(Joseph Joestar x Lectora)

i n t r o d u c c i ó n.

Antes de comenzar, no pretendo ofender la gente muy delgada o pecosa, hablo sobre unos estereotipos de esta época y no pretendo "convencer" de que una mujer solo es una esposa.
Intento hacer mis historias mas reales posibles para dar al lector una sensación de mas conexión, por eso detallo tanto la historia.
Cuando haga de Jotaro y personajes mas adelante, al ser mas modernos, las cosas serán mas "actuales". ¡Gracias!

Todas las familias tienen peleas, en Inglaterra, Reino Unido, la familia Rider no se libraban de esto.

Arthur y Marilyn un matrimonio feliz, tuvieron 3 hijas: Jane, Susan y la pequeña Wendy...

Criaron a sus hijas para que sean excelentes esposas de adultas, del bolsillo de esta pareja pagaron una gran educación alta para estas muchachas, para que el día de mañana sean apicables.

Wendy era la que mas resaltaba, no por su físico que tenía muchas pecas como dalmata, sus cabellos rizados rubios desordenados y sus ojos marrones y grandes como búhos, su complexión era muy delgada... no era por su horrible físico, también por su carácter duro y fuerte.

A diferencia de sus hermanas ella era muy traviesa y rebelde, ella luchó para ser periodista ya que comenzó a darse más puestos de trabajo hacia la mujer.

Sus padres le disgustaba, y le quitaron la herencia, Wendy no sabía a donde ir... y estaba recogiendo y haciendo sus grandes maletas, ¿dónde podra ir? ella solo quería vivir aventuras para expresarlas en esas máquinas de escrituras.

Wendy: ¡Uff..! Ni se que dejarme... creo que he echado todo en mis maletas -miraba a sus maletas que no se podían cerrar y estaba todo metido de cualquier manera-

Sonó la puerta y entro una silueta hermosa, sí, sus hermanas además de ser perfectas esposas eran preciosas... pobre Wendy.

Jane: Oh... Wendy.. ¿¡De verdad te iras?! solo tienes 18 años...¡no lo hagas! acepta casarte con ese tal Robin, no importa tu físico si puedes callarte y obede-..

Wendy la interrumpió.

Wendy: Jane... eres la única que me a apoyado, agradezco tu compasión pero tu lo has dicho, soy muy joven y quiero ver mas cosas que ver una cocina y niños que cuidar... -se levanto de la cama que estaba sentada- no llores hermana, voy a estar bien... 

Jane: ¿¡Y donde irás!? siempre con tus aventuras...¡vive la realidad! estamos viviendo tiempo difíciles, deja la cámara y mira a través de tus ojos lo que ocurre -decía a gritos llorosos, estaba preocupada-

Wendy: No se a donde ir... y créeme que se como están las cosas, soy periodista redacto la realidad.

Jane: Mira... ni sabes doblar bien la ropa... -dijo percatándose de sus maletas abiertas y comenzó a doblar todo lo que había echado- es que deberías quedarte, con ese cuerpo delgaducho tuyo... no podrías buscar tanto trabajo duró, ni para las fabricas de carbón.

Wendy: ¡No me subestimes! Me sorprende que digas eso sabiendo que nos criemos juntas y las cosas que he echo, a lo que te recuerdo que tu solo te sentabas en el césped...

Jane termino de doblar y cerro la maleta para girarse y tener cara a cara su hermana menor.

Jane: Mira Wendy, se lo cabezota que eres, conseguiste rechazar la petición de matrimonio y lograste ser periodista... por favor, estudiemos francés e italiano a la perfección, huye a Italia.

Wendy: Pero en Italia están las cosas peores que...

Jane grito: ¡Ve allí, papá dice que está mejor las cosas!