Decir adiós

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Narra Marizza:

Después de las cuatro cartas de Javier fue difícil seguir como si nada. Con Pablo tenemos un hijo al que protejer y amar. Ya no estamos solos, ni tampoco tenemos quince años como para hacernos los héroes y perderlo todo en el intento. Antes no teníamos qué perder. Hoy podemos perder lo único que tenemos. Nuestra familia que recién está empezando y también a nosotros mismos.
No me fué fácil, nunca lo es en éstos casos. Yo sabía que no iban a ser solo dos meses; había algo que me lo decía dentro mío.
Me decidí dos días antes cuando Pablo me dijo que el era capaz de hacer cualquier cosa por Lorenzo y por mí. Que ahora era lo único que teníamos, así que desistí  de mis miedos prejuicios a ser espontánea como alguna vez lo fuí y le dije que sí, casi sin pensar.

Decir adios. Decir adios no es tarea fácil para nadie. Me puse a pensar todo lo que había pasado en mi vida y en mi persona desde que conocí a Mía, a Marcos y Luján, a Colucci y a Pablo. Ellos son todo para mí y es increíble pensar que con ese himan trucho que detestaba y del que poco a poco me fuí enamorando iba a terminar formando una familia. O con Mía que llegué a detestarla pero era porque en el fondo, de a poco la iba queriendo cada vez más. Y Luji, mi hermana, va, mi otra hermana; mi compañera en todo.
Tengo la familia que siempre quise tener. Y ya no me siento sola. Los amo demaciado y me duele en el alma llegar a tenerlos tan lejos.
Pablo me anima diciendo que son algunos meses y que los voy a volver a ver. Y lo sé, me hago la que no me importa pero por dentro me duele tener que irme. Sé que como familia nos va a hacer muy bien y con Pablo vamos a unirnos más como pareja y como padres.
Sonia organizó una comida para despedirnos a Pablo, Mora, Lolo y yo.

Narra Pablo:

No sé qué me pasa. Además de tener que irnos y que voy a extrañar a todos y el estar acá, me gusta mucho la idea de irnos con Marizza y nuestro hijo a Europa. Es como dar otro paso como familia.
Estabamos en la casa de Manuel solos.

Manuel:OJo con el segundo tan pronto.
Pablo:Vamos viendo. Igual no me gustaría que se lleven tantos años. Vos ya estás para tirar la segunda ¿no?
Manuel:El segundo.
Pablo:A claro que ya tenés a la nena. Yo quiero los cinco ya.
Manuel:Uuuh para, pareces Mía queriendo tantos hijos.
Pablo:Bueno, ¿qué querés?.
Manuel:¿posta ya querés otro?
Pablo:Noo... pero cuando Lolo tenga un año (levanto las manos en forma de suspenso)
Manuel:Yo quiero otro pero a la vez no sé y si le digo a Mía va a querer seguro. Ella amo su embarazo.
Pablo:Marizza también, pero porque no se aguantó ella sola.
Manuel:(ríe) ¿y se van no más?
Pablo:Sí.
Manuel:¿y cómo están con eso?
Pablo:Yo bien, pero aunque Marizza me lo oculte yo sé que le duele. Desde el embarazo está muy sencible. No sé qué onda.
Manuel:(suena un celular) ¿es el mío?
Pablo:No, es el mío. Bancame....

*Llamada*
Pablo:¿Hola?
Xx:¿tenés que venir a buscar a tu hijo?
Pablo:¿quién habla?

Se está por terminar la primera parte, espero que les guste el "final". Va a seguir la segunda parte en ésta misma historia. Espero que les guste y diganme si creen que termina bien o mal.

❤❤❤

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