Sexo sin compromiso

Capitulo 3 - El reencuentro

Mi amiga llamó a su Irwin su chofer para que nos ayudara a limpiar, vaya que si habia un desastre total pero la musica facilitó las cosas, cuando vi la hora eran las 1:30 Terminamos de limpiar todo habiamos pasado toda la mañana en eso, incluso habia olvidado desayunarme, mi estomago rugia ya que no habia cenado la noche anterior por estar tomando y la mañana ayudandole a Lina a limpiar todo no habia comido nada y mi estomago me lo reprochaba constantemente hasta que no pude aguantar mas.

-Lina que tal si vamos a un restaurante o algo-dije sobando mi estomago.

-Oh Harriet habia olvidado decirte que la comida estaba servida en la mesa-dijo con cara de inocente.

-Diablos y yo aqui muriendo de hambre eres todo un caso-dije frunciendo el ceño.

-Lo siento-dijo con la cabeza cabizbaja-Ve tu comida esta servida.

-Okay-dije yendome hacia la cocina a deborar la comida, tenia tanto tiempo que no me daba tanta hambre.

Me senté a comer era un puré de papas con ensalada verde queso cheddar un jugo de naranja entre otras cosas mas.

Al terminar de comer, salgo de la cocina me dirigí a la sala, ahi estaba
Lina besandose con su nuevo novio George, el que no paraba de mencionar, me decia que moria por presebrantarmelo lo que no sabe es  que yo ya lo conozco.

-AJAM EJEM- tos falsa.

Al darse cuenta que yo estaba ahi, se separaron inmediatamente, el me miro con cara de sorprendido pero ella me miro con cara de enojo si las miradas mataran creo que ya estuviera muerta.

-Lo siento- dije bajando la cabeza.

-No no importa Harriet-dijo George mirandome.

-¿Ustedes se conocen?-dijo Lina con cara de sorpresa señalandonos a ambos.

-Se podria decir que si-dije.

-Cosas del pasado-dijo el.

-Fue un placer volver a verte George, nos vemos luego Lina-dije.

-Okey bye cuidate-dijo el.

-Okey, ah Meredit me llamo hace un rato para que vayamos al antro con ella, quien quita y veas a tu galan-dijo guiñandome un ojo.

-No creo que pueda, pero trataré tengo muchas cosas que hacer.

-No te quedes, pasaré por ti-dijo ella apuntandome con el dedo.

-Okay y en verdad disculpenme deverdad no queria interrumpir-dije yendo hacia la puerta.

No se porque no pensé en llamar un taxi, ahora me costará llamar uno y esperar a que llegue, saqué el celular de mi bolso y bajé al estacionamiento ahí alcancé a ver a Matt recostado en un auto ¿Que hace ahí? al parecer se dió cuenta de que yo estaba ahi y se fue acercando me hice de cuenta que no lo vi y seguí mi camino para la pista.

-Hola-dijo el con una hermosa sonriza parandose en frente de mi.

-Hola-dije amablemente.

-Soy Matthew Brittens pero me puedes decir Matt-dijo extendiendo su mano.

-Yo soy Harriet Smith-dije estrechando su mano.

-Bueno hablamos luego que tengo que tomar un...-me interrumpe.

-Yo te puedo llevar-dijo aun manteniendo su sonriza.

-No no como crees no podria causarte esa molestia.

-No es molestia al contrario quiero platicar contigo, mi amigo vino a ver a su novia asi lo dejamos solos-dijo con tocando su labio.

-En ese caso, pues si-dije sonriendo.

Nos acercamos a su auto el caballerosamente abrió la puerta nos subimos  al auto y nos pusimos en marcha. Ivamos en total silencio todo el camino hasta que el decidió romper el silencio

-Emmm me encantó lo de anoche espero que se repita-dijo frenando el auto, rayos ¿el espera que me vuelva acostar con el? no es mala idea pero se lo que esto podría conllevar, osea un romance y lo mio es solo disfrutar aunque quien quita y me quede con el, mi amiga constantemente me dice que me busque un novio.

-¿Ah si?-dije alzando una ceja.

-Sii...la pase muy bien anoche contigo-dijo acercandose a mi.

Yo no se lo impedí al contrario me acercaba a el mas aun. Nuestros labios se rosaron un beso lento y suave, luego se fue tornando mas acelerado y excitante, nos separamos para respirar.

-No aqui no-dije separandome de el.

-Vamos a tu casa... si quieres-dijo el retomando el volante y poniendonos en marcha.

Vaya que este chico me desea.

-¿Qué tal mañana?

-Me parece bien...¿Que tal a las 7?-dijo rascandose la nuca.

-Perfecto- dije bajandome del auto-gracias por traerme-.

-No hay de que preciosa-dijo arrancando el auto.

Me encontraba frente frente a la gran puerta de mi casa puse, hablé por el sistema de alarma que tengo instalado en ella, he inmediatamente me abrieron las puertas, me siento tan cansada que dormiria lo que resta del dia.