Cap. 5

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Realidad.


Emily.

Desperté… Sentía que me movían con delicadeza, abro lentamente mis ojos veía todo borroso hasta que todo se iba aclarando poco a poco y A LA MIERDA!... Mi cabeza dolía demasiado también mis ojos por la luz que golpeaba mi cara rápidamente los talle con mano, después poco a poco me fui acostumbrado.

Lleve mi mano a mi sien, no sé cómo carajos llegué aquí, me senté.

Sentí que me miraban así que voltee rápidamente y vi a una señora de 50 a 56 años de edad, era evidente que no sabía nada de ella.

Me quedé callada ya que no sabía que decir, ahora mi mirada se centro en la habitación la veía detalladamente, es hermosa, la paredes pintadas de color rosa pastel, la cama... Bueno no era cama, era cuna muy bonita por cierto, pero no era lo mío y también hay muchos peluches, hay una alfombra de un tamaño pequeño es circular color morado tenía una mariposa en el centro de aquella alfombra, cerca de la puerta vi un baúl que no sabía que había dentro del baúl de un color muy hermoso es azul pastel me imagino que juguetes?... En frente del baúl hay una puerta creo que es de ropa, alcanzó a ver qué hay algo de ropa pero aún no lo sé, al lado de ella hay una mesita con una lámpara un lapicero y una computadora lo cual me hace pensar que es una mesa de trabajo?... Ahora me encuentro con otra puerta que es el baño como lo sé?
Pues queda enfrente de mi y la otra puesta era la salida de la habitación lo sabía por qué volvió a salir y entrar la señora, entonces que puerta debemos de elegir? Vaya que acertijo tan más fácil... —Ahg deja de ser sarcástica acaso no ves en la situación que estamos es muy incómodo — le decía a mi subconsciente, dejado de lado a mi subconsciente, me a encantó la recamara.

Salí de mis pensamientos, ya que la señora se digno a hablar.

—Y bien cómo te sientes?— pregunto con dulzura.

Cómo decirle que me sentía bien me dolía la jodida cabeza, solo se sonreí.

—Pues algo bien, solo que me duele la cabeza .–dije quejando de dolor.

—okay, en seguida te traigo una pastilla para el dolor vale?– Solo asentí.

Cuando se fue empecé a pensar en todo lo que había pasado; me siento mal, hay tantas preguntas sin respuesta, pero solo quería una respuesta en especial y era ¿ Por qué lo hicieron?... Escuché pasos venir para acá, limpie rápidamente las lágrimas que habían salido sin mi permiso. No voy a negar que me encuentro nerviosa, pero trato de verme lo más tranquila y serena posible ya que no quiero demostrar me débil antes las personas que estuvieran ahí.

Vi como la palanca de la puerta bajaba en referencia a qué abrirían la puerta, vi como entro con un vaso de agua y la pastilla me los entrego y rápidamente puse la pastilla en mi lengua y tome del vaso.

—Oh perdón por no presentarme antes – Dijo dándome una sonrisa, le devolví la sonrisa y solo asentí.

—Mi nombre es Sabrina y el tuyo?— .

–Si no te preocupes .- le dí una sonrisa .- Mi nombre es Emily... Emily Murphy.

La señora, digo Sabrina solo asintió.

—Bueno me tengo que ir, ya van a venir ellosn.- Lo mire confusa .-

–¿Quienes ellos?–. Solo se quedó callada -. Lo sabrás cuando lleguen .-dijo con voz neutra.

–okay -. Dije con algo de nerviosismo.

Bueno adiós, pórtate bien okay?–.

–Mm ok?....-. Dije algo dudosa.

Después de que se fue me puse a llorar, sentía toda la importancia y eso hacia que me sintiera frágil.

Que hice mal para que mis padres me vendieran?...

30 minutos después.

Después de tanto llorar, me había aburrido y no sabía que hacer estaba a punto de cerrar mi ojos cuando entra alguien...

Después de tanto llorar, me había aburrido y no sabía que hacer estaba a punto de cerrar mi ojos cuando entra alguien

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