Bunny «Taekook»

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Cuando se quedó solo con el niño en la sala, no pudo evitar buscar su pequeño rostro para dejar un beso en su mejilla morada, comenzando también a darle algunas caricias.

—Espero que te sientas bien conmigo Jungkookie —susurra casi babeando por lo adorable que le parecía el chiquillo —también espero que seas feliz.

—Si sigues tratándolo así, te aseguro que lo será —Taehyung se sobresaltó un poco al escuchar aquella voz desconocida, por lo que se levantó al momento —soy Kim Suna, de los servicios sociales —estira una mano hacia el menor, pero la aparta al ver que este estaba cargando al niño y no podía corresponder al apretón de manos. Finalmente, intercambian una sonrisa.

—Kim Taehyung —tras unas palabras, se dirigen al coche de la asistente social y luego a casa del mediano, que por suerte vivía cerca del hospital.

—¿A qué se dedica? —pregunta mientras entran en la casa.

—He terminado mi carrera de traducción e interpretación de idiomas y ahora trabajo como traductor y editor para una editorial —enciende la luz y la invita a pasar al salón para poder dejar a Jungkook dormir tranquilamente en el sofá.

—Así que trabaja desde casa —escribe algo en el documento que tenía que rellenar y sigue a Taehyung mientras que este le enseña la casa.

—Este cuarto lo tengo como lugar de trabajo, pero sacaré mis cosas para que sea la habitación de Jungkook —entra en este para mostrarle que allí había una cama a la que no le daba uso —debo enseñarle mis ingresos, ¿cierto?

—En efecto —tras ver toda la casa y confirmar que era un sitio bastante decente, se quedan sentados en la mesa de la cocina.

—Aquí tiene —le entrega varios papeles junto con su identificación —no sé si esto sirve de algo, pero tengo coche, así que podrá seguir yendo al mismo colegio en el que estaba sin importar qué tan lejos esté.

—Eso es un punto a favor —lo mira con una sonrisa y sigue revisando los papeles para poder rellenar su formulario —necesito que rellene este test, si no es mucho pedir.

—Claro —Taehyung busca un bolígrafo y comienza a hacer el test, notando al momento que era para analizar su madurez y capacidad psicológica.

—Esto no es fácil porque no es decisión mía. Primero debo llevar la información a mis superiores y ellos se encargarán de decidir el futuro de Jungkook. No obstante, haré que todo se tramita de manera urgente —termina de escribir las últimas cosas y mira al castaño.

—¿Tehyung? —pregunta Jungkook en voz baja desde la puerta de la cocina y con mala pronunciación.

—Hola Jungkookie, ¿has dormido bien? —le ofrece una cálida sonrisa al menor, quien se acerca a este mientras asiente y estira sus brazos hacia él.

—¿Y mami? —pregunta en cuanto está sentado en el regazo de Taehyung.

—Mami ya se ha ido, tiene que aprender varias cosas así que puede que tengas que estar un tiempo sin verla —acaricia su pelo y mira sus ojos —pero yo cuidaré de ti, ¿vale?

El azabache asiente y se recuesta en su hombro para esconderse en su cuello.

—¿Estás bien? ¿Te duele algo?