˚⌖﹔Día 3

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Soy zen El canto de Om es lo único en mi mente y alma. Soy el Buda reencarnado. Soy zen

Con estas palabras, Xiao Zhan trató de mantener la compostura mientras se preparaban para el rodaje a la mañana siguiente. Sus pensamientos vacilaron un poco cuando Yibo entró en la cocina y pasó junto a él sin siquiera mirarlo.

Soy mejor que el Soy más amable que él Soy mejor que el Xiao Zhan cantaba una y otra vez mientras paseaba por la cocina.

Min Huang y Wang Han se pararon en una esquina observando a los dos niños.

─Bueno... ─susurró Min Huang. ─al menos no están peleando hoy...

─Ni siquiera se están mirando el uno al otro. No sé cuál es peor. ─Wang Han gimió.

─Supongo que lo descubriremos pronto. ─Min Huang frunció los labios.

─No lo entiendo... Yibo generalmente no es así... es el epítome de la cortesía y el respeto.

─Así es Xiao Zhan... es el chico más dulce y afable que he conocido...

─Sin embargo, para ser justos. ─Wang Han se volvió para mirar a Min Huang. ─Él fue el primero en derramar salsa sobre todo Yibo...

─Sí ... solo porque Yibo estaba en la cocina donde se suponía que no debía estar y asustó a Zhan-Zhan... ─Min Huang miró a Wang Han.

─Bueno, Xiao Zhan no hizo un muy buen trabajo instruyendo al pobre Yibo ayer... ─Wang Han frunció el ceño y cruzó los brazos sobre el pecho.

─Bueno, Wang Yibo burlándose y burlándose de él tampoco ayudó a la situación... es su primera vez en cámara... ─Min Huang apretó los dientes.

─Uh, Laoshi. ─un miembro de la tripulación se acercó a Wang Han ─Estamos listos...

Wang Han y Min Huang se miraron, parpadearon varias veces y se aclararon la garganta.

─Han-laoshi. ─tosió Min Huang. ─Yo ... nosotros... nosotros...

─Sí ... no podemos darnos el lujo de discutir... ─Wang Han sacudió la cabeza.

─¿Qué pasa con ellos? ─Min Huang se golpeó la frente. ─Sus energías son tan malas que incluso nos están haciendo comenzar a...

─Lucha. ─ambos puntuaron la oración simultáneamente.

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Xiao Zhan siguió cantando en su mente mientras repetían los pasos del ensayo del día anterior, pero esta vez, colocó todos los ingredientes entre ellos para evitar cualquier sobrealcance, sobrepaso, resbalón o caída. Repasaron las mociones una vez más, sin embargo, esta vez, para sorpresa de todos, no entraron en una pequeña disputa.

Aunque eso también significaba que, a diferencia del día anterior, donde había al menos algo de química negativa, hoy no había química en absoluto. Xiao Zhan hizo todo lo posible para encontrar la cámara cada vez que instruía a Yibo, quien repitió los pasos con diligencia pero con la cara en blanco y los ojos completamente apartados de Xiao Zhan.

Finalmente, cuando fue el turno de Yibo de picar las cebollas, Xiao Zhan dirigió su atención a las verduras restantes. Apenas había pasado un segundo desde que Xiao Zhan se había alejado cuando un grito atrajo su atención sobresaltada hacia Yibo.

─¡Mierda! ─Yibo exclamó mientras apretaba su mano con dolor.

─¿Wang Yibo? ─Xiao Zhan corrió a su lado y se alarmó cuando vio la sangre que brotaba de su dedo. ─¡Oh no!

─Han-laoshi ─le susurró un miembro de la tripulación a Wang Han, quien inmediatamente se levantó de su asiento. ─¿Deberíamos parar?

Wang Han estaba a punto de responder afirmativamente cuando notó que Xiao Zhan sostenía la muñeca de Yibo y lo conducía al fregadero en el otro extremo de la cocina.

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