05.

484 39 3
                                    

Luego de eso no supe de Joan hasta una semana después.

Había salido con Jessica en algunas ocasiones, al igual que con Ethan. Según mamá, ya podíamos pasar tiempo con nuestros amigos ya que el tiempo con hermanos ya estaba hecho. 

En fin, era un día como cualquier otro cuando me encontré con Joan, que no andaba sola. Un chico de cabello castaño claro la tomaba de la mano y los dos veían una de las tiendas del centro comercial. Joan se veía feliz, en cambio el chico no. Una mueca en el rostro es lo que más me sorprendió de él en ese día.

Me fui del centro comercial y llegué a mi casa normalmente. Ya había pasado esto con Susan, lo podía pasar perfectamente con Joan. O eso creía.

Mi teléfono empezó a sonar, y lo tomé con algunas dificultades en el camino (ya que me tropecé con el cable del computador que tenía abierto y casi me mato mientras me volvía a parar)

— Quien sea que esté llamando me debe algo por que casi muero —Dije al atender, sin siquiera ver el número.

— ¿De qué hablas? —Escuché la voz burlona de Jeff por el otro lado— En fin, hoy llegaron mis primos y me pidieron que invitara a mis amigos. Mis padres salieron y dijeron que no volverían hasta la mañana. ¿Vienes?

— Eh... —Contesté no muy animado.

— Estará Ronnie. ¿Te acuerdas de ella?

Entre cerré los ojos y al recordar casi me caigo del susto.

— No. Ella está loca.

— Sólo fue un amor de verano. Creo que ahora ella está en un noviazgo desde hace seis meses...

Rodé los ojos.

— Además —Agregó mi mejor amigo— No creo que estés haciendo algo productivo allá ahora, ¿o me equivoco?

Miré a mí alrededor y me encogí de hombros.

— Tengo que ordenar mi habitación.

Me lo imaginé rodando los ojos.

— Te daré diez dólares.

— ¿Tanto quieres que vaya?

— No... Es Ronnie —Suspiró— Iremos a un club que hace poco abrió y dicen que es bueno. Ella quiere ir pero su noviecito no está aquí y le ofrecí yo ser su protector. Supongo que no lo soy ya que me miró mal y me pidió que vinieras.

¿Y cuánto tiene ella? ¿Catorce?

— Tiene dieciséis.

Wow.

— Iré.

— Paso por ti en veinte. Nos vemos, Carter.

Fui a la ducha y me quité el sudor que había acumulado el día de hoy. Me puse unos shorts naranjo oscuro ya que aunque era de noche, igualmente hacía mucho calor, y terminé de vestirme con una remera blanca y unas zapatillas que me habían regalado de cumpleaños.

— ¡Carteeeeeeer!

— ¡No griten!

— ¡Jeff está coqueteando conmigo!

Bajé las escaleras a paso lento y pasé por al lado de Jessica.

— Tiene novio.

Jeff hizo un puchero y le tomó la mano para luego darle un beso en ella.

— Es obvio que tienes novio... Siendo una chica tan linda...

— Con mi hermana no, Jefferson.

¿Porqué no te gusto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora