EL LISTON

EL CONTRATO

BEN

No lo podía creer, eran las 8:15 a.m y no había abierto la tienda, y era el maldito dueño. Menos mal que era el dueño pero aunque eso no explica porque llego tarde y mi empleado está sentado en el andén esperando a que yo llegue. No sé porque el despertador no funciono hoy, pero es la primera vez, cuando lo mire estaba la alarma puesta, tal vez lo apague y volví a dormir ¿no?

-Hola Kenny- saludo a mi empleado y mano derecha, él no es como yo, tímido e inseguro de su vida, él es alegre y tiene ya toda una lista de mujeres con las cuales ha tenido mucho, mucho sexo. Una noche olvide mi bolso en la cafetería y me devolví por él, Ken tenía que cerrar esa noche, pero cuando llegue él estaba en una mesa con una chica pelirroja y muy bonita teniendo sexo, yo no sabía qué hacer, si regañarlo o sentirme mal porque dicha escena no me excito en lo absoluto, así que o deje pasar y me fui...si, me fui sin mi bolso, aunque fue buena idea, pues él me dijo que se había acostado con una chica al día siguiente, y que el novio de ella aprecio y casi se pelean, si no hubiera sido por la pelirroja, hubieran destruido mi café.

-Uy, ¿Qué te paso hermano? ¿Mucha acción anoche o qué?-Ken puede ser a veces muy vulgar en todas las palabras del diccionario. Ojala yo pudiera ser así de extrovertido, pero soy todo un estúpido, lo sé y me lo han dicho

-¿q-q-qué? Claro que n-no, solo que mi despertador tal vez no funciono, sabes que no soy como tu

-¿Cómo yo? ¿Cómo soy yo?

-pues...espontáneo y se...

-¡Seguro! Si, esa es la palabra mí querido jefe. A ver, sé que no te gusta estar rodeado de gente y eso es un poco contradictorio teniendo en cuenta de que posees un café que es muy popular en esta parte del pueblo de mierda, pero deberías saber que se tu pequeño secreto, el cual no amaneces con una chica hermosa en tu cama cada mañana de la semana o incluso una vez a la semana

Si, él sabía lo que yo era, pero no era algo claro aún, incluso yo estaba confundido

-Bueno, eso no importa, tenemos que trabajar- abro el café mientras el empieza a parlotear sobre cómo estaba de buena mi vecina, sí, mi vecina le hace el favor cada 2 días, están hechos el uno para el otro

A las 10 menos 15 minutos, entra alguien, pero no sé porque me resulta conocido, es un hombre muy guapo que le luce muy bien con los trajes, me recuerda a...

-Jonathan- mierda, lo dije en voz alta, ¡coño!

-Eh, hola Ben, ¿Cómo estás?

-Ehhh...h-hola, bien...-estoy hecho un puto tomate, nunca pensé que volvería ver a este hombre, hace mucho tiempo que no me siento atraído por hombres, pero este hombre hace que mis miedos e inseguridades de quien debo de ser en la vida salgan a colisionar

-Quiero un late de canela y chocolate con espuma en el borde pero no en el centro- el hace una cara de disgusto pero no sé porque ¿lo habrá dicho por decir?

-E-s-eso es al-algo raro per-pero está bien, es-espera- ¡mierda! ¿Por qué tengo de tartamudear en esta situación? Apuesto a que se dio cuenta de que soy un tomate nervioso por su maldita presencia, ¿qué hago? Llamar a Ken ¡sí! Soy un genio

-Hazlo tú por favor, confió en ti- dice Jon a mi espalda, ¿sabe leer el pensamiento? ¿Qué? ¡No! Jon 1- Ben 0

-Oh...por supuesto- ¡sí! No tartamudee jajajajajajajaja *risa maligna*

-¿Por qué te ríes así?- ¿Qué? ¿Por qué esta mañana nada me sale bien?

-Oh, lo siento...ehh... ya vuelvo- ¡mierda!