Don't Judge Us

Capítulo 1

°Isabela

Me desperté por el sonido de mi alarma que indicaba que ya debía levantarme para ir a la universidad. Me volví para despertar a mi novio, Julio.

—Amor —le digo.

—Noo —dice y me abraza.

—Debemos levantarnos

Bufo y se levantó para irse a bañar no sin antes darme un beso de buenos días, como ya es costumbre.

Julio y yo llevamos de novios un año y medio y hace unos meses decidimos vivir juntos para que ninguno tuviera que levantarse temprano para ir a recoger al otro e irse a la universidad.

Julio salió de bañarse quince minutos después y yo me metí a bañarme. Quince minutos después ya me estaba alistando mientras Julio se terminaba el desayuno.

Salimos del departamento directamente a la universidad. Julio estudiaba audio visuales y yo criminología, lo que siempre soñé con mi mejor amiga de la infancia. Luego de que mis padres decidieran que nos íbamos a mudar a Brasil por su trabajo no la volví a ver, la última vez que la vi fue en aquel parque de Buenos Aires. Cuando me mude a Argentina (hace unos tres años) tuve la vaga esperanza de volver a verla, pero hasta el momento no la he vuelto a ver, algo que me pone bastante triste, me hubiese gustado despedirme de ella y pasar más tiempo juntas.

—Amor, te dejo —me dice Julio sacándome de mis pensamientos— Voy con Guido, Alan y André

—Adiós —me despido.

—¡Amiga! —saluda Giulia una de mis mejores amigas, novia de Guido y mejor amiga de Julio.

—Hola Giu

—¿Como estás —pregunta Agus, otra de mis mejores amigas y novia de Alan.

—Bien y ¿Ustedes?

—Bien —responde Dani, una de mis mejores amigas y novia de André.

—Me alegro

Luego de nuestro saludo usual nos fuimos cada una a nuestras clases, yo iba para un salón distinto al de ellas, pero siempre nos saludabamos, es como algo nuestro. Ellas estudian pediatría y yo criminología.

Las clases pasaron igual que siempre, aburridas y eran más aburridas cuando no tenía a mis amigas, si estuviera con ellas de seguro serían un poco menos aburridas.

Llegó el final de las clases y yo salí de la universidad a una velocidad que solo dejé mi humito, no quería quedarme más tiempo en esa cárcel, quería llegar a mi camita y dormir, así que salí disparada al parqueo para esperar a Julio como ya es costumbre. Él llegó minutos después con Alan, André y Guido. Los saludé. Julio de seguro vio mi cara de cansancio y me abrió el auto para que me pudiera meter y eso hice sin pensarlo dos veces. Entre, puse el aire acondicionado, hice el asiento del copiloto para atrás y cerré los ojos.

Unos minutos más tarde Julio abrió la puerta y yo me reincorpore. Julio prendió el auto y tomamos rumbo a nuestro departamento. Cuando llegamos me quite los zapatos, blusa, pantalón para ponerme algo cómodo y acostarme a dormir. No se porqué estaba tan cansada, solo se que estaba cansada. Julio entró a la habitación, se cambió y se puso en el escritorio a hacer lo que supongo que es una tarea.

(...)

No se cuánto tiempo pasó, solo se que ya estaba oscuro y Julio estaba a mi lado durmiendo. Me levanté con todo el cuidado de no despertar a Julio y me fui a la cocina. Vi la hora: 8:30. Bueno, hoy temprano no me iba a dormir. Me puse a buscar algo de comida, tenía demasiada hambre, no comía nada como desde el desayuno hace aproximadamente unas 13 horas ¿Como aguanté tanto? Soy un barril sin fondo y que no coma algo cada hora, máximo dos es algo raro en mí. Estaba tan ida en mis pensamientos que no sentí como alguien me rodeaba con sus dos brazos fuertes y me daba un beso en el cuello. Me volví para encontrarme con el perfecto rostro de Julio.

—¿Tú no estabas dormido? —le pregunto.

—Si, pero no te sentí

Me dedicó una hermosa sonrisa, típicas en él y lo abracé. Cuando me separé del abrazo me dispuse a buscar algo de comer.

—En el microondas esta la cena —me informa Julio.

—¿Que hiciste?

—Pollo y de tú favorito

—Uhh ¿Sabes que te amo y eres el mejor novio del mundo?

—Mmm sí

—Engreído

—No, solo que tengo un megaego

Nos reímos y yo me senté a comer, Julio me acompañó aunque ya él había comido. Luego de un rato terminé. Soy de las personas que comen lento. Lavé el plato, me fui a lavar los dientes y me fui directo a la cama donde Julio estaba acostado. Me acerqué a él, y lo besé apasionadamente....

(...)

Me levanté dispuesta a irme a bañar, pero Julio me tenía abrazaba con fuerza la cintura por lo que no pude escaparme. Íbamos a llegar tarde por culpa de ese mocoso guapo y perfecto.

—Mocoso —le digo— Levántate

—Noo —dice volviendo su hermoso rostro.

—Julio, arriba

—No, estoy cansado, ayer tuve una noche movidita —dice con picardía.

Sonreí y me sonroje. Le quite la mano de mi cintura y me fui a bañar. Luego de quince minutos ya estaba afuera dispuesta a echarle agua fría a Julio si no se levantaba, pero para mí sorpresa estaba sentado en la orilla de la cama ido viendo un zapato.

—Ve a bañarte —digo tirándole una media para sacarlo de su viaje ancestral.

Se sobresaltó, me mando una mala mirada y se levantó para irse a bañar. Me vestí y bajé a preparar el desayuno. Luego de unos veinte minutos sentí unos brazos rodearme y un beso en mi hombro.

—Buen día —me dice Julio.

—Bom dia ¿Tudo bem?

—Todo muy bien —me da un beso en la mejilla.

Desayunamos y nos fuimos a la universidad. Luego de unos veinte minutos, llegamos. Julio se estacionó, recogimos nuestras cosas y como ya es costumbre, nos fuimos a topar con nuestros amigos para luego tomar caminos separados.

Iba caminando a mi salón, choque con alguien y todos nuestras cosas cayeron al piso. Volví a ver a la persona y me llevé la sorpresa de mi vida.

Esta historia será corta de 10 capítulos♥️
Capítulo muy aburrido, pero próximamente se viene lo chido.
¡Espero les guste! 💫♥️