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En la mansión Agreste.

Los dos "hombres" de casa se veían con seriedad.

-Tu novia no me deja pasar tiempo con mi mujer, se la pasan todo el día juntas.- dijo Gabriel con enojó.

Los pocos momentos que estaba a solas con su mujer, ella sólo hablaba de Marinette y lo adorable que es.

¡¿Por qué nadie habla de lo adorable que es él, Gabriel Agreste, amado ex villano y padre ejemplar?!

-Tu mujer me quito a mi novia.
Soy un adolescente con una novia linda a la que no puede dar besitos por que su madre siempre esta en medio de los dos.- dijo Adrien con el ceño fruncido.

Al principio lo toleraba pero su madre ya se estaba pasando un poco.

El otro día invitó a Marinette a una cena romántica y su madre se sentó en medio de los dos y le recordaba a cada rato que tenga molades para comer, que sí no comía todo no tendría postre y hasta le limpió la boca con la servilleta en más de una ocasión mientras que Marinette tenía el rostro rojo de tanto contener la risa.

Los dos Agreste se miraron enojados y asintieron.

-¿Piensas en lo mismo que yo?- preguntó Adrien.

Su plan era fácil, su padre se llevaba a su madre a una cita por todo París y él iba a casa de Marinette a jugar videojuegos y pasar tiempo a solas luego de dos semanas.

-Sí, definitivamente pienso lo mismo que tú.- respondió Gabriel mientras se cruzaba de brazos y asentía.

Su plan era simple, le robaban los miraculous a Ladybug y Chat noir y pedía como deseó que su hijo terminé con Marinette así Emilie ya no pasaría tiempo con ella y volvería corriendo a sus brazos.

Las grandes mentes piensan iguales, sabía que su hijo tenía algo de parecido a él además de lo atractivo.

Adrien, fruncio el ceño y se alejó un poco al ver como su padre asentía.

-Yo... tengo el presentimiento de que no tenemos la misma idea.- exclamó el chico mientras su padre lo veía confundido.

La verdad, no se le ocurría que más podían hacer pero le daría una oportunidad a su hijo.

Antes de que Adrien diga su plan, la dueña de casa y Marinette llegaron, vestidas de la misma manera mientras reían.

Adrien al ver a su novia vestida como su madre, sintió un escalofrío.

-Adivinen quienes pasaron todo el día con Audrey Bourgeois y se hicieron super duper amigas en un concierto de Jagged Stone.- dijo la rubia mientras Marinette sonreía y mostraba su celular donde estaban ellas dos, Sabine y Audrey, abrazadas en el escenario con un traumado Jagged Stone en medio de ellas.

-La mamá de Juleka nos tomó la foto.- dijo la ojiazul.

Adrien sintió vergüenza mientras que Gabriel se sentaba en el sofá y se cubría el rostro con una mano.

Sólo dos semanas desde que Emilie regresó y ya estaba en boca de todo París y seguro que no era por su regresó.

Adrien recibió un mensaje y lo leyó.

"¡¿Se puede saber qué rayos hacía tu boba novia con mi mamá?!
¡Gracias a ellas ahora seré el hazmerreír!"

Y el chico guardó su celular luego de mandarle un mensaje de disculpas a su amiga de la infancia.

-Marinette, ¿podemos pasar tiempo a solas, sólo nosotros dos, como novios?- preguntó el rubio mirando a su novia.

La azabache lo miró con sorpresa y luego miró a su suegra quien funcio el ceño y la abrazo con fuerzas.

Novia robada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora