El amante de mi esposa ® KOOKMIN

13.

— ¿Mimi, estás bien?

La menor de la sala miraba preocupada al joven abogado que se encontraba sentado en la mesada de la cocina. En su bello rostro, las pequeñas lagrimas caían por sus mejillas con fuerza, su pequeña nariz de botón daba roja cuál fresa en plena época de cosecha. Mientras que sus pequeñas manos trataban de calmar la imagen de él ante la vista de las dos criaturas frente suyo.

—Yo voy a cuidar de usted— Jeonmi sujetaba la mano de Park, sentado a su lado en la mesada.

— Dios, esto es mi culpa.

Las miradas recayeron sobre el mayor presente. Jeon masajeaba su cien frustrado mientras estaba de rodillas en el suelo sujetando el pie de Jimin.

¿Qué demonios había pasado? bueno. Digamos que ciertas personas, debido a la calentura de la noche pasada, olvidaron limpiar los pedazos de vidrio roto que esparcieron por el piso del departamento de Park. Por lo que tras despertarse, entre miraditas y risas, Jimin ni se molestó en ponerse uno de sus costosos trajes, solamente salió de su habitación tras pasar por el baño a acearse, colocarse unos shorts azules y una camiseta de gran tamaño color beige.

Descalzo.

Su pobre pie había recibido el impacto de los fragmentos y ahora se encontraba sollozando ante los presentes.

Taehyung estaba un poco apartado llamando a una ambulancia que pueda atender al muchacho, pero no le atendían, así que estaba maldiciendo en voz alta, obteniendo que Jeon le gritara que cuide su lenguaje.

— Si no te entienden podemos ir a el hospital.— Jeongguk hablo levantándose del suelo, mirando a Jimin directamente a los ojos, quien bajo la mirada sonrojado.

— No hace falta, estoy bien, no me corte profundo.— Estaba muy apenado, el mayor insistía en que debía recibir atención, pero el ya se sentía cohibido por la que le estaban dando ahora.

— ¿Cómo que no hace falta? Debemos llevarte ahora mismo, ¿Y si es algo grave?¿Y si por no atenderte te terminan amputando el pie?.— Exagero el azabache.

— ¿Qué es amputar?— Preguntó Jeonmi a su padre.

— Que le van a cortar el pie.— Habló Kim sin nada de tacto.

—¡No!.— Ambos niños abrazaron al prlinegro, Jeonmi sostuvo su brazo con fuerza y Jenmi su pierna derecha, evitando el pie herido.

— Nadie le va a cortar el pie a Jimin.—Trato de tranquilizarlos Jungkook.

El timbre de la puerta sonó repetidas veces, Taehyung al ver a ambos hombres ingresos en su burbuja con los pequeños fue a abrir para ver de quien se trataba.

Al llegar ver por el lente de la puerta, vio una cabellera color gris, sonrió viendo como a penas podía verse por el visor. Abrió la puerta encontrándose con una cara llena de preocupación con un bolso tal vez más grande que el entre sus brazos.

— ¡Yoongi! Me alegro mucho de ver-

— ¡¿Dónde está mi niño?!— Gritó pasando por alto a Kim.

Yoongi corrió hasta la cocina divisando a un pequeño Park entre ambos niños y Jeon siendo atendido mientras le sonreían. Se detuvo a mirar, una de sus tupidas cejas se elevó al ver la melosa escena frente a sus felinos ojos. Se acercó a paso lento en lo que el menor lo vio dándole una sonrisa que casi hizo que Min se tropezara con sus propios pies.

— Hola, señor de las papas.— Sacudió su mano la menor. Jimin rio ante el comentario de la niña.

— ¿Cómo que señor de las papas, bebé?.— Pregunto Jeon acariciando los cabellos de Jenmi.