Chica Lista! (Bakugou x Tu x Todoroki)

Mi presente, ingreso a U.A.

— ¡Aoi, es hora de desayunar!

Esa voz sonora y relajada, era la que me hacía despertar cada mañana desde hace apenas 8 años, después del que yo llame "incidente".

— ¡Se te hará tarde para la escuela, por favor baja!

Después del "incidente", el gobierno de Japón decidió que lo mejor era llevarme a un orfanato, donde poco tiempo después encontraron una familia que según ellos era adecuada para mí.

Desde entonces mi vida no ha vuelto a ser la misma, ahora vivo con la familia Komatsu. En cuanto a mi padre, actualmente se encuentra preso, me permiten verlo apenas 2 veces al mes, con supervisión constante, no fue fácil conseguir el permiso, fueron muchos trámites, y requirió la autorización de mis padres adoptivos, a decir verdad no fue nada fácil.

—Ya estoy aquí señora Azami—acababa de bajar las escaleras de aquella casa. Me dirigí a aquella mujer alta, con cabello negro revuelto en un moño, de tez bronceada y ojos azules, igual al resto de su familia.

—Cariño, por favor no tengas vergüenza, llámame mami, o mamá, o madre —aquella mujer me miraba con el ceño alegre.

La verdad es que no la considero como mi familia, a nadie en esta casa, de hecho, para mí solo son conocidos. No tengo un lazo sentimental y mucho menos familiar con ellos, en gran parte es mi culpa, nunca permití que se acercaran a mí de tal forma.

—Me encuentro más cómoda llamándola señora Azami —conteste secamente

La mujer solo soltó un suspiro.

—Está bien Aoi —la mujer solo me miraba de arriba a abajo —. Cariño, ¿no quieres que te haga algún peinado?, al menos algo simple, aprovechariamos su hermoso color, se que tu cabello es corto pero se vería precioso en una trenza.

Me limite a negar con la cabeza, no porque no me gustara la idea. Ciertamente, cuando entrenaba en las tardes, siempre me hacia un pequeña coleta. El problema es que odio que me toquen el cabello, de pequeña solo dejaba que mi madre lo peinara, y por simple respeto a aquel recuerdo no permitía que nadie más lo hiciera.

—Oh es verdad, Aoi encontré una modelo que tiene tu misma altura, mide 1.60, no es muy conocida pero...

La interrumpí

—Disculpe, pero como ya le he dicho, no estoy interesada en ser modelo. De cualquier forma gracias.

—Oh. Está bien —dijo con tristeza.

¿Olvide mencionar que la señora Azami trabaja como agente de modelaje? Ella no perdía ninguna oportunidad para recordarme que por mi tez pálida y ojos azul grisáceo, podría sacar un buen provecho para ir a alguna agencia de modelaje, aunque en lo personal no me agradaba la idea.

—Por cierto, ¿puedo pedirte que le lleves esto a tu papá? — Azami me dio una bolsa con lo que supongo era comida—. Se encuentra afuera con Yoichi. Están a punto de irse.

—Bien —salí de la casa, y me dirigí a una camioneta roja, donde se encontraba aquel hombre al que Azami me pidió entregarle la comida —. Señor Issey. —dije llamando la atención de un hombre alto y con aspecto elegante—. La señora Azami me dijo que le trajera esto. —le di la comida.

— ¡Es verdad casi olvido mi almuerzo! Gracias cariño — dijo esbozando una gran sonrisa —. Bueno iré a dejar al pequeño Yoichi a la escuela, sé que es tu primer día en U.A. Siento mucho no poder acompañarte.

—De cualquier manera no sería necesario gracias —Issey solo hizo un puchero.

—Aoi ya es una niña grande papá, puede ir sola a la escuela —dijo Yoichi (mi hermano adoptivo de 7 años), regañando a su padre—. Espero que te vaya bien, aunque claro, eres muy linda y inteligente, seguro te irá bien hermana.