Valor innecesario 【ᴛʜᴇ ᴘʀᴏᴍɪsᴇᴅ ɴᴇᴠᴇʀʟᴀɴᴅ】

Capítulo 13

En el suelo se encontraban algunas, el sonido del cierre resonaba en la habitación a medio vaciar, sus pasos rápidos por la habitación resonaban y la chica sólo estaba centrada en algo, irse para siempre.

—¿Carol se puede? —El chico de cabellos blancos se asomó y al notar el desastre que había en el cuarto lo hizo entra y cerrar al instante— ¿Pero qué haces?

—Lo siento tío, pero yo me largo de aquí.

—¡¿Pero porque?!

—No grites... Me voy porque este hogar está lleno de mentiras y yo ya no quiero vivir aquí.

Oliver se acercó a ella y puso su mano en el hombro de la niña —¿De que hablas?

—Simple, ya se todo sobre mi madre, así que me iré con ella —Cerro la última maleta y comenzó a recoger el desastre que había.

Oliver no sabía que hace o decir.

—Aprovecharé que la abuela se fue hoy, además, en tres días es mi cumpleaños y si me llaman no responderé, desde ahora te lo informo —La niña dejo su celular en la mesa de su habitación.

Tomo sus maletas y salió de la habitación, Oliver tardó unos segundos en reaccionar pero cuando lo hizo salió detrás de la pequeña lo más rápido posible —¡Carol espera!

Ella seguía con su mirada al frente.

—¡¿Y a donde irás?!

—¡Me iré con mi madre!

Parecía que esas palabras detuvieron el tiempo para todos, ya que en la puerta principal estaban Zazie y Anna.

Anna se acercó con cuidado a ella y la sujeto de los hombros —¿Qué dijiste Carol?

—Me voy y nadie me puede detener.

Se soltó del agarre de la mayor siguió su camino, miró a Zazie y sonrió para después dejarlo atrás.

—¡Vincent detenla! —Exclamo Oliver.

Él solo negó mientras avanzaba con una caja que había hecho la menor, estaban sorprendidos por ese comportamiento de parte de él. Los tres corrieron detrás de ellos para convencerlos de no hacer esa locura, pero al ver un auto detenerse a la entrada de la residencia y ver a la dama que bajo de él, no podían creer que fuera cierto.

—¿Esa es Emma? —Pregunto Anna sorprendida.

Oliver se acercó a la dama —Eres tu... ¿Emma?

Ella los miró con seriedad y una clase de desprecio haciendo que ellos se sintieran mal, pero empezó a reír a carcajadas —¡Obviamente soy yo! —Los tres finalmente la abrazaron fuertemente, ella correspondió —¿En verdad creyeron que si había "muerto"?

—¿Qué?, No —Respondieron los más grandes.

—Zazie, gracias por ayudarnos —Pronuncio Ray acercándose al abrazo.

—No hay de que Ray, después de todo lo hice ellas.

Anna miro de forma asesina al chico —¡¿Todo el tiempo lo supiste y no dijiste absolutamente nada?! —Zazie comenzó a reír nerviosamente.

—Perdón porque sea repentino pero, nos iremos a Inglaterra, Carol volverá el siguiente mes para continuar sus estudios adecuadamente, nos mantendremos en contacto con Vincent por cualquier cosa.

—¿Qué hay de la abuela? —Anna la miró con preocupación.

La mayor sonrió y miró a la niña —Ya no puede poner una mano sobre ella, Carol conoce la verdad y el juicio ya está de nuestro lado.

—Menos mal —Suspiro Oliver con una sonrisa de alivió.

Carol se acercó a los mayores para despedirse apropiadamente de ellos, se disculpó por su actitud repentina pero ellos la entendieron, ciertamente fue un momento muy sentimental para ellos, más de lo que esperaban por cierto, después de todo vieron a esa pequeña crecer frente a sus propios ojos.
El ver cómo el auto se alejaba les hacía sentir una especie de alivio repentino en ellos, después de todo es algo que debía de haber ocurrido hace años y ellos habían contribuido a una estúpida mentira.

—¿Ahora si nos quedamos sin herencia? —Preguntó Oliver.

Los tres suspiraron —Ahora si se quedaron sin herencia —Revelo Vincent.

Zazie libero una leve risilla —Pero no importa, mientras Carol sea feliz con su madre, todo va a estar bien...

Anna coloco su mano en el hombro del chico —No, va a estar perfecto.

Ellos regresaron al interior de la mansión y se encargaron de acomodar todo para que pareciese que la joven continuaba en casa y no hubiesen sospechas de su "escape familiar".

—Dime Ray, ¿podre conocer a tus padres? —Preguntó Carol mirando el trayecto al aeropuerto.

—Hahaha, vas a conocer a mis padres, a mi hermana y sobrinos.

—E incluso a nuestros mejores amigos —Anexo Emma.

—¿En verdad? —Sus ojos brillaban de la emoción.

—Claro que si cariño, después de todo, todos quieren conocer a mi pequeña flor —Emma acarició la mejilla de la pequeña.

Finalmente el día habían llegado a su destino, recorrieron todo el lugar de arriba a abajo. El sueño de Carol se había hecho realidad, por lo que se mantuvo emocionada por ello.
Mientras estaban descansando, habían llegado a la casa de Isabella, la madre de Ray, estaban en la parte exterior de la casa disfrutando de la hermosa tarde que se alcanzaba a apreciar ese día.

—Asi que, Carol...

—Mande señora.

—Dime abuela o Isabella.

—¿Abuela... Isabella?

La mayor comenzó a reír y asentó —¿Como te has sentido aquí?

—Me siento genial, de hecho hacia tanto tiempo que quería venir y disfrutar del ambiente que hay aquí.

—¿En casa no es igual?

Ella negó —Siempre estaba cargada de obligaciones o deberes, aún que en casa hay un gran patio y piscina... Pero nunca lo pude disfrutar por lo mismo, así que se podría decir que yo no tuve una buena infancia.

La mayor miro en dirección a los más pequeños —¿Y si lo intentas ahora?

Carol dirigió su mirada al mismo lado de que la mujer apreciando como sus hermanitos se divertían en el césped del lugar —Emmh no lo creo, no sería posible que yo lo hiciera, después de todo soy mayor ya...

—Carol, —Posiciono la mayor su mano en el hombro de la niña— sólo inténtalo, ya juzgaras después si se puede o no. Recuerda esto, en la vida solamente se tiene una oportunidad, pero si recibes una segunda o tercera, nunca dudes en usarlas porque ellas ya no volverán cuando lo desees.

La chica miró con cierta sorpresa a la mayor, pero asentó comprendiendo a que se refería, finalmente comenzó a desabrochar sus zapatos, apenas posicionó sus pies en el pasto sintió un cosquilleo y comezón agradable.

—¡Carol, vamos a jugar! —Exclamo la más chiquita.

Ella sonrió de oreja a oreja corriendo en dirección a los niños —¡Si!

Capítulo 13 "La mejor decisión"