Etteniram

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- Si me quieres, por favor, confía en mí. No te guardes todo para luego acabar así ¿Sabes lo preocupado que he estado? - Ella solo asentía sobre el, se sentía cansada y cada vez era mas difícil abrir los ojos. Estaba cómoda ahí escondida, con la mano del muchacho acariciando su espalda, envuelta en su calidez y la recién llegada noche proporcionando el ambiente perfecto. Aunque hacia frío, ahora mismo no lo sentía, solo sentía las caricias, y a el. 
Se dejó caer un poco mas apoyando su peso sobre el. - Princesa me agrada que te sientas tan tranquila pero estoy cansado y hace frío, si lo deseas y te sientes cómoda con ello ¿podríamos entrar?
- ¡Perdón! Entremos ¡estarás helado!
- No te disculpes, solo necesito un poco de queso para Plag
- ¿Te echaran de menos esta noche? - Abrió el ventanuco del techo saltando hasta su cama y seguido salto el sin mayor problema.
- Probablemente no, ni siquiera saben cuando me voy. - El reía con cansancio sentándose en el colchón, mientras su kowami salia inspeccionando el lugar y ella al tiempo bajaba las escaleras rápidamente a buscar una manta y un pijama que subió rápidamente. Inmediatamente le echó la manta sobre los hombros.  
- ¿Quieres quedarte? - Ella le acaricio un poco la cabeza mientras el comenzaba a rendirse al sueño
- Ow princesa que rapidez
- No te hagas ilusiones gatito... Como estas cansado y yo no quiero estar sola... Si te quieres ir esta bien - Señaló la ventana por la que otras veces había salido u entrado pero el ya estaba tumbado y no parecía ir a levantarse.
- No, yo tampoco quiero estar solo. - Ella le dejo el pijama a su lado mientras volvía a bajar las escaleras - Ni esta noche ni ninguna
- Voy a buscar algo de cenar ¿Que quieres?
- Me da igual, pero necesito queso para Plag
- Esta bien ahora vuelvo, si quieres cámbiate mientras
- Bfff ... esta bien
- No te voy a dejar dormir con la ropa de la calle - Marinette cerro la puerta trampilla tras de ella bajando a por lo requerido.

Poco tiempo después volvió a entrar al cuarto con un par de platos en la mano, todo estaba en silencio y estaban todas las luces apagadas a excepción de la pequeña lamparilla de noche al lado de la cama. En la penumbra de la parte inferior del cuarto podía vislumbrar los ojos cetrinos del kowami de Adrien que le miraban con cautela desde la distancia, ella le hizo un gesto y dejo un plato con varios tipos de queso y macarons sobre la mesa.
- Tu debes ser Plag - El nombrado se acercó con una sonrisa divertida todavia sin mencionar palabra. 
- Encantado Ladybug
- Encantada, mañana ya tendremos tiempo de hablar, ahora y por el momento te he dejado distintos tipos de queso. - El felino miro el plato con ojos golosos mientras comenzaba a sobrevolar el plato, cosa que Tikki también comenzó a hacer.
- ¡Eres la mejor!
- Disfrutad, buenas noches - Dejo un cojín sobre el diván con una manta cálida por si los kowamis preferían usarlo.
- ¡Buenas noches chicos! - Con el plato restante todavia en la mano subió sigilosa la escalera, Adrien se había cambiado al pijama, pero se había quedado completamente dormido envuelto todavia en la manta y travesado en la cama con todo el pelo alborotado. Precia agotado y ni siquiera la luz encendida dándole en la cara le conseguían despertar. Ella solo dejo el plato sobre la mesilla y apagar la luz. Gateo sobre la cama esquivando al otro y se acostó como buenamente pudo divertida por lo profundo que parecía dormir - Buenas noches gatito - Le acaricio la cabeza casi por inercia, pero inesperadamente este le sujetó la mano con dulzura dándole un pequeño beso dormido.
- Buenas noches princesa - su sonrojo tras de esto era tan notable que agradecía que nu hubiera luz en el cuarto.