Una Broma más

¡Jugo de tomate!

—¿Que va a querer, mija?—preguntaba el taquero detrás de la carreta.

—Me da...  Una quesadilla, Un Vampiro y Un taco, con un agua de Sebada... Y... No, que sean dos tacos...—Charlie me miraba sorprendido—¿Que?—Le pregunté.

—Nunca había visto pedir tanta comida a una chica—Dijo con una sonrisa.

—Y no me has llevado a Subways.

—Algun día te llevaré

Le Sonreí, este chico... Dios, me pone nerviosa, bueno, no nerviosa, me siento bien, me gusta estar con él, es muy diferente a Louis, con él... Eran puros nervios y preocupaciones y... Ya mejor no digo nada.

Charlie pido Una quesadilla y un vampiro.

Nos sentamos en las bancas. Cuando lo Vi pensé por un leve momento y me miraba, y no era a mi, no me miraba a mi, miraba al vacío, o tal vez no miraba al vacío... Volteé y no había nadie. Cuando volteé la vista él me miraba. Tenia los ojos oscuros y una sonrisa grande, como... Como... Como la de guasón. Eso... Me produjo un tremendo escalofríos... Una sonrisa psicópata. Se miraba como Jeff.

—¿Charlie?—Pregunte.

—¿Si? —respondió él con una voz grusa y pesada que me dio miedo. agarró una rodaja de pepino.

—¿Pasa algo? —Pregunte un poco tímida.

—No.

Lo mire confusa. Volvió a mirar hacia la nada, este chico raro, esta vez no miré, me limite a agachar la miraba y ver mis dedos gordos, las uñas negras ya estaba un poco despintadas. Sentí una mirada sobre mi. Cuando alse la vista, Charlie tenia la mirada relajada y los ojos los tenia normales.

—Maya...—pregunto con voz ligera.

—¿Si?—Pregunte poniéndome derecha.

—Cuentame algo—dijo él

—¿Como que?—este chico me confunde.

—Lo que quieras.

—Bueno... Emmm... Tengo una mejor amiga.

—¿Una?—pregunta el con una sonrisa.

—Mi ÚNICA amiga—Recalque. Su sonrisa se fue de su rostro.—Bueno, ella es hermana menor de Louis, nacimos el mismo día a la misma hora, su color favorito es el Azul... Le gusta One Direction... Y ya.

—Wow, que padre tener una mejor amiga que nazca el mismo día que tu, eso es raro.

—¿raro? —pregunte.

—Si, ¿son acuario no?—asenti— bueno, los acuario entre si nunca se llevan bien y más si nacieron el mismo día.

—Bueno... Peleamos mucho... Nos hacemos bromas y así.

—Bromas... Han de ser entretenidas.

—Algun día te haré una, tal vez Harper coopere—una broma para Charlie...

El chico blanco de piel quemada llego con nuestro pedido. Mis quesadillas... Tacos... Un vampiro... Joder se me derrite la boca.

Habro primer un taco y le pongo guacamole, después un poco de salsa cruda, cebollitas y... ¿Donde esta el jugo de tomate?

—Charlie...

—¿si?—contesta con su quesadilla en la mano.

—¡¿donde esta el jugo de tomate?!—grito histérica— ¡UN TACO SIN JUGO DE TOMATE, NO ES TACO! ¡Jugo de tomate a la mesa...—cuento las mesas—11... ¡JUGO DE TOMATE, POR FAVOR!—le grito al chico de piel quemada. El se acerca a mi, pero con las manos vacías.

—¿La podemos ayudar?—pregunta el muy sínico.

—¡JUGO DE TOMATE!—apunto con las dos manos abiertas hacia mi taco.

—Señorita...

—Solo traile el jugo de tomate, chico—dice Charlie dándole un bocado a su quesadilla. Parece que no le importa que haga mi escándalo por el jugo de tomate.

—Jugo de tomate, por favor —le digo al chico de piel quemada.

—Pero...

—¡JUGO DE TOMATE ¿ES TANTO PEDIR?—le grito.

—Señorita... Y déjeme terminar. Sus dos tacos, su quesadilla y vampiro ya traen el jugo de tomate—dice él chico de piel quemada con una sonrisa de "idiota"

—oh—dios... Que vergüenza. Charlie suelta la carcajada—Gracias, y perdón —le digo al chico de piel quemada. El asiente y se va. —¡CHARLIE!

—JAJAJAJA... Ay, ay... Jugo de...—vuelve a estallar en carcajadas.

—Joder, callate.

(...)

—¡¿TU SABIAS QUE TENIA JUGO DE TOMATE?!— estaba en el carro con Charlie rumbo a casa.

—Si—asiente con una risa en su rostro. Maldito. ¡Él sabía que mi taco tenia el puto jugo!

—¿Porque no me dijiste nada?—pregunte. Hubiera sido menos vergonzoso si me lo hubiera dicho antes.

—Eres mitad rubia ¿no? —hijo de la concha...

—Ay, Charlie, mejor llevame a casa—me cruce de brazos y mire por la ventana.

—Como la niña diga—Charlie dio un giro hacia la derecha tomando la calle que me lleva directo a casa.

(...)

—Maya, lo siento—charlie pedía perdón por enésima vez.

—¿Que sientes? ¿El haber frenado fuerte y hacer que me estrelle con el tablero—estuvo a punto de reirse a carcajadas. Se esta aguantando, yo lo se.

—Perdón. ¡Te traje a casa sana! ¡Agradece!—estabamos fuera de mi casa, en la banqueta a unos dos metros de su auto.

—Va, por cierto, si me dejas morete... Te ira como en feria...—¡la feria!— Charlie... ¿Vamos mañana a la feria?

—Claro, solo si prometes no hacer escándalos por jugo de tomate—se me hacerco y me tomo de la cintura llevándome hacia él.

—Solo si prometes que me dirás si tiene jugo de tomate —le dije mirándolo a los ojos.

—Lo prometo, nena— me dijo "nena"—¿a que hora paso por ti?

—mmm, no se …¿6:30?

—Claro—me beso —mañana a las 6:30, linda.

—Bueno.

—Adiós—dijo aun enredado en mi cintura.

—Hey...—hacerque mis labios—nunca digas adiós.

—¿y que digo?—se acerco aun más.

Acerque mis labios al punto donde estaban juntos.

—Hasta luego, cariño— susurré en sus labios. Vi que cerro los ojos y me solté rapido. Me iba a ir cuando me tomo del codo me volteo y me dio un beso.

Nuestra bocas juntas encajaban mas que a la perfección. Eran... Como si estuvieran destinadas. Su lengua busco la mía.

Se separo y fue directo a su auto, me dejo parada aun con la vista ida por el beso largo y... Mmm, Cerre los ojos. Cuando los habrí él estaba a punto  de meterse cuando dijo.

—Hasta luego, nena—se me tío, arrancó y se fue. Yo me quede parada en la entrada viendo como se alejaba.

Mañana...

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¡Hola!

Emos vuelto y venimos con todo c8

Gracias por esperar. Hace dos día Vi a Miriam

Te amo, Miriam.

Guadalupe.