Capitulo 4

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Me retuerzo y me deshago de mis zapatos. Siento como se me enroscan los dedos de los pies ante la magnitud de sensaciones que se agolpan en mi frágil cuerpo que está tenso como una cuerda, totalmente arqueada con la boca abierta emitiendo gemidos, jadeos y algunos gritos. Justin está como loco embistiéndome. Siento esa corriente por todo mi cuerpo pero a un nivel que no había experimentado con otro hombre. Se concentra en la parte baja de mi estómago. Veo sobre salir las venas de Justin en su cuello y brazos, por el esfuerzo. Sexy. Nuestros cuerpos siguen chocando. Sus gruñidos son más fuertes y siento el chirrido que hace su escritorio a cada deliciosa embestida de mi jefe. Hace un inesperado giro con sus caderas y casi me lleva al abismo. Entierro mis uñas en su espalda. Vuelve a repetir el giro. Gimo. Me vuelve loca cuando cambia repentinamente el ritmo, aumenta mi libido siento mi cuerpo consumirse. Al tercer giro rapidamente contraigo los músculos de mi vagina y es la catapulta a nuestro clímax.

- AHHHGGG!!! – Gemimos al unísono

Caemos rendidos en el escritorio. Su cuerpo aplastando el mío, pero es un momento en el que no siento su peso, solo trabajo en que llegue oxígeno a mis pulmones, porque esto fue woww, sabía que el jefe tenia cara de semental pero nunca pensé comprobarlo. Quiero pasar mis dedos por su espala y repartir siento de besos por ella y caigo en la triste realidad. Él es mi jefe, por Dios MI JEFE!!. Siento mi cuerpo ruborizarse más de lo que ya estaba, ante la vergüenza, tengo en mi interior y encima mío a mi jefe. De seguro tiene que estar arrepentido de lo que hicimos, por Dios no estoy lista para esa humillación y menos de parte de él, como haremos para seguir trabajando, me va tocar renunciar y si es así de seguro ni me ayudara con una carta de recomendación y no encontrare empleo en ninguna parte porque pensara que soy una perra oportunista. Siento que me libero de un gran peso y no es porque haya encontrado la solución a mi problema, lo digo en sentido literal. Justin se despega de mi cuerpo y sale de mí. Se quita el condón y lo tira al piso, cayendo en cualquier parte de la oficina. Se recuesta a mi lado. Hay un incómodo silencio en el que solo se escucha nuestras agitadas respiraciones relajarse poco a poco. No se que hacer, como reaccionar, que decir, Dios estoy tan avergonzada, estoy mirando el techo como si fuera la obra más maravillosa e interesante del mundo, son incapaz de romper el incómodo silencio, solo quiero que me trague la tierra y me escupa en la casa de mi abuela, no me importa si esta Jakob, a él lo puedo manejar mejor que esta incómoda y embarazosa situación.

- Lisa...- Rompe el incomodisisisimoo silencio

Cierro fuertemente los ojos esperando su rechazo. Pero nunca llega. Solo siento algo acariciar mi mejilla, abro los ojos y veo que su mano esta en mi mejilla mientras me mira fijamente a los ojos con el ceño levemente fruncido. Se cierne totalmente sobre mí.

- Cre-creo que debo...

- Oh no gatita, esto no ah terminado

Me sorprende cuando me toma repentinamente de las caderas. Me gira. Me alza. Hasta que mi cuerpo está en una perfecta posición en 4 o la famosa posición del perrito. Mis palmas y rodillas apoyadas a la superficie fría de la madera. Siento como abre un cajón del escritorio y rasga una envoltura inmediatamente sé que es. Condón. Toma unos segundos para colocárselo. Presiona su gran mano izquierda en la parte baja de mi espalda como señal para que me arquera y mi culo quede en pompa. Lo hago. Pasea sus grandes manos por mis costados mandando escalofríos por todo mi cuerpo despertándolo del adormecimiento post-orgasmo. Siento su gran mano derecha aferrarse a mi cadera y su otra mano desaparece. Ploff!! Siento un fuerte golpe en mi nalga izquierda. Joder. Ese inesperado cachete me coge fuera de base y me deja completamente perdida.

- Lisa...Últimamente te has portado muy mal

Jadeo. Al sentir ese hormigueo que siempre viene después del golpe y me encanta. Luego que ha desaparecido el hormigueo soy consciente de que ha dicho que me eh portado mal, como puede ser posible eso si soy la santa paloma de todo el edificio...bueno eso creen mis compañeros y es mejor que sigan pensando eso, al saber mis pervertidas fantasías con el jefe y que ya estaba cumpliendo una de ellas, se volverían locos y más al saber que me gusta un poco de sado, pensaría que soy una psicópata desquiciada.

- Yo no me eh portado mal...

- Me lo vas a negar?

- Pero...- Vuelve y me interrumpe

- Acaso no recuerdas como estaba toda risitas con el de contabilidad en la fotocopiadora? - Gruñe

- Con Jeison?? – Pregunto totalmente desconcertada – Pero si me estaba contando las ocurrencias de su hija Sophie de 4 años.

Alzo mi mirada por encima de mi hombro y veo la cara de Justin roja y algo avergonzada.

- Y qué me dices con el nuevo Miles, los vi poner su mano en la parte baja de tu espalda el miércoles.- Lo veo poner su típica cara de disgusto

Bueno el si me invito a salir y le acepte, quede en verme con el mañana en la noche para ir a cine. Me sentí tentada en contárselo a Justin pero quiero sacar provecho de esto un poquito más a ver si de verdad le importo o es simple machismo.

- Su nombre es Mike y talvez si....- Deje la conversación en el aire dejando que su imaginación jugara con él un poco.

Lo veo ponerse más rojo de la ira. Ploff!! Me pega otro fuerte cachete, esta vez en la derecha. Gimo. Me mojo. Genial. Siento el delicioso cosquilleo recorrer mi piel.

- Talvez si que? – Gruñe.

No respondo. Ploff!! Vuelve y me pega y esta vez no en mis nalgas sino en mi vagina. Chillo. Lo hizo más suave que en mi culo, pero la sensación deja un hormigueo delicioso y frustrante. Me humedezco aún más.

JUSTIN POV'S

Me sentí ridículo reclamándole cuando ella no estaba haciendo nada malo, pensaba que estaba coqueteando con ellos. Que tonto. Lisa no es de esas chicas. Me siento enfermo a imaginármela en manos de otro hombre adorando y tocando este hermoso cuerpo. Juro que si ese Miles o Mice o como se llame, me entero de que le ha puesto un dedo encima lo despido.

- Dime

Trato de persuadirla llevando mis dedos a su clítoris, estimulándola, después del golpesito que le eh dado en el coño y que sé que la ha puesto cachonda, no sabía que a la tierna y dulce lisa le gustaba el sado. Hice nota mental de eso. Siento como tiembla ante mis caricias. Me aprovecho de eso y entierro mis dedos en su cálido y húmedo coño, encontrando fácilmente su punto G y torturándola con mi pulgar rozando levemente su clítoris, la voy llevando fácilmente al orgasmo, pero cuando está a punto de explotar retiro mis dedos bruscamente.

- Arrggghhh – Gruñe. Se gira. Me enfrenta furiosa – Que quieres saber?

Todo lisa, de ti quiero saberlo todo. Me carcome los celos con soloverte hablar, sonreír o acercarte a otro hombre porque yo no podría hacer lomismo contigo, quiero tener esa suerte de besarte, acariciarte, escuchartehablar de tu día, tus sentimientos, lo quiero todo contigo nena, absolutamentetodo.

SEXBOSSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora