Bulletproof Heart 🪐| ZaDr

Capítulo 6

El plan falló

. . .

Estaba nervioso, en todo el camino estuvo pensando en lo que dirá o haría, y después de pensar mucho en las distintas maneras en que podría ocurrir la reunión a la que se dirigía decidió que esta vez él sería el que escucharía, dejaría que los demás hablaran para no meter la pata y cagarla desde el inicio.

GIR iba en sus piernas, el robot no era como lo recordaba, el desastroso, gritón y risueño "perro" guardia de Zim no era nada de eso ahora, había tomado un comportamiento algo calmado, y hasta podría decir que serio. Quizá era algo de lo que Zim le mencionó ese día en el laboratorio, tuvo que actualizar a sus dos robots para algo, no tenía idea en que ayudaba la conducta serena de este pero le agradecía un poco, ya que no a tenido que limpiar desastres de la cocina con la única vez que su dueño lo amenazó en no acercarse ahí.

Llegó a su vecindario y mientras más se acercaba a la entrada de su casa más se sentía pesado y con un nudo en el estómago. Aún tenía la copia de sus llaves pero no quería verse imprudente así que tocó el timbre.

Su hermana lo recibió sonriente.

-Hola, hermano. -Le dio un abrazo para después dejarlo entrar, mirando detrás de él, buscando. -¿Zim no vino?, que pena, pensé que lo ibas a presentar. -Molestó con mirada  y sonrisa cizañosa.

-Para ya con eso y no, está algo... inestable. - No encontró otra palabra más indicada que esa.

-¿A qué te refieres con inestable? - Lucía confundida, hasta ella sabía de lo raro que podía llegar a ser el alienígena, pero ¿inestable?.

-Pues, anda raro, como si... - Fue interrumpido por una voz proveniente del interior de la casa.

-Gaz, ¿Quién está en la puerta? - Era quien por el que había estado tan nervioso en el viaje.
Se veía diferente y lo notó Dib al voltear a verlo. Este se encontraba sentado en el comedor tomando una taza de café, no llevaba sus gafas de laboratorio y usaba una sudadera algo sucia en vez de su inseparable bata de laboratorio, al no llevar gafas se podía notar lo mucho en que se parecía con Dib, sus ojos, su rostro en sí, solo que el mayor tenía un poco más notorias sus ojeras.

Dib no sabía que decir y es que ahogó toda clase de comentarios que seguían en su cabeza una vez que vio la situación en que se encontraba su viejo padre.

Solo alcanzó a sonreír pues pensaba que nada malo podría ocurrir ese día y quizás tan solo quizás podría abordar una buena conversación y la que necesitaban después de tanto tiempo.

-Hola, papá. - Soltó al fin, Gaz lo siguió posicionándose a un lado de su hermano mayor.

- ¿Dib? - Era evidente que la gafas tenían una utilidad necesaria, quien sabe por qué se las habrá quitado.

Gaz río por lo bajo y corrió a los sillones para tomar algo y acercarse a su padre. Era lo que le hacía falta para su problema de visión. Volviendo a su anterior puesto.

- ¿Qué estás haciendo por acá? - No era un tono molesto, parecía más sorprendido.

-Fue una sorpresa, papá, yo lo invité. -

-Claro, si con invitar te refieres a amenazar mi vida. -Dijo con todo sarcástico y más bajo, lo suficiente como para que solo su hermana pudiera escucharlo.

Se unieron a su padre en el comedor y platicaron, Dib Al principio solo escuchaba las preguntas que le hacían tal como lo había planeado, para solo contestar calmado y sin mucho contexto.

Pasaron las horas en esa misma posición, pidieron comida por teléfono y no pararon su conversación, aveces Dib hablaba un poco de más y terminaba alargando sus anécdotas. Y a pesar de que no llegó a ser incómodo, su serenidad había sido alterada por una de sus simpáticas preguntas.