Guardaespaldas

El Visitante

Naruto convocó a Shikamaru y Sai. Necesitaba coordinar aspectos para la visita del hijo mayor del Señor Feudal a Konoha. Revisó sus peticiones, varias bastante estrafalarias. Y le llamó la atención una, quería a Sasuke Uchiha en su recepción.
Quizás era porque en las visitas de sus padres y hermanos Sasuke nunca había estado. Quizás esta no era una petición directa del joven, sino del Señor Feudal. Por eso mismo había convocado también a su mejor amigo ese día, quien ahora entraba con cara de impaciencia a la oficina del Hokage.

— ¡Que bueno que pudiste llegar a tiempo Sasuke! — dijo Naruto al ver a su amigo entrar en la oficina. Uchiha saludo a Sai y Shikamaru con un suave movimiento de su cabeza.
— Vine tan rápido como pude. Me dijiste que no era nada grave, pero preferí venir pronto ¿que sucede?
— Lamento haberte asustado, Sasuke. Pero de verdad es algo sin tanta importancia — Comentó el Hokage, Uchiha levanto una ceja, incrédulo. — El hijo mayor del Señor Feudal vendrá esta semana, llegará mañana, por lo que quiero que puedas participar en su recepción mañana. Una de sus peticiones fue que todos los héroes de la Cuarta guerra ninja se reunieran y que tú estuvieras presente, fuiste solicitado especificamente.
— Basicamente, me llamaste a petición de un niño consentido.
— No es un niño. Tiene 27 años, solo tiene 5 años de diferencia con nosotros, Sasuke.
— ¿Algo más que deberíamos saber de esta persona? — preguntó Sasuke con desdén.
— Sabemos que no te enviaremos a ti de comité de bienvenida... — argumento Sai. Sasuke lo miró de reojo, enojado.
— Mmm, que es una especie de fanático de la historia Ninja, que no le gustan los dulces, que es alergico al chocolate y... que es gay y le gusta salir a fiestas...
— ¿Crees que hay algun bar gay en Konoha? ¿O algo así que quiera visitar? — preguntó Sai.
— Sai, no creo que lo primero que quiera hacer es ir a meterse a un bar gay... — Comentó Shikamaru.
— ¿Y que tiene si quiere ir a un bar gay? — preguntó Sasuke con curiosidad.
— Tendremos que acompañarlo, o enviar a gente de Anbu que lo proteja.
— Da lo mismo — comentó Sasuke.
— ¿Has estado en algun bar gay, Sasuke? — dijo Sai.
— No es algo que te incumba, pero si.

Naruto y Shikamaru miraron al Uchiha con sorpresa. Sasuke en un bar gay. Sai lo miró divertido.

— Es un buen lugar para reunirse con informantes. — sonrió Sasuke arrogante.
— Me imagino que nunca has tenido sexo con un hombre, Sasuke. ¿O no?
— ¿¡Sai a que viene esa pregunta?! — chilló Naruto.

Sasuke, que estaba apoyado en la ventana cerca de Naruto. Se alejó de esta y se inclinó hacia Sai y poniendo su cabello detrás de su oreja, para que se viera su rostro y su ojo Rinnegan.

— ¿En qué cambiaría tu vida o tu percepción de mi si te respondo esa pregunta? — preguntó Sasuke serio.

Sai quedó perplejo, tener a uno de los hombres más bellos e intimidantes de la aldea no era tan fácil. No le contestó.

— Lo supuse. — dijo Sasuke.
— No me contestaste la pregunta — dijo Sai cuando Uchiha volvió donde estaba.
— Ni lo voy a hacer — sonrió Sasuke con una de sus típicas sonrisas arrogantes.
— Chicos... necesito que pensemos en que haremos con este muchacho. — dijo Naruto.
— Podemos hacer una recepción con los heroes de Konoha, para que él pueda compartir con todos nosotros al llegar — dijo Shikamaru.
— Creo que es una buena idea — afirmó Sai.

Naruto miró a Sasuke, quien asintió.

— Bien mañana entonces haremos una pequeña recepción para darle la bienvenida.

Sai y Shikamaru se retiraron, pero el Hokage le pidió a Sasuke que se quedara.

— Sasuke, ¿tu... ? — preguntó Naruto a su amigo, muy incomodo.
— No idiota. — dijo Sasuke — Lo más cerca que he estado estar con un hombre fueron los besos que nos dimos cuando niños y las veces que dormimos juntos.
— Si lo dices asi... suena como si hubiesemos sido amantes...
— Perdon, Hokage-sama. Tendré cuidado con mis expresiones — dijo Sasuke, rodando los ojos y saliendo de la oficina.
— ¿No me vas a preguntar a mi? — preguntó Naruto ofendido.
— Sé la respuesta. Es la misma mía. — Sasuke se giró y le mostró una sonrisa franca.