Los amigos de mi hermano

¿Sera verdad?

Camine por las calles furiosa estaba tan enojada quería golpear a alguien de preferencia que ese alguien fuera Liam o Gell... Ya no estaba segura si lo de Liam era una verdadera falsedad, solo quería llegar a casa tomar una taza de chocolate caliente, darme una ducha para regresar la cabeza y dormir...
Faltaban solo unas cuadras para llegara a casa... Y cuando por fin llegue me tome la sorpresa de que mi padre estaba allí, no quería preguntas ni sermones pero que haría... No quedaba mas remedio que enfrentarlo, trate de tomar aire una y otra vez
-hola papi que tal- dije tratando de hacer una sonrisa falsa
-Hola cariño... ¿Te pasa algo?- había notado mi estado
-no nada papi- le estaba mintiendo
-bueno... ¿Tienes tiempo?-
-que se te ofrece- dije con mucho esfuerzo
-platiquemos de lo que sucedió ayer- me dijo mi padre. Se levanto aparto una silla y la puso a su lado para que yo me sentara
-¿no tengo otra alternativa?- era mas que evidente que no
-¿quieres un buen consejo?- me pregunto pero era obvio que tenía que contarle
-bueno pues Liam vino a casa...yo lo invite estábamos viendo pelis, y recibí una llamada era el primo de Camila... el que conocí ayer... Liam se enojo y se fue. En todo el día no me ha llamado, ni siquiera un mensaje ¡nada!. Después de la escuela Mieth me invito a comer con su novio Gell ¿lo recuerdas? y bueno... el saco el tema de Liam yo me puse mal y después me dijo que... Dijo que...- las lagrimas corrían por mis mejillas
-dime desahógate-
-me dijo que yo era una mas en su lista y que de seguro ya se había aburrido de mi- dije finalmente
-los hombres somos unos tontos, nos segamos y en esta etapa por la que están pasando se creen dueños del mundo y hacen lo que quieran... También creemos que las mujeres son como unos trapos de unas pocas usadas y después a la basura... Es probable que el sea uno de ellos... Aunque lo dudo mucho, se ve tan buen chico... Creo que deberías dejar pasar el tiempo si te busca podrás ver que Gell estaba equivocado pero sino no te preocupes vendrán mejores.- concluyó mi padre
-gracias papá... Gracias por todo-
-yo solo quiero ver a mi niña feliz- y me dio un beso en la cabeza -¿quieres que preparemos chocolate caliente?-
-jajaja tu si sabes papi- le dije y nos dirigimos a la cocina para preparar un delicioso chocolate

A pesar de todo no podía dejar de mirar el teléfono en busca de algún mensaje suyo o algo pero nada.