Keyna

CAPÍTULO 9

Luego de ese día no volví a saber de Hunter, pero por lo que me contó Azzura, siempre que estaba en casa, se la pasaba de mal humor, no hablaba ni con Azzura y eso era raro. Yo por mi parte me dediqué a pensar, sí, a pensar, me estaba comportando como una auténtica niñata.  Hunter tenía razón, puede que me gustara pero no por ello obligatoriamente él debía corresponderme, viviría con un amor no correspondido, sería egoísta, me haría daño a mi misma por estar a su lado.
Estoy llegando a casa de los hermanos, con una bandeja de mis chocolates preferidos, pero la intención es lo que cuenta.
Al llegar saludé como de costumbre al portero, un señor algo mayor pero super amable, me informó de que solo estaba Hunter. Debía enfrentarme a mis demonios.
Con paso seguro me fui acercando a la puerta pero con cada paso mi seguridad se iba a la mierda. Estaba parada en la puerta , no me atrevía a tocar.

-Vamos Kyena, tú puedes.- Entonces toqué la puerta, pero no escuchaba señales dentro por lo que volví a tocar más fuerte. en eso lo escuché murmurar y mi corazón estaba que se salía del corazón. Entonces pasó, un desaliñado Hunter abrió la puerta, su cara de mala hostia cambió a una de sorpresa cuando me vio.

Yo me quedé quieta, con la bandeja en la mano y mirándolo en silencio.
-Traje chocolates.- dije con una voz increíblemente de niña pequeña, genial.-
Su cara de sorpresa me dio un cierto placer, no me esperaba aquí y esta era mi oportunidad.
Con paso decidido me quité los zapatos y los puse en la entrada junto a los otros, puse la bandeja de dulces en la mesa y empecé a abrir la bolsa, destapando mis dulces favoritos.
-Vaya Key gracias por traerme tus dulces favoritos.- jamás pensé que verlo sonreír así dolería, pero lo oculté con mi mejor sonrisa.-
-De nada, es un placer compartirlo con ustedes.
Se quedó callado por unos segundos, mirándome como si pudiera escanearme con esos ojos tan hermosos.
Nos sentamos disfrutando de los dulces y viendo una película, una de acción.
No recuerdo cuando me quedé dormida, pero me desperté en los brazos de Hunter.
-¿Qué..?
-Shhh duérmete..
Estaba tan cansada que me volví a dormir , sentí como me  cogía en brazos y al rato me acostaba en una cama y me tapaba con las mantas, supe que eran las suyas por el olor que desprendían, instintivamente me relajé y quedé profundamente dormida.
Me desperté con un olor realmente delicioso, no sabía cuan hambrienta estaba hasta que ese olor llegó a mí.
En la cocina estaba Hunter, tenía puesto su pantalón de uniforme pero no tenía blusa, su cuerpo marcado me tomó por sorpresa como las demás veces.
Entonces me miró y yo quedé shockeada, me temblaron los pies, jamás me había mirado así.
-Eso que huelo son arepas , ¿cierto?.- dentro del shock , mis tripas rugieron, lamí mis labios.
-Rellenas de queso.
-¿Acabas de llegar de trabajar?
-Si, vine a preparar el desayuno y me vuelvo a ir.
Azzura hizo acto de presencia, seguida por su nuevo novio Dante, el cual me había presentado hace unos días, algo bajito para Azzura  pero bastante guapo, lo que no me daba muy buena espina.
-Hola bella durmiente.- Azzu me dio un beso en la frente y se sentó enfrente mia y a su lado Dante quien me mostró una sonrisa seca.
Hunter sirvió el desayuno y se sentó a mi lado, comimos entre risas.
Al rato Hunter se volvió a ir a trabajar y yo me quedé ayudando a recoger la casa, cuando terminé fui al cuarto de Hunter y le tomé prestada una chaqueta nike negra ya que hacía mucho frío y yo solo tenía un vaquero largo y una blusa de manga corta.
Me despedí de los tortolitos y me fui en busca de aventuras nuevas en la guagua.
Llegué a casa ,estaba sola, mamá había dejado una nota en la que decía que llegaría tarde ya que estaba con Daniel en una cita y que me quería.
Genial casa sola, me fui a bañar y me puse mis mejores galas, una blusa de Hunter que una vez me prestó y nunca le devolví , un moño muy alto y mis calcetines de lana de las Winx. Me puse a ver una serie en Netflix , cuando llevaba 5 capítulos seguidos, el timbre de casa sonó, no quería levantarme pero siguieron tocando.
-Holaaaa.- yo aun estaba en medio shock
-Hola chicas.- estaban mis tres amigas delante de mi puerta , bien vestidas, lo que significaba que tenía que quitarme mis mejores galas.-
Sin más entraron y fueron a mi cuarto, empezaron a sacar outfits de mi armario , yo mientras tanto me quedé en el marco de la puerta a la espera de que alguien me contara que pasaba.
-¿ Alguien me va a explicar por qué están todas aquí y así vestidas?
-Cariño, esta noche hay fiesta en casa de Lucas, sabíamos que no irías por lo que pasó entre ustedes , pero en una fiesta andaaaaa.-Yo me quedé mirando a Carla, mientras Sam y Emma discutían por los zapatos.-
-Voy a ir, solo porque necesito distraerme, pero como ese idiota se acerque a mí, le pateo los huevos.
Miré el outfit que me tenían preparado, una falda de cuero negra, bastante pegada a mi cintura, lo que marcaba mis grandes caderas, cosa que no me gustaba en absoluto, una blusa que era de rejillas negra, la cual iba con un sujetador debajo si no quería que se me viera todo , unas botas negras altas y con algo de tacón, sin duda el outfit más boom que jamás usé, cuando estuve vestida, apenas me reconocía, luego mientras Emma me planchaba el pelo, Carla que estaba estudiando para ser maquilladora profesional, me pintaba.
En fin que me hicieron una coleta muy alta y muy apretada, mis ojos estaban pintados de un ahumado negro, bastante sexi, a diferencia de mi Carla sí que sabía poner las pestañas JAJAJAJA, me puse unas argollas largas en forma de 0 que me daban un toque de diva, un pintalabios morado mate y ya estaba lista, cogí mi bolso de mano morado , me puse mi colonia de salir de fiesta , preparé lo que iba a necesitar en el bolso y sin volver a ver las chichas que se me marcaban con esa blusa me fui, sin pensar más en mi físico.
Cuando llegamos a la fiesta, pude notar como bastantes personas miraban hacia donde estábamos, quería creer que nos miraban porque estábamos muy guapas pero sabía que me miraban a la chica alta, de caderas anchas y con kilos de más que pretendía ser guapa.
-Keyna, estás preciosa¿ vale?
Yo solo sonreí, falsamente como de costumbre.
La música retumbaba en mis oídos, había gente medio desnuda tirada en el césped, un completo caos.
Lucas tenía dinero eso no era algo que no se supiera, pero cuando vi su enorme casa, caí en cuenta mucho más . Pude ver en la piscina a muchas chicas con un cuerpo increíblemente hermoso, sentía tantas ganas de vomitar que me ardía la garganta, les dije a las chicas que iría al baño, en el trayecto choqué con alguien.
-Disculpa.- dije sin pararme a mirarlo, dudaba si con la música me había escuchado pero me daba igual, estaba llegando al baño cuando sentí que alguien me tiraba de la mano.
Iba a decir unas cuantas palabras no muy bonitas cuando vi de quien se trataba
-¿Hugo?.- mi sonrisa se hizo inmediata
-Joder Keyna casi no te reconozco así vestida y pintada, estás preciosa por cierto.
-¿Qué haces aquí?.- estaba sorprendida de verlo, dado que el vive muy lejos de aquí.-
-Estoy con los chicos, vamos, seguro que se alegran de verte.
Yo lo seguí sin rechistar, admito que tenía ganas de ver a los chicos.
-Adivinad a quien me he encontrado.
Todos me miraban pero ninguno parecía reconocerme.
Le metí un golpe en la nuca a Jason. -Tan rápido me olvidan, me siento algo triste.- llevé mi mano a mi pecho de forma dramática.
-Hostias Keyna, casi no te reconozco macho, estás muy buena eh.
Yo solo me reí, este tio era muy gracioso,
Al rato llegaron las chicas y los presenté, resumiendo que me hice cupido ya que Emma y Hugo quedaron como hechizados, las otras dos locas no, son almas libres.
Bailamos toda la noche, no bebí ni un solo vaso, nadita, quería pasarlo bien, recordando todo lo que hacía y haciendo lo que yo quería sin tener alcohol en mis venas.
Me encontré en medio de todo al idiota de Lucas, sobra decir que le di una patada en los huevos, pero luego terminamos bailando todos, Lucas me pasó su bebida , quise negarme pero insistió tanto que no tuve otro remedio, total solo era una copa, al rato me di cuenta de que me estaba subiendo muy rápido para solo ser una copa, sentía mucho calor, por lo que salí fuera. Una vez fuera, me senté en un pequeño banco que había, la gente pasaba y ni me miraba, supongo que este lugar pasaba inadvertido. Luego de un tiempo ya tenía la mente despejada , fue cuando escuché un grito, mi lado de chismosa se hizo presente por lo que fui al lugar donde se escuchaban los gritos,sabía que algo no andaba bien,  según me iba acercando.

Entonces lo vi , un hombre trataba de forzar a una chica, la chica solo lloraba , mientras él le tapaba la boca.

La rabia invadió mi cuerpo y sin más le pegué un puño al chico, agarré de la mano a la chica y salí corriendo de ahí, entramos a la casa y nos encerré en una habitación, por suerte estaba vacía, le puse llave y encendí la luz, entonces miré a la chica.

-D..Daniella..- Tenía todo el maquillaje corrido, nunca la había visto tan vulnerable, la tira de su vestido estaba rota, por lo que dejaba ver su sujetador, entonces me quité mi chaqueta de cuero y se la ofrecí.

-Por favor no digas nada de esto.- me decía entre lágrimas.

-No puedes dejar esto así, Daniella.

-Por favor Keyki.- una sensación extraña me invadió, no me llamaba así desde que teníamos 10 años , nos odiamos a primera vista, luego  fuimos  mejores amigas y terminamos odiándonos de nuevo.

-Vale.- dije entre susurros.

-¿Quieres que te acompañe a casa?

-Sí por favor.

Luego de eso salimos de esa casa y pedí un taxis, nos dejó en su casa, nos trepamos por el árbol hasta llegar a su cuarto, una vez la ayudé a ducharse y la acosté en su cama, me esperé hasta que se quedara dormida, Una vez dormida, cogí mi chaqueta de cuero y bajé nuevamente por el árbol.

Ya no tenía dinero para pedir un taxis por lo que tuve que llamar a la única persona que podría venir a buscarme.

LLAMADA

-¿Sí?.- su voz ronca me dejó aturdida por unos segundos

-Lo siento por despertarte, pero ocurrió algo y no tengo como ir a c..

-Mándame la ubicación en 10 min estoy ahí.- dicho esto me colgó.

Le mandé la ubicación y me esperé a que viniera, a los minutos un auto se estacionó enfrente por lo que intuí que era Hunter, me levanté y cuando estuve a punto de entrar en el coche me di cuenta que no era el de Hun, de ahí se bajó un chico, me miraba furioso, entonces lo recordé, era el chico que quiso abusar de Daniella.

-Mierda.- dije en un susurro. Espero que Hunter venga pronto.

En eso el chico se me acercó  y me agarró fuertemente del pelo.

-¿Pero que te pasa?.- me estaba haciendo bastante daño.

-Maldita perra, si no hubieras intervenido... ahora tú ocuparás su lugar.

Yo solo intentaba forcejear para que me soltara mientras él intentaba arrastrarme al coche, quise gritar pero el me tapó la boca con su otra mano, sentí que este era mi final. Entonces recordé los videos que veía cuando me aburría por la noche, le pegué una patada en sus partes y este me soltó, entonces corrí pero no suficientemente rápido porque este nuevamente agarró mi cabello y me tiró al suelo, fue un golpe seco, no me hubiera ocasionado daño alguno si no fuera porque sentí como mi cabeza caía sobre la piedra , la zona ardía, entonces la toqué, estaba Húmedo, vii la sangre y mi respiración se cortó.. la sangre pronto empezó a caer por mi cara.

A lo lejos escuché el sonido de un coche estacionándose de manera brusca.

-Hunter.

-Estoy aquí mírame no dejes de mirarme.- sentía como hablaba con alguien, estaba pidiendo una ambulancia, mientras me pedía que lo siguiera mirando, pero no podía, mi cabeza dolía  y yo quería que ese dolor acabara, a si qué cerré los ojos y dejé que la oscuridad me consumiera.