Capítulo IV

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Saborea y disfruta el momento como si fuese eterno, hace mucho que desea hacer esto y admite que por fin sus sueños recientes se materializan. No sabe cuánto tiempo sostiene la boca de ella presionada contra la suya, pero si sabe que fue lo suficiente para no arrepentirse. De un momento a otro un sonido quiebra la esfera de silencio en la que están sumergidos y Harry se lleva la mano a la mejilla ahora enrojecida tras un golpe de la mano de Daphne.

-¡Eres un oportunista! Y pensar que estaba considerando tragarme tus palabras-espeta Daphne llena de furia, tomando de golpe su café y huyendo del baño mientras el joven aun frota su piel dolorida.

-Lo lamento-susurra una vez solo y da un puntapié a la pared reprochado.

-Oye, oye... ¿Adonde vas tan molesta, cariño?

-Zayn, ahora no-masculla entre dientes dando un trago a su café. Caminando enfurecida por el corredor.

-¿Qué te ocurrió?-ahora le habla con seriedad, mirando preocupado a Daphne a su lado, intentado mantener el mismo paso.

Ella se detiene y mira a Zayn, que le observa esperando, con sus ojos bien abiertos, reflejando el color pardo dentro de ellos con suma nitidez. No puede echarle la culpa a él por Harry.

-Nada. Un... asunto con Harry-se encoge de hombros ahora caminando con lentitud, seguida de él.

-¿Quieres contarme?-pregunta sonriente, al ver que la molestia de ella cesa. Y cree saber de qué se trata.

-La verdad no. Es... Complicado-inventa dando otro trago a su café.

-Bien. No importa-murmura, pasando su brazo por los hombros de Daphne-Que bueno que te encuentro, quería hacerte una invitación.

-Espero no sea a cenar.

-No, bueno... Si tu quieres, cuando sea. Pero te quería invitar al baile de mañana por la noche para ver si de un vez por todas mueves ese trasero-posa su barbilla en el hombro de ella haciendo que su exhalación haga mover los cortos cabellos. Ella ríe por lo bajo y se aparta levemente para verle.

-Me encantaría, pero ahora no tengo muchas ganas de ir a un baile Zayn.

-Oh, vamos. Será divertido-insiste.

-¿Por qué no invitas a Fernanda? A ella le gustas y también los reventones-sugiere, con la mirada adelante.

-¿Ferni? ¿Le gusto?

-Sí. Pero no lo escuchaste de mí ¿eh?-advierte apuntándole con el dedo índice.

-Bien. Pero el caso está en que quiero ir contigo, no con Ferni-hace un puchero.

-¿Qué tiene de malo Ferni?

-Daphne-advierte.

-De acuerdo. Iré, pero desde ahora te digo que no tengo qué usar-accede.

-Es de gala, podemos rentar un vestido para ti en la tienda que está calle abajo del campus-propone.

-Está bien. Pero no sé donde es.

-Iré por ti mañana antes del mediodía por alguno y después podemos ir a comer algo-la mira, esperando un sí.

-Zayn-protesta ella.

-Sólo un almuerzo.

-Ok.

-Te veo mañana, cariño.

-Nada de cariño.

-Te veo mañana, aguafiestas.

Ella ríe negando con la cabeza y le ve desaparecer por el corredor.

* * *

-Mírame cuando te hablo, Harry-chilla Cunningham con fina voz, colocando los puños cerrados a cada lado de su definida cadera.

-Ahora no quiero hablar. Estoy cansado-se cubre la cabeza con la almohada para evitar ver a su novia con grave expresión de disgusto al pie de su cama, con el cabello platinado secado perfectamente y en un vestido turquesa corto.

-Oh, no, tu me vas a oír. ¿Por qué te fuiste del comedor con Daphne? ¿Es que acaso te importa más que yo?-le regaña y Harry levanta un poco la almohada sobre su cabeza para ver los ojos ardientes color miel de Hally.

-¿Quién dijo que fui con ella?

-Que yo sea bonita no significa que sea tonta, si a eso te refieres. Te vi correr detrás de ella, Harry-plantea. Ya le basta con que Daphne se enfadara con él, ahora Hally también.

-Mira, no es nada. Sólo le fui a preguntar algo acerca de la clase de música. ¿Por qué no vienes a acostarte conmigo y nos olvidamos de esto?-dice desviando su atención del tema, a la vez que abre sus brazos y hace un espacio junto a él en el colchón.

-Más te vale estar diciéndome la verdad, bebé, porque si no tendré que sacar a esa famélica del camino-arrastra las palabras subiendo a la cama con mirada lasciva y al llegar a su lado susurra en su oído:-Tú. Eres. Sólo. Mío.

Continuo apreciando que lean, si es que lo hacen... Dejen likes, me harían desquiciadamente feliz. :)

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