DOPPELGANGER

VII

No podía contener la vergüenza que sentía de tener a aquel chico que vio hace unos minutos frente a el.

Inclinado a sus ojos, se estaba presentando como debía. A Jimin le hubiera gustado omitir todo ese proceso, pero con el Rey presente eso no era una opción.

— Un gusto su majestad, soy Min YoonGi y a partir del día de hoy seré su protector así que quedo en sus órdenes — Su rodilla izquierda tocaba el piso mientras que el pie de la derecha se mantenía sobre el suelo, una mano iba atrás y la otra doblada del codo.

Mostrando respeto

--- También es un gusto Min Yoongi, confío en usted y se que puede protegerme ya que vi la fuerza que tiene--- Dijo con una leve sonrisa y le hizo una leve reverencia hacia su prometido--- Gracias por protegerme y tomarse el tiempo de buscar a alguien indicado Rey.

Jimin agachado por la reverencia, intentaba ver discretamente el rostro de su protector. Pero.. el sombrero no me permitía la vista

¿Por qué?

— No tienes nada que agradecer Príncipe, para eso estoy yo. — Suspiro — Cualquier queja que tengas directamente conmigo, lo solucionare

Con la muerte, pero lo hare— Pensó en esos momentos el Rey

--- No creo llegar a tener ninguna queja, pero agradezco su preocupación --- Dijo no muy atento al Rey, quería ver el rostro de su guardián pero no podía por aquel sombrero

--- Haré lo posible para que no tenga quejas conmigo Príncipe Park, le serviré con respeto y lealtad

— Confiare en ti YoonGi — Le regalo una pequeña sonrisa — Bueno... entonces.. ¿Ya puedo salir a conocer reino? — Pregunto viendo al Rey

--- Si, puedes. --- El Rey tenía algún desagrado con Yoongi, pero decidió ignorarlo quizás sólo es por la charla --- Cuídalo bien Min Young, yo me retiro, necesito.. Descansar.

— A sus órdenes Su majestad. — Hizo una pequeña reverencia antes de que el Rey encaminara su camino

Jimin vio desaparecer a su prometido de donde se encontraban, dejando solo a su guardia y a él.

--- Ya puedes pararte con normalidad y hablarme normal, realmente me incomoda mucho eso de la jerarquía, delante del Rey lo puedo aceptar, pero si estamos los dos solos te pido que no lo hagas

— Lamento decirle que eso no es posible Príncipe, me temo que no puedo dejar la formalidad mucho menos la jerarquía — Fue su única respuesta

--- Yo no te pregunte, te estoy ordenando. --- Dijo cambiando un poco su tono de voz

— A la orden su majestad — No quería, pero no le quedaba otra opción más que acatar la orden