Keyna

CAPÍTULO 7

Hasta que no me revisó un médico de guardia Hunter no se quedó tranquilo, estaba enfadado lo podía sentir pero solo se quedó en silencio. No sabía que era peor, que me gritara hasta que se cansara o que no me dijera absolutamente nada. Desde que me bajé de la ambulancia  y le dije que estaba bien en medio de mi ida temporal , no volvió a mirarme. Hasta que no me aseguré de que el chico estaba bien, no me pude ir y también porque necesitaba que mi madre me recogiera, Hunter estaba trabajando y no podía llevarme. Cuando al fin pude dar con mi madre, me dijo que en 10 minutos estaría aquí.

-Mi madre ya llegó, hablamos mañana Hunter.- él no dijo nada solo asintió sin mirarme y se fue sin más. No podía entender su actitud pero estaba cansada física y emocionalmente a si que sin más me fui al coche donde una cansada Miranda me miraba como si hubiera salido de una película de terror.
-Es una larga historia pero estoy bien madre, he salvado una vida.- mi madre solo me dio un golpe en la cabeza y se subió al coche, yo solo me toqué el lugar y me reí, también subiéndome al coche y sumergiéndonos en el ritmo de la música.
Me di una buena ducha de agua caliente y no saben el gusto que sentí al poder quitarme esta sangre de mi cuerpo. No quise pensar en nada a si que me fui directa a dormir y al cabo de unos minutos caí rendida. Al día siguiente fui temprano a casa de Azzura porque íbamos a pasar una tarde de chicas en su casa.
-Pasa.- vaya cara amiga, la de la noche movida fui yo pero comparada con ella parece que dormí por una semana.-
-No me digas que te quedaste viendo un kdrama otra vez hasta las y tantas.- no pude evitar reírme, siempre hacía lo mismo, pero aún así la entendía, a mi me pasaba igual.
-Solo diré que las 16 horas valieron la pena cada segundo.
Luego de mandarla a darse una ducha, puse en un plato los churros que había traído, y sirviendo el chocolate en tres tasas , cuando estaba todo preparado fui a despertar a Hunter.
Su cuarto estaba a oscuras, Hunter a los segundos salió del baño con solo una toalla , al verme se quedó estático por unos segundos, yo le quité  la mirada, luego de devorarlo con la mirada.
-El desayuno está listo.- dije con la voz entrecortada. luego me tomé mi tiempo para salir de su cuarto.
Me senté en la mesa de la cocina junto a Azzura, esperando a que saliera Hunter.
-Oye Key, necesito preguntarte algo. ¿Te gusta Hunter?.- cuando salió su pregunta me atraganté con el churro, en eso  Hunter apareció en  la cocina.
-Anoche fue increíble, no sabes cuantas cosas me pasaron pero sin duda la mejor parte fue cuando conocí a Hugo.-No lo miré pero sabía que me estaba mirando, Azzura por otro lado me miraba con una ceja alzada, creo que eso contestaba a su pregunta pero la verdad era que ni yo misma me sabía la respuesta.
Al rato de desayunar, nos pusimos a ver pelis, Hunter se unió a los minutos con una tarrina de helado de chocolate.
 Me permití observar su perfil tan marcado, su pelo castaño algo alborotado, como le caía por la frente de manera despreocupada, su barba de 3 días, sus ojos tan verdes y sus labios tan carnosos Así me pegué toda la tarde, fingiendo ver películas mientras observaba a Hunter, sus expresiones ante tales escenas  y cuando menos me di cuenta me había quedado dormida.
Cuando me desperté, estaba en el cuarto de Azzura con uno de sus pijamas, en eso escuché varias voces a fuera y recordé que Azzura me había dicho que vendrían amigos de Hunter a casa. Se me encendió una lucesita en la cabeza, fui al armario de Azzura y cogí un pantalón de seda negro corto con una blusa igual de tiros, Azzura de lo más que tenía eran pijamas sexis , sabía que no le importaría a si que me lo puse y salí bostezando al entrar al salón, haciéndome la recién despertada, me hice la sorprendida cuando vi a los dos amigos de Hunter, bastante guapos la verdad.
-Hola chicos, soy Keyna , mucho gusto.- podía notar la mirada de Hunter atravesándome pero no le di importancia, cuando terminé de presentarme y de darle dos besos a cada uno, me senté en el sillón con Azzura , la cual me miraba con una sonrisa.
-Estás loca Key.- yo solo le apreté la mano con una sonrisa en mi cara.
Poco tiempo después los tres se levantaron para irse a dar una vuelta.
-Nosotras también queremos ir.- comencé a decir.-
- No.
-Venga ya Hun , deja que vengan con nosotras.- dijo uno de los chicos.
-No.
-No nos tardamos,¿Pueden darnos 15 minutitos?.- sin más cogí a Azzura del brazo y la llevé a su cuarto,después de reirnos, nos empezamos a preparar, yo me pinté un poco como siempre ya que estaba morena esta vez.Cogí un traje blanco del armario de Azzura, los recuerdos de lo de anoche me hicieron estremecer pero luego recordé la mirada de Hunter a si que me lo puse sin pensar, este vestido era bastante pegado a mi gusto y era sin sujetador ya que estaba descubierto en la espalda y tenía un escote bastante llamativo delante. Era de manga larga, hasta las rodillas. Me puse unos zapatos con algo de tacón blancos, que tenía Azzura , junto un bolso de manos blanco. El pelo me lo recogí en un moño despeinado, no tenía ganas de planchármelo , no me quedaba sexi pero tampoco me quedaba mal .
Luego de terminar salimos con los tres bomboncitos que nos estaban esperando fuera, nos recibieron dos caras sonrientes y una que me miraba mal.
Llegamos a un bar, nos acercamos a la barra y pedimos cada uno un chupito, para comenzar la noche. En algún momento de la noche, terminé en la pista bailando con uno de los amigos de Hunter, era majo pero no era para nada mi tipo, busqué a Hunter con la mirada y lo vi con mi peor enemiga, la  zorra de Daniella, no me podía creer que estuviera con esa zorra, tenía unas terribles ganas de vomitar y así lo hice, me disculpé con el chico y me fui a vomitar todo lo que había comido en el día. No podía evitarlo, como tampoco podía evitar ir a la barra y pedir una bebida, lo más fuerte que sirvieran .
Luego de eso volvía a la pista, encontrándome a la zorra bailando con Hunter cerca de donde bailábamos los dos chicos , Azzura y yo.
Azzura me susurró que si estaba bien, yo solo asentí. No quise mirarla mucho porque se daría cuenta de que le estaba mintiendo. Al cabo de un rato el alcohol hizo de las suyas , estaba bailando con aquel chico mientras miraba a Hunter, él también me miraba , me sentí tan poderosa que no me importó nada, comencé a bailar, me tocaba el cuerpo, lo movía de la forma más sensual que podía, sabía que no lo estaba haciendo tan mal cuando sentí las manos del chico detrás mía en mi cintura y la cara de Hunter  al verlo.
Cuando sentí que me daban la vuelta , me maree un poco, pero este chico me tenía bien sostenida, cuando creía que iba a besarme, Hunter me apartó de él ¿celos? Ojalá.
-Tio, córtala es como una hermana pequeña para mi.- al salir de la boca de Hunter, algo en mi se rompió, no lo entendía, yo estaba bien con ser como una hermana menor para él, pero ¿por qué me dolía tanto escucharlo de él? No sé si fue el alcohol que me jugó una mala pasada o que, pero fui directa a Hunter y le di un puñetazo con todas mis fuerzas y salí de ahí.

El viento me dio de golpe y caí en cuenta de lo que hice, en eso Hunter salió y me agarró del brazo haciendo que lo mirara
-¡Estás loca o que te pasa Keyna!.-
-¿En serio? una hermana pequeña.- mi voz sonaba casi como un susurro.
-¿Qué?.- cuando se dio cuenta de lo que me refería , me miró como hacía tiempo que no me miraba.- Mira Keyna,solo hablo contigo y soy amable contigo porque eres amiga de mi hermana y porque desde que te conoció es más feliz. Solo por eso.  Ahora mismo tú y yo no estaríamos hablando  si no fuera por Azzura. Jamás me has interesado y jamás lo harás. No te hagas ideas equivocadas conmigo Keyna.- Dicho esto dio media vuelta, entró al bar y me dejó ahí, no sabía que hacer, jamás pensé que sus palabras iban a dolerme como lo estaban haciendo ahora, no iba a llorar. Con la poca dignidad que me quedaba, me fui de ahí, caminé sin rumbo hasta que mis pies no podían más, llegué a una playa, caminé con los zapatos en la mano hasta la orilla y allí me senté, respirando el aire fresco , miré mi móvil . 5:30 de la mañana, en nada saldría el sol. Tenía exactamente 10 llamadas perdidas de Azzura y 5 de Hunter,  y 10 mensajes, los cuales no quise mirar, apagué el móvil y solo me quedé ahí, contemplando el amanecer con las vistas tan bonitas del momento, dejé caer las gotas que estaba conteniendo, y lloré, me desahogué , cuando me quedé sin lágrimas que derramar, me puse en pie, fui caminando sin rumbo hasta que vi una parada de guagua , vi los destinos , uno en particular llamó mi atención, hacía tiempo que no iba y hasta que no estaba a punto de llegar no me di cuenta de las ganas que tenía de venir. Lo confirmé cuando los brazos de mi abuela me rodearon y me apretaron con fuerza mientras no paraba de repetirme una y otra vez que se alegraba de verme y que no me esperaba mucho menos tan temprano.
Llamé a mamá para que se quedara tranquila y le dije que mañana iría directamente a la universidad desde casa de la abuela, que no dijera donde estaba a nadie. Tenía la absurda idea de que ese idiota preguntaría por mi pero también sabía que eso no pasaría.
Al estar allí  acostada junto a mi abuela me permití pensar en Hunter, en que ya  sabía desde el principio que era cuestión de tiempo que Hunter reaccionara así,  sentía que yo sola me había creado expectativas con Hunter que no iban a cumplirse y esa misma noche me prometí, tratarlo como un hermano de verdad, hacer a un lado mis sentimientos o dejarlo ir . Esa noche mi orgullo ganó, eliminé el contacto de Hunter de mi teléfono, me prometí evitarlo todo lo que pudiera y hacer como si no existiera hasta que pudiera olvidarlo.