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SIN LUGAR ALGUNO

- Ya Chaeryong, basta - pidió la mayor mientras se frotaba ojos para evitar mirar a la enfurecida menor

- ¿Que le hiciste a Sakura? - pregunto la menor aún parada en frente de ella con una cara acusatoria

- Chae ¿Tu crees que tu hermana sería siquiera capaz de dañar a alguien? - pregunto Minju mientras se paraba para llevarla al segundo piso, Chaeyeon necesitaba espacio y Minju lo comprendía, sin embargo sabía que Yena tenía razón, Chaeyeon tal vez jamás la quedria, podía vivir con eso.

- Minju quédate - pidió Chaeyeon aún sentada en el sofá con la mirada pérdida, Chaeryong vio la situación y subió enojada a su habitación, su hermana había dañado a Sakura no sabía cómo, pero la odiaba en este momento, y si Minju tenía algo que ver también la odiaría

- ¿Necesitas que te traiga algo? - pregunto Minju poniéndose en cuclillas para mirarla, la chica bonita había encontrado una fascinación en verla

- ¿Soy una mala persona por irme? - pregunto Chaeyeon con los ojos cristalizados debido a las lágrimas que amenazaban con caer por su triste rostro

- No eres un mala persona - dijo Minju posando su mano en el rostro de la pelinegra - No puedes ser una mala persona solo por buscar lo mejor para ti y tu familia

- La dejare sola - dijo Chaeyeon ya sin poder controlar más sus lágrimas - Yo realmente la quiero Minju, quiero a Sakura no por simplemente estar ahí o por apoyarme cuando nadie quería hacerlo - dijo tratando de sacar todo aquello que no podía decir frente a la castaña - Ella me hizo una mejor persona, vio algo de luz en mí cuando todos los demás solo veían tinieblas, yo sé que no fui la mejor para ella Minju, yo losé pero ¿Cómo podía serlo? Sakura es simplemente alguien a quien nunca pude realmente alcanzar, yo intenté abrirme con ella, pero no era para que me conozca más, yo solo quería retenerla Minju, quería que almenos sintiera compasión y no me dejara, pero ella debe estar cansada, tan cansada, y no la culpo, pero si yo fui quien provocó esas heridas en ella, si soy una mala persona...

Minju vio que Chaeyeon más allá de cuidar de su mamá y Chaeryong también cuidaba de Sakura, a su propia manera, en silencio, la cuidaba al no contarle de lo duro que era vivir para Chaeyeon, ellas dos tenían una relación más allá de un simple gusto, eso era mas, cuando simplemente prefieres tu propio sufrimiento al de la otra persona y Minju entendió que Chaeyeon en ese momento no necesitaba una nueva novia, necesita un apoyo, una amiga, alguien con quién contar y ella quería ser esa persona

- No llores - pidió Minju tratando de sonreírle, sin embargo ella misma estaba ya llorando, porque ella sabía lo difícil que la vida había sido para Chaeyeon, y tuvo que cargar con eso sola, pero ya no tenía que ser así, la chica bonita se encargaría de que Chaeyeon ya no tuviera que ocuparse de todo, quería que la pelinegra viviera plenamente, que viviera para ella misma y no para los demás - Chaeyeon - llamo su nombre mientras buscaba sus ojos - Todo estará mejor Chaeyeon, lo prometo.

Ambas lloraron, lloraron en aquella que sería su última noche en aquella peculiar casa, y simplemente no estaban listas para lo que estaba ahí afuera, pero Minju no dejaría a Chaeyeon sola, y si estaban juntas podrían sobrellevarlo.

°

- Oh Yena ¿No encontraste a Chaeyeon? - pregunto la madre de Sakura al ver como la joven había vuelto sola

- No encontré a nadie en casa - mintió Yena para entrar a la casa - ¿Ya despertó? - pregunto la pelirroja esperando una respuesta positiva

- Aún sigue sedada, es mejor para ella - dijo su madre con tristeza en los ojos - El doctor dijo que era mejor, así ella no se sigue rascando, lo bueno es que ya curaron sus heridas y  cicatrizaran pronto

- Lo siento tanto Mihii - dijo Yena sinceramente mientras ambas comenzaban a tomar té - Yo debí darme cuenta antes - dijo Yena mientras se recreminaba el no haber estado al pendiente de la castaña - Yo, yo lo siento tanto...

- No es culpa de nadie - dijo su mamá mientras suspiraba profundamente - El doctor dijo que posiblemente era un tic reciente por el estrés, no estoy segura, es solo que yo no tengo ni la menor idea de porque lo hace, yo me siento impotente al no poder ayudarla

El ambiente tenso en esa casa se podía sentir, Sakura siempre podía llenar cualquier lugar con una atmósfera alegre, y que no esté ahí jugando, o cantando, contando alguna tontería, se podía sentir de gran manera

- Es bonito ¿No crees? - comento Mihii mientras observaba aquel árbol que estaba en el jardín - Cuando Chaeyeon lo planteo recuerdo lo feliz que estaba Sakura, ella no dejo de regarlo ni un solo día, aveces solo se sienta y le habla, jamás he juzgado a mí hija, yo lo note - dijo su madre mientras algunas lagrimas comenzaban a aparecer en sus ojos - Note que Sakura quiere a Chaeyeon, más de lo que se suele querer a un amigo, cuando vinimos ella estaba dispuesta a ser la mejor en todo, pero cuando conoció a Chaeyeon ella, ella simplemente quiso dejar de ser la mejor en todo, solo quería que Chaeyeon creciera junto a ella, quería poder ser la mejor a su lado, y ese árbol significa todo eso, quisiera saber si Chaeyeon sabe que es lo que pasa con Sakura, pero creo que no lo sabe

Yena tambien lo sabia, sabía que ambas eran simplemente lo que eran, y ella jamás podría cambiar eso, pero quería tan solo intentarlo, pero ahora era diferente, ahora estaba Yuri, es decir estaba Seungkwan, Seungkwan pero ¿Estaría bien dejar nuevamente todo para ir detrás de Sakura?

- No tienes porque quedarte Yena- dijo la mamá de Sakura tratando de sonreírle a la menor

- Lo sé, pero quiero - lo siento.

ELLA ES LEE CHAEYEONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora