos que simplemente te enamoran.Esos ojos que simplemente no puedes dejar de observar.