Capitulo 17

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Amor, dolor, decepción, agradecimiento.

Eran las cosas que sentía Ban.
No estaba para nada feliz. En este momento solo necesitaba estar solo. Quería arreglar sus problemas.

Aún si la solución a sus problemas fuera terminar con todos.

Si, quizá la mejor decisión era dejar a Elaine.

Solo pensarlo le dolía demásiado.
¿Cómo iba a dejarla? Nada de esto era irreparable. Tampoco era algo suyo simplemente abandonar la pelea.

Para muchos la solución más fácil era dejarla y terminar con todo el sufrimiento, pero Ban... Era masoquista.

***

Muchos pensaban que conocían a Elizabeth. Pensaban que ella era "fácil de leer" y que ella siempre había sido la Niña Perfecta.

Claro que no era así.

En estos momentos tenía una sonrisa mientras miraba a su amado. Cualquiera diría "valla lo ama mucho" y si, lo amaba.

Pero la tentación de amarrarlo y llevarlo a su sotana y dejarlo ahí para que no fuera a Camelot, sin duda la consumía.

Se regaño mentalmente por pensar en ese tipo de cosas, ella no era ni tóxica y mucho menos psicópata. Pero, al ser Meliodas era inevitable no pensar así.

— Elizabeth, no te preocupes te juro que volveré.— Sonrió el Rubio.

Ella asintió.— Lo se... Solo que... Te extrañaré Meliodas.

El rubio sonrió complacido de las palabras de su albina. Se paro de puntitas y le robó un beso a su amada. Está gustosa lo devolvió.

— Que empalagosos.— Ambos Voltearon encontrándose con Peliplateado alto observandolos.

— ¡Ban!— El rubio no dudo ni un segundo y se lanzó a Golpear a su amigo. Ban obviamente reacciono de la misma forma.

— ¡Capitán!

Ambos amigos empezaron su "típico Saludo" si es que así se le puede llamar.

— Valla Elizabeth, no sé cómo aguantas andar con Meliodas.— Comento Diane burlona. Ayer por la noche La albina y el rubio habían revelado su relación, claro Meliodas le dijo por teléfono a Ban, quien reaccióno diciéndole que siempre debía usar protección.

— Bueno, supongo que es peor no haber comido una hamburguesa por más de cuatro años.— Ante tal comentario Meliodas dejo de golpear a Ban y dirigió toda su atención a Elizabeth.

— ¿Cuatro años sin comer una  hamburguesa?— Grito Meliodas sorprendido.— ¿Cómo es que sigues viva?

Elizabeth sonrió.— Magia Negra.

***

El ambiente era tenso.

Meliodas estaba a punto de entrar al avión. Y todos estaban tristes. Sabían que el regresaría en dos semanas o quizá menos, pero aún así, serían días demasiados aburridos.

Aunque tanto Meliodas como Elizabeth tenían que resolver problemas.

Tan solo pensar en tener que ver de nuevo a su papá, se le revolvía el estómago a Elizabeth.

Sin más, Meliodas le dió un tierno beso a Elizabeth y se despidió alegremente de los demás.

Después de aquella triste despedida, fueron a comer.

Si, comer.

Típico.

Durante la conversación de aquella comida, Ban le ofreció a Elizabeth que se quedará en su casa, durante unos días, hasta que ella se sintiera lo suficiente lista o preparada para enfrentar a su padre.

Obviamente Elizabeth no rechazo eso. Pues ella misma se sentía bastante nerviosa y enojada, para poder hablar con el.

***

Cientos de llamadas perdidas de Papá.

Mierda...

Mierda...

Mierda...

Esas eran las palabras que rezonaban en la cabeza de Elizabeth.

¿Que se supone que debía decirle?

¿Debía contestar?

¿Le marcaría de nuevo?

Era inquietate.

Demasiado inquietate.

Sin poder evitarlo de sus labios salieron cientos de suspiros. Quizá de cansancio, estrés o decepción.

Si, ella se sentía decepcionada de si misma. Ella ya no era una niña, y era humillante estar escondida en la casa de su primo.

Tenía que comportarse como una adulta.

Si, como una Adulta...



LO SIENTO!!

Ya se, no cumplo promesas...

Perdón. XD

Pero estaba un tanto abrumada por las tareas y no había tenido tiempo de entra en Wattpad. De hecho, este Capítulo ya estaba listo, solo era cosa de subirlo.

Bueno, espero y les guste. Está un poco aburrido pero bueno... Me esforzaré más para que los que siguen sean de su agrado.

PRÓXIMO CAPITULO

En el próximo capítulo me centraré en Ban y Elaine.

Uwu





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