The Moment I Knew

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El verano comenzaba pero aun así las luces de navidad estaban puestas en ese pequeño departamento y a los que viven ahí no podría importarles menos.

Hoy era un dia especial, cumpleaños de Peter.

Este estaba tan emocionado, no porque fuera su cumpleaños, si no que despues de tantas decepciones por parte de Tony, que dicho era su pareja, estaría con él en su dia especial.

El castaño estaba parado frente al espejo con un traje de tres piezas, "Tony quedará impresionado al verme",se dijo con una gran sonrisa.

Peter no podía o más bien no quería despegar sus ojos chocolate de la puerta, esperaba con ansias a Tony.

El tiempo paso y paso, los demás invitados empezaron a llegar, empezó a recibirlos, ellos solo le preguntaban cosas banales, como has estado, cómo ha estado la facultad, etc.. Pero Peter no podía concentrarse ya que la voz de Tony hacía eco en su mente, "Estaré ahí Petey", este solo suspiro por el recuerdo esperando que así fuera.

Veía como todos estaban pasando un buen rato, pero él no podía dejar de pensar en la promesa que su pareja le había hecho.

Las horas comenzaron a pasar, quería estar solo, se recargo en una esquina sin quitar la mirada de la puerta, esperanzado de que el mayor apareciera. Sintió una mano en su hombro, pudo escuchar un "Estas bien?", no tuvo la molestia de voltearse, solo corrió al baño. Se sentó en la taza, tratando de no desmoronarse enfrente de Bruce y Rhodey, "El dijo que estaría aquí", los mayores solo hicieron un gesto de negación, sabían cómo era Tony, como este solo daba promesas al vacío, dejaron solo al chico esperando que se compusiera.

Salió del baño, con la mentalidad de que Tony no iba a joder este dia, pero comenzaron a preguntarle por el mayor, con cada mención de este sentía que se hundia mas y mas.

Y ahí estaba él, sintiendo como todo pasaba en cámara lenta, rodeado de aquellos que lo amaban cantándole feliz cumpleaños a ti, pero sabiendo que la persona más importante para él no apareció, las lágrimas comenzaron a caer, los demás sabían del porqué el castaño estaba asi, solo bajaron la mirada, esperando y ahora sí de que Peter se diera cuenta.

Ya entrada la noche su teléfono comenzó a sonar, sabía quién era, no tenía ganas de discutir pero aun así contesto.

"Debiste haber estado aquí".

"Lo se bebe, es solo que la junta se alargo, pero voy a recompensarte tanto que no cabras de felicidad".

"Con que estuvieras aquí me habrías hecho feliz".

"Lo siento Petey".

"Yo tambien lo siento", dijo colgando la llamada.

Después de tantas excusas, de tantas disculpas, de tantas recompensas a medias, en ese momento de reflexión se dio cuenta.

Muerte por mil cortadas (Starker)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora