Pequeños momentos Supercorp

Rota (segunda parte)

10 años después, los destinos de Kara y Lena se vuelven a cruzar en París.

La vida ha sido dura para ellas, cada quien a tenido que luchar su propia batalla.

A Kara le costó salir adelante, por algún tiempo vivió con culpa creyendo que se había rendido muy pronto, que quizás debió dar más de si, que a lo mejor debió quedarse y demostrarle a Lena que ella tenía suficiente amor para las dos. Pero con el tiempo y terapia comprendió que ella tomo una decisión, y si, no salió como quería, pero eso ya no era su responsabilidad. Cuando entendió que ella no era la del problema logro avanzar. Se volvió a enamorar, se casó pero lamentablemente su pareja murió en un choque automovilístico, regresaba de trabajar en la noche cuando un conductor borracho causó una carambola de autos, entre ellos el de Imra quién lamentablemente murió dejando a Kara con el corazón roto, 4 años de feliz matrimonio se terminaron en un instante.

Eso es lo que llevo a Kara a París, había prometido a Imra llevarla un día, pero lamentablemente ya no pudo. Pero se prometió que cumpliría esa promesa aunque su esposa ya no estuviera con ella, ese viaje lo haría en su memoria. Pensando en esa persona que la ayudo a sanar su corazón, que la enseño a volver a confiar... Pero sobretodo a volver a creer en el amor.

Lena por su parte se encerró en si misma, se centro en su trabajo y en todo lo que la hiciera no pensar. Los primeros meses se la paso tomando hasta quedarse dormida, era la única forma de callar sus pensamientos, de adormecer el dolor.

También entro a las drogas, porque ¿que más daba terminar de arruinar su vida? Ella ya estaba muerta. Eran las clases de pensamientos que rondaban en su mente en ese entonces.

Hasta que un día sucedió lo que suele pasar en esa clase de situaciones...

Sobredosis.

Lena tuvo una sobredosis que la llevo casi al punto de la muerte, y mientras se iba quedando inconsciente lo único que podía ver mientras cerraba los ojos, era el rostro de Kara mirándola con lástima.

Y eso fue todo lo que Lena necesito.

Se prometió que si se salvaba de esa iba a entrar en rehabilitación por Kara, pero sobre todo por ella misma. No seguiría el ejemplo de su familiar.

Y le costó, lágrimas, desesperación, arrebatos de furia y dolor por la abstinencia... Pero sobre todo ganas de superarse y mucha terapia pero logro salir de ese hoyo profundo en el que estaba sumergida.

Ahora solo se dedica al trabajo, le encanta viajar y dedicarse al comercio internacional se lo permite.

De ves en cuando se reúne con amigos, pero aunque a tenido algunas citas, nunca ha vuelto a sentir lo que sintió con cierta rubia.

Vive una vida tranquila y porque no? Solitaria.

Por esa razón se encuentra en París, Sam no pudo viajar para cerrar el contrato y ella tuvo que cancelar su viaje a Brasil y viajar en lugar de su amiga para cerrar el contrato.

Ambas han llegado a ese lugar por diferentes motivos, pero llamemosle destino o casualidad ellas deciden visitar ese mañana la torre eiffel, sin saber que les cambiará la vida de nuevo.

Kara observa de frente la inmensidad de la torre eiffel con más de 300 metros de altura, con la cámara tomando fotos sin parar. Está sorprendida de la majestuosidad del lugar. Por algún motivo tiene un toque romántico, quizás debido a todas las parejas que hay en el lugar, besándose, abrazándose... No puede evitar mirar al cielo y suspirar nostálgica.

Comienza a caminar hacia la puerta de la torre para subir cuando un grupo de turistas como ella comienzan a salir en de prisa empujándola había atrás, chocando sin querer con alguien que iba detrás de ella.