CHAPTER 4: FAMILY SCARS

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Gabrielle Mitchell sale molesta de sus clases de Economía en el Earth Institute de la Universidad de Columbia donde ha comenzado su carrera universitaria apoyándose con la fortuna familiar que le heredaron sus padres, además de las relaciones que ...

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Gabrielle Mitchell sale molesta de sus clases de Economía en el Earth Institute de la Universidad de Columbia donde ha comenzado su carrera universitaria apoyándose con la fortuna familiar que le heredaron sus padres, además de las relaciones que su abuelo, el patriarca Mitchell tiene con la mesa directiva de la universidad; su molestia es solo una consecuencia de las últimas semanas que han sido realmente pesadas: su abuelo ha empeorado considerablemente, evitando salir de la Mansión Mitchell/Sauer en Staten Island, mientras su tío Matthew poco a poco ha tomado control de las acciones familiares que comparten los tres en la Zatanus Corp. evitando que ella participe activamente.


Gabrielle no se siente cómoda con la relación que su familia tiene con la empresa multinacional, esto debido a los constantes problemas entre el señor Blackheart y el patriarca Mitchell, que empezaron diez años atrás cuando sus padres y su hermano... Cuando Gabrielle comenzó a vivir en la finca familiar de Staten Island, perdiendo todo contacto con la gente con la que había crecido hasta ese momento. Su abuelo fue demasiado sobreprotector, quizá por la forma tan abrupta en que acabaron todos aquellos años, sin embargo, Gabrielle no recuerda mucho de esa época, solo la noche en que su hermano desapareció, sus últimas palabras. El miedo de su abuelo por perderla provocó que continuamente pelearan los dos, sobre todo por el deseo de Gabrielle de vivir como cualquier chica de su edad, sin embargo, el anciano Mitchell ha mantenido a un par de guardaespaldas que cuidan de ella diariamente.


Donald, el guardaespaldas personal de Gabrielle, la espera en St. Nicholas Park, su impaciencia ya es notoria, más porque la joven tiene la costumbre de desaparecer continuamente; en una ocasión, cuando se acercaba su cumpleaños número diecisiete, Gabrielle y sus guardaespaldas habían asistido a una obra teatral en Broadway, pasando los cuarenta minutos, ella pidió permiso para ir al sanitario, escabullándose hasta los camerinos (Sigue sin entender cómo consiguió eso) y escapando por el acceso lateral del edificio, sin embargo, su escape duró poco: los guardaespaldas ya habían hablado con la compañía teatral que al notar que la adolescente escapaba por los pasillos traseros del teatro, informaron a los agentes que siguieron la señal del GPS integrado al chip informático que le inyectaron en la nuca años atrás, llegando hasta Bryant Park, donde evitaron que abordara el metro en la estación.

- Te tardaste niña – El guardaespaldas la mira fijamente, desactivando el GPS de su móvil y llamando al automóvil automatizado Lincoln/Worth que se acerca a ellos.

- No te importa Donald- el automóvil se aparca, permitiendo que Gabrielle y su guardaespaldas ingresen, iniciando su viaje hacia su penthouse en 432 Park Avenue - ¿Cómo está mi abuelo? ¿Sabes algo?

- El señor Mitchell espera que vaya hoy.

- ¿Está más grave? – A pesar del reciente distanciamiento con su abuelo, Gabrielle se muestra preocupada, insegura de visitar al anciano patriarca; el vehículo toma la calle de Central Park West.

DARK SHADOW. Sombras al acechoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora