No puedo... podemos [JONGKEY] ♥

Capítulo 23. Final

Capítulo 23: Final

—Realmente te has descuidado bastante, Kibum. —se repitió a sí mismo.

Haciendo un puchero a su reflejo, Key tiró suavemente de su apagada mejilla, haciendo una mueca al ver su aspecto enfermizo.

Su cabello se había debilitado mucho, así que Jonghyun le había traído uno de sus gorros favoritos; No es que realmente le importara más.

Suspirando, Kibum miró hacia abajo, queriendo mirar las vías intravenosas pegadas a sus brazos, pero decidiendo no hacerlo.

Quería mejorar, realmente quería, pero no hay mucho que pueda hacer, ¿verdad?

—No puedes morir, eres fuerte, Kim Kibum, tú puedes... —susurró entrecortadamente.

Olfateando, lentamente regresó a la cama, esperando pacientemente a que llegaran los demás. El doctor Gong aún no había llegado con los resultados de las pruebas de su padre; el hombre había ido a buscar algo de desayuno para él y para la Sra. Kim, y así, por el momento, Kibum se quedó solo.

La amarga sensación permaneció en su pecho. La idea de morir ya no lo asustaba realmente, de verdad, pero...

Una lágrima se deslizó desde sus cansados ojos.

La idea de tener que dejar a los demás y a Jonghyun atrás... Él negó con la cabeza. Simplemente no podía soportar el pensamiento...

— ¡Tienes que vivir...!

(...)

Sosteniendo la mano de Jonghyun por su querida vida, Key tragó saliva.

—Muy bien, tengo los resultados de la prueba aquí... —El doctor Gong habló con calma, profesionalmente.

Respirando profundamente, sintió la mano de su padre descansar sobre su hombro, al otro lado de la cama.

El susurro del papel fue suficiente para que un escalofrío recorriera la columna vertebral enferma del joven. Un par de labios besaron su frente, los de su novio los reemplazaron mientras tomaba asiento junto a él en la cama.

El doctor Gong desdobló el sobre que contenía los resultados, y todos vieron cómo sus ojos lo recorrían por unos momentos, antes de levantar la vista el doctor Gong esbozó la sonrisa más genuina que había obtenido desde que todo este calvario había comenzado.

—Positivo...

Un suave jadeo salió de los labios de la diva.

—El Señor. Kim, dio positivo a la compatibilidad para el trasplante de la médula ósea.

(...)

Aún dolía...

Tragando el nudo en su garganta, Kibum luchó contra la urgencia de arrojarse en ese mismo momento; su cuerpo estaba atormentado por escalofríos, mientras exhalaba temblorosamente contra el hueco del cuello de su amante.

El agarre de Jonghyun se apretó, cada célula de su ser no quería nada más que ser capaz de hacer que todo lo que estaba haciendo sufrir a su amante desapareciera. Pero en lo profundo de sí mismo, lo sabía... ambos sabían que todo estaría bien ahora.

El trasplante había sido un éxito; Key aún tendría que entrar y ser revisado cada pocos meses, pero en general... ahora estaba bien.

—Te amo —murmuró contra la frente de Key.