— ¡¿Ethan?!
Sentí una rabia profunda crecer dentro de mí, mientras esperaba a mi hermano. Él asomó su cabeza por la puerta de mi habitación, mirándome tímido.
— ¿Sí?
— ¿No que tenías novia? —Dije, tratando de calmarme— ¿Porqué te ligas a Joan cuando tienes novia, idiota?
Frunció el ceño y se adentró a mi habitación.
— No tengo novia...
— ¿Y quién era la chica que salió del baño la mañana siguiente de tu cumpleaños?
— Ella...
Vi como dejaba su mano encima de la silla de mi escritorio. Se rascó la cabeza y volvió a su postura normal.
— Era una chica —Completó.
— ¿En serio? No me había dado cuenta, sus pechos no se restregaron en mi cara cuando salió del baño. Para nada.
— Era una chica, la cual me acosté con ella una noche y...
Le corté poniendo una mano en su cara.
— Me da lo mismo. Yo pido a Joan. Es mía.
Una sonrisa juguetona creció en sus labios.
— Bien. Pero ya tengo su número.
— ¿Ella te lo dio?
Guardó silencio y me miró arrepentido.
— Si digo que lo saqué de tu celular, ¿te enfadarías?
Negué con la cabeza al momento que ponía los ojos en blanco.
— A veces me pregunto quién es el mayor —Susurré sin mirarlo.
— ¡Carteeeeer! ¡Ethaaaan!
En menos de un segundo, Jessica apareció por la puerta sonriéndome. Ethan dio un salto en su lugar al escucharla.
— ¡No griten! —Exclamó mamá.
— ¡Tú estás gritando! —Le devolvió mi padre.
— ¡Eso es mentira!
— ¡¿Porqué gritas si estás en la misma habitación?!
Escuchamos un golpe y los gritos callaron.
— En fin, les venía a pedir un favor —Dijo Jessica sonriendo— ¿Pueden ir a comprar unos ingredientes que anoté en ésta lista?
De su bolsillo sacó un papel amarillo y se lo entregó a Ethan, para luego mirarme a mí.
— ¿Y por qué los dos? —Pregunté haciendo un puchero. No quería salir.
— Porque mamá me ha mencionado que no los ve mucho juntos compartiendo como hermanos, así que creo que ésta es una buena oportunidad.
Miré a Ethan y luego la lista.
— No creo que...
Unos minutos más tarde, ya nos encontrábamos en el centro comercial. Jessica nos había casi obligado a ir a comprar sus queridos ingredientes, y nosotros no tuvimos más opción que ir (además de que mamá nos empujó de casa)
Cuando llegamos, partimos la lista a la mitad y nos dividimos para buscar las cosas. Ya tenía lista la mantequilla, una cosa extraña que se llamaba polvo y unos decorativos color rosa en forma de flores.
Saqué mi celular del bolsillo trasero de mis pantalones para avisar a Ethan de que ya estaba listo con las cosas, pero me di cuenta de que estaba apagado. Fruncí el seño y esperé a que prendiera como siempre, sin embargo, cuando la pantalla se iluminó, aparecieron millones de llamadas perdidas de Joan.
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¿Porqué no te gusto?
Romansa→ésta historia está narrada por un chico. Después de que Susan rompiera con Carter, el chico queda con el corazón roto. Pero llegará una chica, la cuál le hará sentir incluso más cosas de las que sintió por su ex-novia. Carter, el chico adict...