III - Marinette

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     La chica se burló– deja a mi compañero fuera de esto –exigió, y pareció un intento desesperado de redireccionar la conversación.

     Vale, también podía trabajar con eso.

     — Tú... ya sabes que tu "compañero" es mi mejor amigo, ¿verdad? –le dedicó una mirada de disculpa a Alya que solo sintió a medias. Lo siento, Als, pero, ya sabes. Marinette indicó con los ojos la distancia que había crecido entre ellas. Ya no eran ni de lejos tan cercanas como solían serlo, y cuando aún eran amigas, a Marinette le costó decir que era su "mejor amiga". Y eso no fue solo cosa suya. Alya se quedó mirando con desconcierto y dolor. Pero Marinette era menos positiva, fue porque ya no eran mejores amigas y más cosas que no le dijo a Alya que pasaba tiempo con uno de los héroes que a ella le encantaba perseguir.

     — Mi compañero nunca pasaría el rato con alguien como tú.

     Dios, acaba de romper un récord, ¿no? ¿En serio pensaba que se lo estaba inventando? Con una mofa y un suave movimiento de cabeza, Marinette sacó el móvil del bolsillo y buscó entre sus fotos hasta que encontró lo que estaba buscando.

     No intentaba presumir con la forma en la que giró el teléfono para mostrárselo a la clase, pero definitivamente no pudo evitar la sonrisita maliciosa que curvó sus labios cuando la clase jadeó de nuevo, empujando hacia delante para poder estudiar la foto. Una foto de ella y Chat Noir sentados muy juntos en su diván. Marinette sacándole la lengua a la cámara mientras Chat posaba demasiado kawaii poniendo con los dedos el símbolo de la paz sobre su ojo izquierdo, como si hubiera salido de un anime. Era una de sus favoritas. Habían pasado toda la noche en una maratón de series juntos después de un día especialmente estresante. La foto había sido un efecto secundario de demasiado azúcar, dormir poco y buena compañía. Y por alguna razón, cuando Chat descubrió que ella había sido Multimouse, eso incrementó su "coolness factor" y tenían algo en común.

     Por supuesto, ella no le diría que no era lo único que tenían en común. En cualquier caso, aquello los volvió más cercanos como amigos y quedaban a menudo. Lo cual fue un alivio dado que casi todas sus amigas la abandonaron, de todas maneras.

     Como Bianca se quedó un poco en blanco con la foto, algunas voces empezaron a escucharse a su alrededor.

     — ¿En serio eres amiga de Chat Noir? ¡Qué pasada!

     — ¿Eso significa que también sales con los otros héroes?

     — ¿Cómo es Chat Noir en realidad?

     — Espera, ¿entonces eso significa que de verdad fuiste una heroína? Pensaba que los héroes tenían que mantener sus identidades en secreto.

     Eso era lo que había estado esperando. Silenciando rápidamente a los otros, mirando acusatoriamente a Bianca– Y lo hacen. Pero yo ya no soy una heroína, ¿verdad, Ladybug?

     — Y-yo...

     — ¿Por qué era que no se me permite ser Multimouse otra vez? –Se puso un dedo pensativo en la barbilla, pero ella sentía su propio incendio en su interior–. Estoy bastante segura de que no tenía nada que ver con ser un peligro para la sociedad.

     Se golpeó suavemente varias veces con el dedo, mirando alrededor perdida en sus pensamientos. Pilló otra vez a Adrien estudiándola detenidamente, pero se negó a que tanta perfección la distrajera de joder a esta gente.

     A la mierda las apariencias.

     Si él se molestaba por haber defendido a su alter-ego, entonces que se joda él también. Pero no parecía enfadado. De hecho, tan pronto como le miró a los ojos, una sonrisita maliciosa se asomó a sus labios. Era pintoresco y totalmente fuera de lugar en su rosto angelical, pero, dios, eso despertó cosas en ella. Pero la sonrisilla, junto con la ceja ligeramente levantada, conjuntó con lo que puntualizó después– Sí, ¿qué fue lo que dijo Ladybug?

La importancia de comprobar las fuentesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora