Al Despertar [SasuSaku]

Capitulo 7

Dos años después

—¿Recuerdas este lugar?— preguntó Sasuke tan pronto como el camarero terminó de servir las copas de champán y salió del balcón que el Uchiha había reservado solo para los dos para tener una reunión privada con su novia.

—Por supuesto que lo recuerdo, Sasuke-kun. Fue el restaurante donde tuvimos nuestra primera cita.— Respondió con un tono dulce y una sonrisa nostálgica, recordando esa noche hace casi dos años donde formalizaron su relación.

—Pensé que era perfecto para la ocasión.— dijo con un tono serio.

—¿Y cuál sería esa ocasión? No me digas que olvidaste que nuestro aniversario es el mes que viene— Sugirió divertida y levantó la copa de champán para el primer sorbo.

—Nunca olvidaría nada relacionado contigo, Sakura.— Respondió con una media sonrisa, observando a la hermosa mujer frente a él que aún no había notado el gran anillo de diamantes dentro de la bebida.

Él rió un poco considerando la idea de advertirla antes de que ella bebiera el líquido y terminara con la joya dentro de su estómago. Pero por suerte para él, no había sido necesario.

—¡Sa-sasuke!— Tartamudeó mientras dirigía su mirada confundida y sorprendida entre las esferas negras y el cristal en su mano derecha.

Sasuke sonrió, una sonrisa que la hizo derretirse desde la primera vez que la vio en la cara de la persona que amaba.

—Sakura— Susurró mientras él tomaba el vaso de sus manos y recuperaba el anillo de la bebida, arrodillándose frente a ella y tomando su mano suavemente.

—¡Por Kami, Sasuke!— Sakura murmuró aún con los ojos muy abiertos y la boca entreabierta por la sorpresa.

—No puedo imaginar a nadie mejor que tú para ser mi esposa. Tu voz endulza mi vida, tu olor alegra mis mañanas, tu presencia me completa y tu amor me convierte en el hombre más afortunado del mundo.

Sakura estaba buscando palabras para ese momento, porque quería decir cuánto lo amaba con todo su corazón, pero solo las lágrimas de felicidad que inundaron su rostro fueron suficientes para decir cuán fuerte era ese sentimiento.

—Si me aceptas, Sakura, prometo hacerte feliz todos los días de nuestras vidas.

Sakura no dijo nada. No había suficientes palabras para que ella se expresara. Luego se arrojó a los grandes brazos donde pertenecía y selló sus labios con los de él con todo el amor que se derramó de su pecho.

—Te amo, Sasuke-kun. Yo te amo.— Murmuró entre besos y sonrió verdaderamente feliz.