Capítulo 5

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Narra T/N:

Desperté, atada de manos y pies, amordazada y algo mareada. Entrecerré los ojos para enfocar mi vista y acostumbrarme a la leve luz que el sol ofrecía antes de ocultarse por completo en el horizonte y la cual me daba de lleno en toda la cara, entonces me percaté de que estaba en algo parecido a una cubierta de barco, más específicamente, atada en el mástil de este, lo extraño es que la cubierta estaba completamente vacía, no había nadie, a cualquier dirección en la que volteaba estaba completamente solo, inmediatamente reaccioné alarmada a la situación y me di cuenta de que seguramente estaba en el barco de los piratas que estaban atacando el campamento minutos antes. La posibilidad de que ellos fueran mis captores iba aumentando a medida que lo pensaba cada vez más, me parecía lo más lógico hasta el momento.

De pronto unos  pasos que se acercaban hacia mi dirección interrumpieron mis pensamientos, giré mi cabeza para comprobar que, efectivamente alguien se aproximaba. El dueño de los pasos se acercó un poco más y se situó frente a mí, con una mano me obligó a mirarlo fijamente a la cara, pero pude desviar unos instantes la vista para poder observarlo detalladamente.

Yo supongo que era el capitán, se veía bastante intimidante, literalmente iba vestido completamente de cuero negro: con anillos en ambas manos, unas botas de cuero enormes, una chaqueta igualmente negra con botones plateados en forma de pequeñas calaveras malvadas, una barba de un negro muy profundo que abarcaba casi todo su pecho, una cara mugrosa y despiadada y el típico sombrero pirata, si, también este era negro.

-Veo que al fin despertaste, dulzura - me dijo en tono burlón viéndome fijamente a los ojos, tenía algo de odio en su penetrante mirada, junto con un aura de terror y misterio que envolvía todo este ambiente-.

No pude decir nada obviamente porque estaba amordazada, así que opté por fulminarlo con la mirada para intentar ocultar el miedo y desconfianza que este tipo me daba.

-Lo sé, lo sé, seguramente estarás pensando: ¿Quién es este sujeto y por qué me secuestró? Pero tus dudas se resolverán más adelante, cariño.

Tenía un mal presentimiento sobre este tipo, seguramente tenía algo no muy agradable planeado para mi, además me desagradaban sus intentos de piropos.

-Verás, sé que llevas muy poco tiempo en esta isla pero aún siendo poco, también sé que eres algo importante para Pan, te mantiene vigilada todo el tiempo, así que llegué a la conclusión de que tú serás mi pase para conseguir lo que quiero de ese niño malcriado.

¿A que se refería? Sinceramente no entendía, ¿porqué me pasa esto a mi? ¿Qué le hice yo a la vida para que me trate así? No es justo, no creo que a alguien más lo secuestren y lo lleven a un lugar que pensaban inexistente y demostrándoles que toda su infancia es mentira, además que ese mismo día te vuelvan a secuestran por segunda vez solo para conseguir que a tu secuestrador le den algo que a ti ni siquiera te importa.

-¡Capitán Barba Negra!

Una voz que tampoco reconocía nos hizo a ambos voltear, era un marinero gordito de mirada alegre, el cual llevaba puesto un adorable gorro rojo de lana y se acercaba a paso rápido.
Bueno, al parecer mis sospechas son ciertas, nuestro amigo sí es el capitán del barco, además de que es el mismísimo Barba Negra.

-¿Qué quieres Smee? ¿Acaso no vez que estoy en medio de algo? - Barba Negra sonaba bastante enfadado por su inesperada interrupción -.

-Señor, los hombres ya vienen de regreso, la distracción fue todo un éxito por lo que veo - Me inspeccionó de pies a cabeza para después marcharse y dejarme con el capitán y su malhumor amenazándome otra vez-.

Cautiva En Tu Alma - Peter Pan/Robbie Kay Y Tú (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora