Luna Salvatore one-shots +18

Qué hubiera pasado si...?

Stefan P.O.V

Padre le había pegado otra paliza a Luna y ahora yacía dormida a mi lado en mi cama, abrazada a mí con una sonrisa en su rostro. Me ponía bastante verla así, abrazada a mí en ropa interior. Después de unos segundos mirándola empezó a despertarse y dijo todavía un poco somnolienta.

- Stef... - dijo con una sonrisita tierna mientras me miraba un tanto somnolienta.

Me mordí el labio y miré hacia otro lado intentando aguantarme las ganas de besarle, lo que me resultaba muy difícil, pero lo conseguí. Ella seguía abrazada a mi brazo.

- ¿Estás bien? - le pregunté cuando retuve mis ganas de besarla.

- Sí, ¿y tú? - preguntó.

- Te noto un poco tenso - añadió un poco preocupada aferrándose más a mi brazo.

- Sí, tranquila, no es nada - dije acariciándole el cabello haciendo que ella me mirara sonriéndome.

Le arropé un poco mejor al ver que tenía un poco de frío y ella me arropó también pasando sin querer sus manos por mi pecho haciéndome un pequeño masaje que me encantó y se me acabó escapando un pequeño gemido.

- ¡Ah! - gemí.

Ella me miró confusa pero me preguntó preocupada aferrándose más a mí.

- ¿Estás bien? - preguntó preocupada.

Me encantaba sentir cuando su piel entraba en contacto con la mía, era una sensación reconfortante.

- Sí, tranquila - contesté reprimiendo las ganas que tenía de besarle.

- Hoy por fin viene Damon - comentó contenta.

- Sí y padre se irá de la ciudad durante un tiempo - añadí sabiendo que la podría tener solo para mí durante un rato.

No pudimos seguir hablando porque padre entró y cogió bruscamente del brazo a Luna para llevarla contra la pared y dejarle las cosas claras.

- ¡Ay! - se quejó cuando hizo que se bajara de la cama.

- ¡Padre déjala! - dije levantándome rápidamente de la cama para proteger a mi hermana pequeña.

- Ya os queríais acostar, ¡eh! - comentó.

- ¡Padre, somos hermanos no nos podemos acostar!, eso estaría mal visto en nuestra familia - grité aunque en el fondo me quería acostar con ella, pero si ella no quería respetaría su decisión, claro.

- Pregúntale a tu hermana, ella está deseando de acostarse contigo - dijo mientras yo le miraba a ella y ella se ruborizaba para decir en voz baja.

- Eso no es cierto, yo tengo que casarme con Chase - dijo en voz baja mirándome ruborizada.

Estaba tan enfadado con padre que rápidamente fui a separarle de Luna haciendo que ella se pegara a mí y padre dijera.

- Bueno, tampoco hacía falta que os pusierais así, iba a avisaros que me voy a ir antes de que venga Damon - comentó para después irse.

- Ven aquí - le dije cogiéndole la mano en cuanto se fue padre.

Estaba entre lágrimas y le abracé para consolarle. Le deposité un beso en la frente y ella se cogió de mi brazo para decirme.

- Tengo sueño, ¿podemos volver a la cama? - dijo mirándome a los ojos.

- Claro. Ven - le dije cariñosamente para cogerla en brazos y llevarla a la cama conmigo.

- Antes has soltado un gemido - comentó mirándome confusa y un poco ruborizada.

- Sí - confesé.

Ella me miró y se abrazó a mí cuando le solté para tumbarnos en la cama.

En cuanto nos tumbamos en la cama me besó.

- Mmmm... - dijo tiernamente mientras me besaba.

Yo cerré mis ojos y cuando nos separamos ella dijo súper ruborizada.

- Lo siento, no debí hacer eso. Somos hermanos - dijo disculpándose conmigo a la vez que una lágrima le caía por la mejilla.

Entonces le abracé y le volví a besar haciendo que ella me mirase confusa.

- Te quiero - dije besándole para después retirarle la lágrima de la mejilla.

No pudimos seguir hablando porque llegó Damon.

- No le podemos contar esto a Damon, sino se enfadará contigo y no quiero que te haga daño - dijo atreviéndose a subirse encima de mí por lo que me puse bastante caliente y empecé a sudar.

- Hermano, ¿estás bien? - preguntó al ver que estaba sudando mientras se bajaba de mí.

- Sí - contesté besándole en el momento que entró Damon haciendo que nos separásemos rápidamente para que no nos viera besándonos.

- ¡Damon! - gritó Luna para levantarse rápidamente de la cama e ir a abrazarle.

- ¡Auch! - se quejó Damon que estaba un poco malherido.

- Lo siento - dijo separándose rápidamente de él.

- No te preocupes - contestó Damon abrazándola.

- Bueno, voy a descansar un rato en mi habitación y ahora me contáis lo que habéis hecho - dijo Damon acariciándole la mano.

Se notaba que la quería.

- Vale - contestó Luna acercándose de nuevo a mí algo avergonzada por lo que había pasado.

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Es algo corto pero espero que os guste, es una consolación por no haber podido seguir escribiendo la segunda temporada de este fanfic durante mi estancia de intercambio en Francia.