Guardaespaldas

Descenlace

Sasuke entró con una carpeta a la Sala de Reuniones. Eran cerca de las 20 hrs y habían tenido un día eterno. En aquel lugar se encontraba el Hokage quien lo recibió con una sonrisa, el director de la Policía de Konoha (Kiba), Kakashi, como el Hokage anterior, el Director de Anbu, Shikamaru y por supuesto, el Director y el Subdirector de Policía Internacional.

  — Me parece muy interesante su invitación Hokage- sama, aunque un poco repentina — comentó el Jefe de Interpol.
— Creemos que era necesaria su presencia, incluyendo la del subdirector, sobre todo considerando los hechos de hoy. — contestó Naruto.
— Satoshi- san nos envió su agradecimiento y el Señor Feudal agradeció públicamente el trabajo de la policía ninja de Konoha, la Anbu y policía internacional — acotó Sasuke, muy calmado.
— Es lo menos que nosotros podemos hacer, nuestro interés es cuidar a los pasajeros que viajan desde y hacia Konoha — acotó el subdirector Hyuuga.
— Es imperioso reforzar la seguridad del aeropuerto, Jefe Takara — comentó Naruto— dígame si hay algún sospechoso del atentado.
  — Hasta el momento no, Hokage-sama — contestó Takara.

Sasuke apretó los puños, si había un sospechoso él debía saberlo. Tenía un plan, pero necesitaba que Shikamaru, Naruto, Kakashi y Kiba le siguieran el juego.

— Debemos dejar en claro quien se encargará de investigar esto, si Interpol, la policía de Konoha o Anbu — deslizó Sasuke.
— Esto ocurrió en la jurisprudencia de la Policía Internacional, Uchiha-san. Es responsabilidad de Interpol.
  — Esto atenta contra la seguridad Nacional y la del heredero del Feudo, Jefe Takara— contestó Kakashi — esto debería estar en manos de la Anbu.

La expresión de Hyuuga cambió por un segundo, pero fue detectada por ambos hombres con el Sharingan en esa habitación.   De repente alguien golpeó la puerta un muchacho con uniforme Anbu apareció raudo en la oficina y pidió hablar con Naruto y Shikamaru.

  — Detuvieron al responsable — comentó Shikamaru — fue un miembro de Interpol — quien reconoció su culpa e intención de matar a Satoshi-kun, porque no bailó con él en un bar.

  — ¿Solo porque no bailó con él? ¡Que terrible! Aunque esto es fantástico, tenemos al verdadero responsable — comentó Naruto.

  — Es una excelente noticia, Nara-san — comentó el subdirector Hyuuga — Por fin se logró capturar a quien detonó las dos bombas en el aeropuerto y puso el bolso en el segundo subterráneo.
  — ¿Segundo subterráneo? — dijo Naruto y miró a Sasuke.
  — Si, ahí estaba la bomba de la que nos salvó Uchiha-san.

Naruto sonrió. Uchiha era brillante.

  — Estimado subdirector. Solo Sai, El Hokage y yo, sabíamos que la bomba estaba en el segundo subterráneo.  Ese dato fue omitido deliberadamente y todo aquel que preguntó se le dijo que había sido en el primer subterráneo. — sonrió Sasuke, el jefe Takara y Hyuuga se pusieron pálidos — ¿Como sabía usted que estaba en el segundo?

  — Gente de Interpol me informó.
  — No se le permitió a nadie bajar a los subterráneos — dijo Sai— ni a nuestra policía ni a Interpol.
  — Ellos averiguaron a través de la policía de Konoha...
  — Nadie de la policía de Konoha, incluido yo — interrumpió Kiba — sabía en relación a la ubicación de la segunda bomba.
  — Debió tener algún informante, ¿un Anbu quizás?  — Hyuuga seguía cavando su tumba.
  — ¿Si uso mi Mangekyo Sharingan en ud, señor Hyuuga, encontrare que lo que ha dicho es cierto? — dijo Sasuke, frustrado.
  — No tienes permitido usar tu Mangekyo Sharingan para eso Uchiha — acotó Kiba.
  — Si tan solo pudiéramos pedirle su autorización al Hokage para averiguar — dijo Sasuke, sarcástico.

Sasuke miró a Naruto, quien sonrió sutilmente.

  — Podrías usarlo solo si Hyuuga-san y Takara-san no quisieran cooperar — deslizó el Hokage  — Quizás sería más fácil con Takara-san.
  — Quizás podríamos utilizarlo para interrogar a la persona que colocó el explosivo, a la que ya capturamos — sugirió Sasuke, y acto seguido caminó hacia la puerta.
  — ¡¡ Esta bien !! — chilló el Jefe Takara. — No es necesario que sigan investigando, el Subdirector Hyuuga y yo planeamos todo. Queríamos dejar mal al Hokage con el Señor Feudal y que le quitara  su respaldo a Konoha.
  — ¿Por qué querían hacer esto?  — Preguntó Kakashi.
  — Por que tu Uzumaki, manchaste el honor de la familia Hyuuga al divorciarte de la señora Hinata— gritó el subdirector hacia el Hokage.
  — Y porque este pueblucho siempre ha visto a la policía internacional en menos. Todo lo resuelve Anbu, o su estupida policía regida por este idiota de los perros — gruñó el Jefe Takara.