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I

- Cariño, puedes contarme lo que sea - susurro Seungkwan al oído de su ahora preocupada enamorada - lo que sea que te preocupe, solo dilo

Yena quería contarle que se había estado "viendo" con su hermana, pero no podía, no quería perderlo, realmente lo quería, sin embargo Yuri, Yuri estaba demasiado presente.

- Yo solo estoy preocupada por Sakura, hace unas horas que la vi y realmente se veía mal - dijo la pelirroja mientras hundía su cabeza en el pecho del más alto

Seungkwan sonrió, y comenzó a acariciar su cabello para tranquilizarla, el era alguien hermoso no tan solo por afuera si no también por adentro

- Hey - la llamo mientras delicadamente la llevaba hacia atrás para que pudiera verlo - Todo estará bien Yena

- Lo sé - dijo Yena volviendo inmediatamente a abrazar el cuerpo del mayor, quería sentir algo, quería poder sentir lo mismo que sentía por Yuri o Sakura

- ¿Quieres venir a mí casa? - pregunto Seungkwan tomandola d ella mano para comenzar a caminar

Yuri estaría ahí, y si bien tan solo la había visto unas dos veces más, realmente no llegaron a nada más que a besos y toques, pero aún así le aterraba la idea de confrontarla

- Vamos ¿Si? - pidió el mayor mientras la miraba con una sonrisa - Mamá te extraña mucho y Yuri ha estado un poco extraña desde que ya no vienes

- Está bien

La llegada de Yena a la vida de Yuri se podía resumí como desastre, Yuri siempre había querido a Yena, incluso si ella era mayor, incluso si ella estaba con su hermano, incluso si ambas eran chicas

- Vamos Yuri saluda a Yena - le regañó su madre al ver cómo la menor subía directamente a su cuarto ignorando a Yena

Yuri estaba nerviosa, hace unos días que no había visto a Yena y el ahora hacerlo simplemente la ponía nerviosa, ella jamás dejaría a su hermano, lo sabia, lo podía sentir así que se metió dentro de sus colchas solo para atraer las memorias de ella y Yena ahí

- Yuri abre - pidió Yena del otro lado de la puerta

La menor dudo, sabía que si habría volvería a ceder, volvería a Yena, y si bien no le molestaba del todo, sabía que solo iba a ella cuando lo necesitaba, no cuando quería

- Está abierto

- Sal, tenemos que hablar - dijo Yena la cual había cerrado la puerta y se había sentado en el borde de su cama

- No quiero - murmuró la menor aún mentida en su cama

- Yuri no actúes como niña, sal

- No soy una niña - reclamo Yuri saliendo de entre las mantas para sentarse

- ¿Ahora porque estás actuando así? - pregunto Yena acercándose a Yuri, Yena solo quería olvidar su día, y Yuri era la mejor opción para eso, la llevaba a un lugar mejor así que la tomo de ella mejilla y le dejo un beso

- Yena espera - pidió Yuri alejándose - Seungkwan está aquí

- Está bien, está abajo cocinando con tu mamá - dijo Yena volviendo a besar a la menor, Yuri llegaba hasta el cielo con ella tal vez incluso un poco más alto pero no se sentía bien

- Yena no - dijo Yuri volviendo a poner distancia entre ambas

- ¿Que pasa? - pregunto Yena, la mayor estaba un poco ansiosa, solo quería a Yuri, y ella al parecer no quería nada

- No quiero ser el remplazo de nadie - dijo Yuri mirando hacia abajo - Ni el de mi hermano, ni el de Sakura...

- Oh vamos Yuri tu sabías que..

- No Yena, no sabía que sería a donde vendrías cuando todo va mal, no soy un maldito juguete, ni una distracción, disculpa por no poder mentirle a mí hermano como tu - dijo Yuri enojada - Deberías decírselo, merece saberlo

- Yuri no entiendes, el no puede saberlo

- ¿Por qué? ¿Por qué yo fui un desliz? - pregunto Yuri con una sonrisa burlona en el rostro - ¿Te da miedo que te termine o que se de cuenta de que no eres lo que pareces?

- Yuri tu no me conoces...

- Yena ni tu misma te conoces - dijo la menor parándose de la cama - Eres tan buena mentirosa que incluso te lo crees, te creaste la mentira de que Sakura te necesitaba todo el maldito tiempo y te lo creiste, en tu versión Chaeyeon es la mala ¿Pero realmente lo es? Tu no eres más que mentiras Yena, el problema contigo es que no sabes lo que quieres

- Yuri yo quiero a tu hermano - dijo Yena mirando a Yuri

- Pues al parecer no lo suficiente - dijo Yuri mientras abría la puerta de su habitación - Yo no le diré nada, lo prometo, porque me gustas Yena, pero tú no sabes lo que eres, o lo que quieres, no sabes apreciar a alguien que lo daría todo por ti, porque piensas que alguno de estos días Sakura vendrá y te dirá que te quiere, pero Yena tu y yo sabemos que ese día no llegara, tu no puedes renunciar a ella, pero yo...

- ¿Tu que? - pregunto Yena sin poder creer lo que escuchaba

- No soy un juguete, al que vienes cuando Sakura te rechaza - dijo Yuri con lágrimas en los ojos - y tampoco soy la persona con la que te distraes mientras Seungkwan no está

- Yuri, no es así - dijo Yena tratando de acercarse a la menor para que no llorara - Yuri yo...

- Tu no puedes renunciar a ellos Yena, no puedes renunciar al como te hacen sentir - dijo Yuri comenzando a llorar - Pero yo si puedo renunciar a ti Yena, y lo haré, porque quiero amar a alguien quien también me ame

- Yuri - llamo Yena tratando de tocar la mejilla de la menor

- No - susurro Yuri alejándose de Yena - Solo vete

- Yuri, porfavor...

- Vete

Hola, bueno espero que estén todos bien, me disculpo por haberme demorado tanto en los últimos capítulos, es tan solo que no me había estado sintiendo muy contenta con como he estado escribiendo está historia, sin embargo creo que ya estoy mejor, espero les guste, gracias por seguir leyendo.

ELLA ES LEE CHAEYEONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora