little cat ♡ yoonmin

5 ♡

Yoongi se despertó al día siguiente al sentir que lo observaban. Abrió los ojos lentamente y chocaron con los de Jimin, que estaba parado en el marco de la puerta.

-Buenos días... - dijo Jimin en voz bajita al haber sido descubierto. Yoongi se rio y se sentó en la cama.

-¿Dormiste bien? – le preguntó. Jimin asintió. – Que bueno, ¿te parece si desayunamos?

Yoongi prendió su celular, dejándolo sobre su mesa de noche, y se paró. Salió del cuarto con Jimin siguiéndolo. No tenía la menor idea de qué prepararle a Jimin, pero algo se le tenía que ocurrir. Se sentía como un padre que le tenía que cocinar a sus hijos, ¿Jimin lo estaría considerando como tal? ¿Era muy pronto como para pensar eso?

Al llegar a la cocina, Yoongi se paró al frente de su refrigerador pensando en qué hacer. Vio que tenía un poco de kimchi y arroz guardados, así que los sacó y calentó para luego servirlos. Jimin lo miraba atento, sentadito mientras esperaba.

-Listo, realmente no sabía que preparar así que espero que esto esté bien. – le dijo Yoongi sentándose también.

-Está perfecto, gracias Yoongi hyung. – respondió Jimin sonriendo, empezó a comer con ganas. Yoongi dedujo que no había comido algo así en un tiempo, pero ¿por qué? Se moría por saber el pasado de Jimin pero no quería incomodarlo.

-Hoy quiero que vayamos a comprar ropa para ti. – dijo Yoongi. - Si te sientes incómodo se mostrar tus orejas y tu cola lo podemos solucionar.

-¿Ropa para mí? – repitió Jimin con sus ojitos iluminados. – ¡Yey! Gracias de nuevo, hyung.

Yoongi le sonrió en respuesta. Terminaron de comer y mientras Yoongi lavaba los platos, Jimin se fue a cambiar. Yoongi había terminado de lavar cuando escuchó a Jimin llamándolo desde el cuarto.

-¡Yoongi hyung! ¡Ven rápido!

Yoongi fue al cuarto rápidamente, pensó que le había pasado algo al peli naranja. Lo vio parado al frente de la mesa de noche. Se había puesto una de sus camisas, la cual le quedaba grande, y un pantalón negro.

-¿Pasó algo? – le preguntó.

-Está sonando y vibrando desde hace rato, me asustó. – dijo Jimin. Yoongi se acercó y miró la pantalla de su celular. El nombre de Taehyung aparecía en la pantalla, lo tomó y contestó.

-¿Taehyung?

-¡¿Cómo que el gatito es un híbrido?! ¡Exijo una respuesta! – Yoongi tuvo que separar su oreja del celular para que la voz de su amigo no le reventara los tímpanos.

-Hola Taehyung, buenos días. Sí, dormí bien. – respondió Yoongi sarcásticamente.

-Perdón, pero si me mandas un audio y luego te desconectas me dejas con la intriga. - dijo Taehyung.- Ya, cuenta.

-Todo se resume en el audio que te mandé, si quieres más tarde te cuento con más detalle. – le dijo Yoongi.

-Bueno, pero no te olvides. Adiós Yoon. – Taehyung colgó después de despedirse. Yoongi volteó en busca de Jimin y lo vio parado frente al espejo que tenía, mirándose mientras se tocaba sus orejitas.

-Tranquilo, tengo algo que puedes usar. – le dijo Yoongi. Jimin volteó curioso a verlo. Yoongi sacó de su closet un beanie gris y se lo puso con cuidado a Jimin. Él se miró y sonrió. – Me voy a cambiar y salimos, ¿está bien?

-Está bien, te espero afuera Yoonie hyung. – respondió Jimin. Yoongi sintió ternura al escuchar a Jimin llamarlo así. Se puso una polera negra y un jean, luego salió y fue donde Jimin.

-Vamos, Jiminie. – dijo Yoongi, vio a Jimin sonreírle después de llamarlo así. Al parecer le gustaba que le diga así. Tomó sus cosas y ambos salieron a la calle. La mañana estaba fresca, por suerte no hacía mucho frío. Yoongi llamó a un taxi y se subieron.

-¿A dónde vamos exactamente? – preguntó el conductor.

-Al centro comercial. – respondió Yoongi. Le pagó al conductor y este arrancó. Yoongi volteó a ver a Jimin y vio que sus ojitos brillaban de emoción.

Después de unos minutos, llegaron al centro comercial. Bajaron del taxi y Yoongi se puso en cuclillas para estar a la altura de Jimin.

-Quiero que te sujetes de mi polera, no quiero que te pierdas. – le dijo Yoongi. Jimin asintió e hizo lo que le dijo el peli menta. Entraron juntos y comenzaron a caminar. - ¿Qué te gustaría que te comprara?

-Emm... me gusta la ropita cómoda, que no sea muy pegada. Pero, con que sea bonito está bien. – le respondió Jimin.

Yoongi miraba las tiendas, buscando algo que sea como le dijo Jimin. Se detuvo al ver una tienda, que estaba medio escondida, que vendía ropa para híbridos.

-Jimin, ¿te molesta que vayamos ahí? – le preguntó Yoongi. Jimin negó con su cabecita.

Caminaron hasta el local y entraron. La tienda parecía una paleta de colores, había ropa de diferentes tonos y casi todo parecía ropa suelta. También tenía un espectacular olor a vainilla. Yoongi notó que Jimin movía su colita debajo de la camisa.

-Anda, escoge lo que quieras. – le dijo Yoongi. Jimin sonrió y fue a mirar la ropa. Yoongi simplemente lo observó, sonriendo también. Jimin tomó dos de buzos, dos poleras, 4 polos y un overol. Se acercó a Yoongi y se los mostró.

-¿Está bien esto? – preguntó Jimin.

-Sí, pero creo que podemos agregar algo más. – respondió Yoongi. Fue al mostrador y dejó la ropa separada para que la guardaran mientras seguían mirando. Seguido de Jimin, Yoongi tomó un par de jeans, un polo más y una camisa blanca.

-Listo, después vamos por zapatos. – le dijo a Jimin sonriendo. Estuvo por ir al mostrador de nuevo cuando sintió que Jimin jalaba de su polera, deteniéndolo. – ¿Qué pasa?

-¿No crees que es mucho? – preguntó Jimin haciendo puchero. Yoongi negó.

-Te compraría más pero sé que en el fondo te encanta mi ropa. – respondió Yoongi. – Vamos.

Caminaron al mostrador y Yoongi pagó por todo. Después, fueron a buscar zapatos y Yoongi le compró dos pares de zapatillas y unas pantuflas de gatito a Jimin. Por suerte para Jimin, había descuento y eso lo calmó. No quería que gastaran mucho en él.

Los dos chicos terminaron de comprar y se sentaron en una zona de descanso del centro comercial. Yoongi había comprado helado y los dos comían con calma.

-Gracias por esto, Yoongi hyung. – dijo Jimin. – No puedo agradecerte lo suficiente por todito.

-No hay de qué, Jiminie. – respondió Yoongi. – Es lo mínimo que puedo hacer por ti. Desde que te traje a casa te tomé afecto, y quiero poder cuidar bien de ti. Perdón si te incomodo diciéndote todo esto, pero quería ser sincero.

-No, está bien. En realidad, me gusta que me cuides. – dijo Jimin con los ojitos brillosos y una amplia sonrisa que hizo que sus ojitos se cerraran.

Jimin estuvo por decirle gracias de nuevo a Yoongi pero se resistió. Se lo podría decir mil veces más y nunca sería suficiente porque, gracias a Yoongi...

La luz volvía a su vida una vez más.

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¡Hola!

Espero que les haya gustado el quinto capítulo de esta historia. Perdón si es que el capítulo no es muy bueno, estuve trabajando en un proyecto para el colegio y esto es lo que pude escribir :(

No tengo nada que decir del capítulo, solo que Yoongi descubrirá algunas cosas pronto.

Les agradecería de todo corazón que dejaran una estrellita, gracias por leer ♡

-pvjl.