lover ⁚⁚⁚━━ La vida en ocasiones pude llegar a ser arrolladora y hasta completamente horrible, la cuestión está en las personas que deciden superarla y vivir con ella, y las que no soportan el peso de esta.
Senju Akame logró encajar perfectamen...
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Un nuevo suspiro se escapó de sus labios, desde que esa reunión había comenzado, había perdido la cuenta de cuántas veces había suspirado.
Había sido prácticamente obligada a asistir a una reunión con Minato, quien alegó en su contra con algo que no podía refutar.
Ella también formaba parte del concejo gracias a Hiruzen.
Todo había estado medianamente normal, solamente estaban hablando de asuntos en los que ella no tenía porqué interferir y situaciones con los ninjas respecto a los exámenes chūnin.
Posiblemente todo hubiera estado bien de no haber sido porque la mirada de Shimura Danzō se dirigía a ella como un zopilote viendo a una vaca moribunda.
La reunión consistió de diversas cosas, desde los campos de cultivo hasta temas criminales, aún no sabía por que la incluían en esas reuniones.
No es como si realmente su decisión influyera mucho para los adultos, era solamente como un trofeo el cual adornaba el lugar.
Por eso, verdaderamente agradeció cuando la reunión dio fin y Minato le autorizó retirarse.
Esquivando exitosamente a Danzō cuando trató de detenerla, seguramente para tratar de persuadirla para que fuese a visitar aquel húmedo lugar donde pasaba metido todo el tiempo.
Las instalaciones de raíz no eran las más hospitalarias que se diga.
Todo tenía un olor a mojado que incluso le causaba asco respirar dentro de su propio eje.
Caminó por las calles de Konoha a paso tranquilo. Su camino se desvió al campo de entrenamiento 02 donde sabía que Itachi se podría encontrar, siempre que ella cancelaba sus entrenamientos lo encontraba entrenando por su cuenta.
Aunque realmente no fue sorpresa no encontrarlo solo, Shisui también estaba allí.
— Deberías levantar un poco más la cabeza, no influirá nada en el jutsu pero si evitará que te encorves.— musitó exaltando a ambos pelinegros.
— ¡Akame-sensei!
— Eso me asustó...— murmuró tocándose el pecho de forma dramática.
— Shisui-san me ayudó con el jutsu de los clones.— dijo el pequeño nada más la vió llegar.
Se veía más emocionado que antes.
— ¿Vienes de una reunión?— cuestionó el mayor mirando el bonito yukatade color verde mar que llevaba puesto.
— Sí, me reuní con el Hokage, iba hacia casa, pero decidí pasar a ver cómo iba con su entrenamiento.— dijo revolviendo el cabello de Itachi, se le había hecho costumbre en los últimos días.
