Hard Heart ⸙ Nakamoto Yuta

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Una y otra, y otra vez, mi lápiz chocaba repetidas veces con la superficie de mi pupitre mientras mi mirada se encontraba perdida en el libro que tenía frente a mi. Había entendido cada parte de cada párrafo, pero aquel libro no era precisamente lo que ocupaba mi mente en ese instante, mal por mi, pero según mi subconsciente era más importante pensar en alguna excusa para mí corazón, con el fin de que volviera a sentirse enamorado, en vez de poner atención a la clase de literatura.

De cualquier forma, el aula se mantenía en silencio mientras todos realizaban aquel estúpido resumen o, al igual que yo, perdían su tiempo en alguna otra estupidez que viniera a su cabeza.

Estaba cansada de darle vueltas al tema, aburrida, todo se veía así, ni siquiera sabía porque continuaba en una relación que resultó perder brillo desde hace tiempo, al menos en mi ya no causa alguna buena sensación, solo pierdo mi tiempo en algo sin sentido, pero apesar de haber llegado a la misma conclusión miles de veces, siempre tengo esa misma inseguridad.

Apenas la campana suena, me doy cuenta de que no he hecho nada más que subrayar, y mi cuaderno, está vacío, incluso la banca tiene más rayones de mi lápiz que la misma libreta. Estaría preocupada de no ser que esta clase la da la profesora Hwang, quien tiene un gran corazón y se encargara de pedir los trabajos mañana. Justamente mi salvación, como siempre. Cierro el libro frente a mí dejando todo de lado, me giro y en ese instante puedo divisar al chico de tierna sonrisa a mi lado.

- ¡Yunnie! ¿Por qué tan pensativa? ¿Qué roba tanto tu atención que no soy yo?- pregunta el chico de cabellera grisácea mientras su mano izquierda viaja a su pecho y en su semblante solo puede verse indignación, pero su mejor cara viene cuando el rubio frente a él le da apenas un golpe en la cabeza.

- No seas idiota Dong-Hyuck, Yun tiene novio, obviamente está pensando en él - El rubio hace una mueca de obviedad y Hyuck rueda los ojos.

Jaemin no mentía, mis pensamientos se enfocaban en mi actual pareja, pero no era lo que podrían tener en mente, era algo muy alejado, y eso solo logro que la incomodidad me invadiera, pero por suerte ellos no son capaces de notarlo.

- Es una desgracia que su novio no sea yo y tenga que ser ese bueno para nada - y nuevamente muestra esa sonrisa brillante de niño inocente y lindo que solo Lee Dong-Hyuck posee.

- No es un bueno para nada Hyuck, todos sabemos que él es mejor que tú - le defendí soltando una pequeña risita pues Lee volvió a parecer indignado y  aún más cuando Na terminó por afirmar mis palabras.

Entonces una discusión entre Lee y Na comienza, una discusión absurdamente divertida que logro sacarme algunas risitas, pero para mis tantas desgracias, ambos se detienen al notar la entrada de alguien más al aula, las clases habían finalizado para comenzar con el descanso, por lo tanto su llegada era casi obvia.

Bajo la mirada en un intento de ocultar mi expresión que ni yo misma podría interpretar con precisión, pero estaba segura de algo, y era que mi semblante no era muy agradable, DoYoung no merecía verme así, él no había hecho nada mal, yo era quien estaba mal. Yo era el verdadero problema.

Escuché sus pasos, se dirigían hacia mi con parsimonia, sus manos tomaron con dulzura mi rostro, un agarré tan delicado y a la vez frágil, sentía como en cualquier momento podría caer de él.

Sus ojos, me miraban con brillo, su sonrisa radiante y cálida. Todo sería igual que siempre si mi corazón latiera con rapidez en mi pecho, pero no lo hace.

Porfavor, solo una vez más, dame otra oportunidad.

Otra oportunidad de aferrarme, otra oportunidad para volver a intentarlo, para verlo de otra manera, para amar de nuevo.