Comencemos por esos besos que te dejan sin aliento, los que te hacen sentir raramente nerviosa y segura a la vez. Luego vienen esas sorpresas, llamamos a un sitio como nuestro, extrañamos, y vivimos ansiando el momento de vernos. Todo parece perfecto hasta que lo que antes parecía increíble se vuelve aburrido. Aparece esa celosa que todos llaman monotonía haciéndonos perder intensidad en nuestras emociones con su rutina. Y te alejas, nos alejamos ambos buscando volver a sentir. Pero nada es tan fuerte como lo que había cuando estábamos juntos. Extraño hasta esas rutinas que nos separaron, y de una vez entiendo que el tiempo no puede hacer de las suyas confundiendo nuestros sentimientos, no podemos acostumbrarnos a hacer lo mismo día a día, tenemos que ser detallistas aunque se nos acaben las ideas y en vez de apagar la llama que nos une, hacerla más intensa a cada segundo.
ESTÁS LEYENDO
Quiero decir...
De TodoDe qué me sirve guardar palabras que se traban en mi garganta cuando puedo decirlas al mundo. Pensamientos, algunos argumentados, otros constan de simples frases. Aquí podrán percatarse de mi manera de pensar, tal vez ,o quizás no. Solo espero que l...
