Causalidad

Clinica

Narra Martina:

Me desperte y estaba sola. Mil cosas pasaron por mi mente pero traté de tranquilizarme, busque a Paula por toda la casa pero tampoco estaba. Cuando llegue a la cocina vi que en la mesa estaba preparado el desayuno pero no había ninguna nota o mensaje que me explique. Volvi a buscar mi teléfono para ver si tenía algún mensaje pero tampoco había nada. Ahora si que mi mente empezó a volar y nada era bueno. Decidí mandarle un mensaje que no respondió, me cambie rápido y me fui al negocio, después de todo eran las 10 y ella quizas estaría trabajando desde las 8. Llegue a la florería y no estaba, así que cuando la primera de nuestras amigas apareció decidí preguntar incluso sin querer saber la respuesta.

M: Eii Caro, no sabes nada de Paula?

C: Hola Martina, Paula no está con vos?

M: No, me desperte y no estaba en casa, dormimos juntas pero ahora no la puedo ubicar

C: No le preguntaste a Roma?

M: Es que tenía un examen re importante y no quería molestarla ni preocuparla, no importa vamos a esperar, capaz esta haciendo algún mandado y en un rato viene, gracias Caro -dije con preocupación pero con un poco de esperanza de que sea asi-

Paso un rato y veo que entra Romina con mala cara así que me acerco.

M: Eyy, que pasa? Todo bien?

R: Ehhh, Martina no se como decirte esto, pero quiero que te quedes tranquila que ya está todo bien

M: Romi no me asustes, le paso algo a Clari? A los chicos? Encima estoy preocupada porque Paula no aparece

R: Bueno de eso quiero hablarte, veni, vamos a sentarnos un minuto

M: Le paso algo a Paula? Se arrepintió. No?

R: Pero no, Paula nunca se arrepentiría de vos, espero mucho por esto y se nota de lejos lo bien que le haces, es otra cosa, viste que me preguntaste si sabia algo de ella? -asiento- bueno apareció. Pero... esta en...

M: Dale Romi decime donde está? Necesito verla -me impaciento porque se que hay algo malo en esto-

R: Bueno si, Paula está internada -senti un balde de agua fría y mi cara se transformo- pero esta bien, ya está bien. La encontraron a unas cuadras de tu casa y la llevaron a la clínica y no tiene nada, solo debe haber sido un golpe o...

M: La puedo ir a ver? Esto no fue solo un golpe Romina, esto tiene que ver con la amenaza -afirmo sabiendo de lo que hablo-

R: Bueno puede ser, pero no te preocupes por eso, nosotros vamos a encargarnos, necesitamos que vos la cuides ahora, que ambas se cuiden, si? -asiento- Vamos que te llevo a la clínica -y sin más me paro y agarro mis cosas para irnos.

De camino a la clínica ninguna hablo, yo estaba demasiado sumergida en mis pensamientos y en toda la situación, no entendia como es que ayer estábamos siendo tan felices y hoy la estaba yendo a ver internada. Por mi mente no deja de pasearse la culpa, si ella no estuviese conmigo quizás esto no pasaba, necesito cuidarla pero estando cerca solo la expongo. Mi cabeza va de un lado al otro, necesito quedarme cerca, cuidarnos pero también necesito no exponerla. Llegamos a la clínica y ni siquiera me di cuenta, Romina que noto mi ausencia me agarró la mano y hablo.

R: Ey, tranquila, esta todo bien, ella está bien y ustedes van a estarlo, nosotros nos vamos a dedicar a llegar al fondo de esto y por favor, no le sueltes la mano, se que puede ser difícil y que tu mente debe andar por ahí, pero no te alejes, ustedes se hacen bien y separarse seria como darle el juego ganado a ellos. Tienen que fortalecerse y salir adelante juntas con esto. -termino de decir eso y sin dudas yo estaba llorando-