Toda investigación tiene consigo un experimento, todo con el fin de comprobar las teorías que se han hecho a lo largo del trabajo. En su mayoría los experimentos son buenos y exitosos, pero cuando se trata de cierto detective sociopata, todos saben que sus experimentos no son tan buenos y de vez en cuando resultan un total fracaso...
Pero sobre todo, lo que todo mundo ya sabe por ley es... ¡Correr! ¡Correr por sus malditas vidas cuando Sherlock tiene ganas de experimentar!
Desafortunadamente, aquella mañana había despertado con más energía de lo común, empero, estaba agobiado y furioso por no tener ni un caso que resolver. Cuando tenía trabajo su correo estaba repleto de mensajes pidiendo su ayuda. ¡Pero claro! Cuando estaba libre nadie necesitaba de su inmenso Intelecto.
Y para mala suerte del detective, había prometido no consumir ningún tipo de droga. Así que la señora Hudson y su compañero le habían confiscado hasta el último gramo de droga que hubiera en el departamento. Ahora parecía león enjaulado sin comer por tres días, ¡Necesitaba hacer algo de ya!
— ¡John! — Silencio. — ¡John!
— ¡¿Qué?!— Exclamó el rubio bajando las escaleras que llevaban a su habitación.
— ¿Dónde están?—
— ¿Dónde están qué?—
— No te hagas el idiota, sabes a lo que me refiero.—
— Oh, no... No te las voy a dar. Vas muy bien como para tirar todos estos meses de abstinencia a la basura.—
— No me interesa cuántos meses de abstinencia tengo... ¡Las necesito! Mínimo... Mínimo dame mis cigarrillos...— Hablo con suplica.
— Sherlock, no. —
— Te puedo decir quién va a ganar del partido de hoy, sé que tienes una apuesta con Graham, te puedo ayudar a que ganes.— El médico comenzó a reír mientras caminaba hacia su sofá. —Valió el intento...
— ¿Por qué no te pones a ver algo en la laptop? Hay muchas cosas interesantes en el internet...—
— Si, claro. Como tus videos cocina diminuta. ¡Que interesante es el internet!—
— Oye, tu... ¡¿Por qué ves mi historial?!—
Este solo se encogió de hombros, dejándose caer a su sofá. — Cuando estoy solo, aburrido y escondes la pistola... Lo más entretenido que tengo a mi alcance es tu historial.
— Sherlock...— Hablo molesto, tomando su laptop para comenzar a borrar su historial.
— No hay razón para borrarlo, no tienes nada malo ahí, o si?— Cuestionó con tono burlón.
John solo le miro con disgusto y continuo con su tarea. El castaño le miro detenidamente, sabiendo que duraría una eternidad para borrar y ocultar cada cosa que tenía en su aparato, así que estaría un rato en total silencio.
Y aburrido... Maldición.
Podría hacerle caso al señor suéteres de abuela. Tal vez si encontraría algo interesante ahí. Con un poco de pereza, se levantó de su sofá para ir hasta la silla que estaba frente al escritorio, abrió su portátil y la prendió.
— ¿Qué haces?—
— Te hago caso. —
— ¿Verás que hay en internet?—
— ¿No es obvio?—
— Si te apetece, puedes buscar algo que siempre te dió curiosidad pero nunca hiciste caso...— Comento antes de seguir con su trabajo.
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El trato de los 15 días. [Johnlock]
FanfictionSherlock y John hacen un trato del cual, posiblemente, se puedan arrepentir. "- 𝑨𝒈𝒖𝒂𝒓𝒅𝒂... ¿𝑺𝒆𝒏𝒕𝒊𝒓 𝒒𝒖𝒆́? ¡𝑺𝒉𝒆𝒓𝒍𝒐𝒄𝒌, 𝒗𝒖𝒆𝒍𝒗𝒆 𝒂𝒒𝒖𝒊́! ¿𝑪𝒐́𝒎𝒐 𝒑𝒐𝒅𝒓𝒊́𝒂 𝒔𝒆𝒏𝒕𝒊𝒓 𝒂𝒍𝒈𝒐 𝒑𝒐𝒓 𝒕𝒊? 𝑬𝒔𝒐 𝒆𝒔 𝒊𝒎𝒑𝒐𝒔𝒊...