- Like a penguin

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- Like a penguin


Era viernes por la noche y el piso estaba casi vacío. Sus padres de viaje de finde semana y sus amigos fuera en busca de más alcohol, Jin no tuvo más remedio que quedarse con su alocado mayor. Para nadie era sorpresa que el par tenía más que una amistad, al menos, en lo que iba de los últimos meses. Aquella simpatía y tonto coqueteo había por fin derivado a algo más, y aun si ninguno de los dos se esforzaba por volver eso algo "real" o simplemente blanquearlo, la forma en que sus ojos se encontraban o como sus manos se buscaban lo dejaban más que claro.

El verdadero problema era, sin duda, la diferencia en sus personalidades. Mientras Jackson era gritón, juguetón y amante de las fiestas, Jin prefería mantenerse callado y relajado, solo leyendo o pasando el rato en su casa. A pesar de esto, les era fácil relacionarse, pasar tiempo juntos y sentirse bien el uno con el otro. Todo dulce, divertido y casual.

Aunque en los últimos días –tal vez semanas- las cosas habían sido un poco más tensas. El castaño había empezado a pasar más tiempo con uno de sus amigos más que con él, y eso...por algún motivo...le molestaba. No es que él creyese que Jackson tenía algo con Mark, ellos eran muy buenos amigos y, por más que todos en el instituto pensaban que hacían linda pareja, ellos no se veían de esa forma. Aun así no era fácil solo...verlos juntos, no cuando él deseaba ser igual de abierto y demostrativo, algo que realmente no se le daba.

Aun a pesar del tenso clima y su- algo molesto – distanciamiento, ellos aún se veían, poco pero lo hacía, fuera del círculo de amigos y compartían algunos mensajes y miradas. JinYoung a diario se decía que estaba siendo paranoico y que las cosas con Jackson estaban bien, al menos, así quería creerlo.

No fue hasta esa noche que las cosas entre ambos cambiarían, y aun cuando el pelinegro no estaba al tanto de lo que iba a ocurrir, eso modificaría todo para siempre...

.

Jin veía un documental en la sala esperando que el grupo estuviera de regreso, la música sonaba por todo el sitio y la TV muteada dejaba ver, con sus subtítulos, la vida animal y sus procesos de migración en diferentes partes del mundo. Hacia varios minutos que el castaño se había alejado con la excusa de usar el baño, él no había ido a buscarlo, sabia que volvería tarde o temprano.

-¿Sabes Jin? – El nombrado busco al dueño de aquella voz notando como en pocos segundos este se dejaba caer a su lado en el sillón. Le regalo una radiante sonrisa mientras se tiraba hacia el respaldo con sus manos en los bolsillos- Escuche un algo interesante...- Soltó en tono jocoso.

-¿Qué cosa?

Olvidando por un momento el documental se permitió ver a su amigo. Él era el primero en reconocer que este era atractivo, mucho en realidad, pero cuando lo veía sonreír casi podía quedarse sin aire.

-¿Sabías que los pingüinos son monógamos?- El pelinegro enarco una ceja confuso- ellos son muy sociales, pero cuando eligen pareja... lo hacen seriamente, tienen una sola pareja para toda la vida ¿Podes creerlo?- Su voz se oía ansiosa, llena de emoción, parecía que el tema en cuestión le había intrigado bastante.

Jin se mantuvo en silencio un momento, cuando Jackson lo miraba de esa forma casi quería pedirle que sea su novio. La forma en que sus ojos lo miraban como si fuese su todo, como su sonrisa crecía mientras más lo observaba, incluso como, aun sin notarlo, se empezaba a inclinar hacia él.

Sintiéndose expuesto aparto la vista observando nuevamente el televisor. Aclaro su garganta tratando de calmar el calor que subía por su rostro, temía quedar en evidencia delante suyo.

Perfect jinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora