Tu y Yo, Dos en un Millón

Dia 4: Sports AU

A Huaisang nunca le gustaron los deportes, le parecían bruscos, cansadores y una pérdida de tiempo.

Ahora bien, siendo así no debería de haber entrenado en la escuela más allá de lo obligatorio en la clase de educación física. Pero, de alguna forma terminó por entrenar tres horas diarias de lunes a jueves y a veces los fines de semana.

Bailaba, saltaba y entrenaba, para terminar el día tan cansado y sudado como una maldita morsa.

¿Y todo eso para qué?

—¡Oye Jiang Cheng, pasa la pelota!

Exactamente para eso.

Poder ver en vivo y en directo, cómo el sexy y muy caliente Jiang WanYin practicaba futbol.

No lo mal entiendan, no era parte del equipo de futbol. Eso ya era muy brusco y con poco estilo para él.

Huaisang era porrista. De esas que llevan un top, falda y pompones, ¿por ser chico podría usar una camiseta y shorts? Sí, pero lo suyo eran las faldas y los tops ajustados.

No puede recordar muy bien cómo empezó a tener un crush por el futbolista más enojón de la Universidad. Simplemente un día sus ojos empezaron a buscarlo en las clases —que no eran muchas porque Jiang Cheng estudiaba economía y él diseño—, en los pasillos o en la hora del almuerzo.

Y por primera vez en su vida a Huaisang le interesó el deporte, yendo a absolutamente todos los partidos en los que competía el equipo de Cloud Recesses. Eran sumamente interesantes y entretenidos —sobre todo la parte en la que traspirado, Jiang Cheng se levantaba la camisa y mostraba sus muy bien formados bíceps.

Como le gustaría ser esa pelota para que aquellos majestuosos pies lo pisaran.

Para la mitad del primer año en su Universidad, Huaisang había caído a los pies de Jiang WanYin.

¿Pero cómo fue que él, la persona más perezosa del mundo para los deportes, terminó en el equipo de las porristas?

Bueno eso se debía ni más ni menos que a su querida amiga MianMian.

—Sabes de todos los chicos de los que te podías enamorar, ¿debía de ser él? Tienes al príncipe del hielo Lan WangJi, al carismático y alegre Wei WuXian, por amor a dios ¡Hasta el pomposo de Jin ZiXuan es una mejor opción! Pero te tenías que enamorar del malhumorado kremlin de Jiang WanYin.

Ah sí, esa era una de sus charlas más típicas, a pesar de que literalmente babeara al ver al de hebras moradas, Luo QingYan no podía concebir la idea de que le gustase. Bueno en un principio Huaisang tampoco lo entendía muy bien, todo Cloud Recesses hablaba maravillas de los jugadores.

Pero había uno que no parecía tener buena fama.

Malhumorado, mandón, enojón y poco sociable eran algunos de los adjetivos que se utilizaban para describir a Jiang WanYin.

Y a simple vista lo era, pero para Huaisang que lo observaba a lo lejos todos los días, era diferente.

Era trabajador, siendo el primero en llegar al aula y el ultimo en irse.

Leal porque seguía y apoyaba a su hermano en todo lo que hacía.

Protector con los que apreciaba, siendo su hermana lo más importante.

Empático, porque jamás dejó que un alumno sea intimidado en su presencia.

Y muchas más que seguramente Huaisang no sabía.

Por ello luego de andar un mes medio llorando porque Jiang WanYin nunca le aprestaría atención, MianMian se cansó y le dijo:

—Entonces únetenos al equipo de porristas.