Narra Ricky:
-¡Mamá! ¡Papá se comió mi desayuno de nuevo!- grité.
-¡Niall!
-Eres un ladrón de comida, papá.- lo miré con odio.
-Y tu eres un hijo de mami.- imitó.
-¡Dejen de pelear! ¡Parecen niños de Kindergarten!- mamá quitó los dos platos de la mesa y llamó a Lulú, el ama de llaves.
-Ricky, hoy tienes que ir a la casa de Harry, dicen que harán un primer ensayo. Sólo regrésate con él a la salida de escuela, ¿Sí?
Asentí. Afuera se oyó una bocina. Me despedí de mi madre con un beso en la mejilla, y de mi padre con una mirada asesina.
Subí al auto del tío Harry, donde ya estaban Sophie, Meghan, Edward y Riley de izquierda a derecha.
Me senté en la tercera fila de la camioneta solo.
Después de diez minutos, estábamos parados frente a la casa de Dawn. Ella salió cabizbajo y tomó asiento a mi lado. Dejó su mochila abajo del asiento y se puso los cascos de música. Supongo que estaba escuchando porque mesía su cabeza de arriba a abajo y marcaba el ritmo con su pie.
Al llegar a la escuela, el mismo alboroto de siempre. Cuatro o cinco paparazzis en la puerta de la escuela.
Al lado estaban Johnny y el otro guardaespaldas.
Bajamos y llegamos tranquilos. Fui a mi primera clase y sólo estaban dos chicos. Una chica y un chico. Pegados a la pared. A punto de... Bueno, tengo 16, ¡Ew!
-¿Tienes algún problema?- el chico se acercó a mi y cogió el cuello de mi camiseta.
-¿Yo? No, pero lo tendré si no me bajas.-miré la altura que había entre el suelo y yo. Bastante.
-¿En serio? ¡Qué miedo das, mariquita!- rió. Su novia, o su amante, sólo veía la escena con diversión.
-Él no es la única mariquita aquí.- Edward entró por la puerta y golpeó al bravucón.
-¡Gracias, eh!- grité sarcásticamente. Ambos se golpeaban mientras la novia sólo reía. ¿Eh? Los estudiantes empezaron a entrar y ver la escena con diversión, sacaban sus celulares y yo sólo trataba de alejarme lo más posible.
Caminé de espaldas hacia la salida cuando choqué con alguien.
-¿Ricky? ¿Qué pasa ahí?- Dawn trataba de entrar hasta que empezó a gritar algo que no logré escuchar. La gente empezó a hacerse a un lado y yo la seguí por detrás.
Todos estaban en un círculo alrededor de la gran pelea del año, creo. Dawn soltó su mochila y se acercó. Temí por ella, el chico se veía muy grande; pero ¡Es Dawn! Si ella puede ganarle a Edward en pelear, probablemente al grandulón también.
Dawn se adelantó y tiró a Edward a un lado. Él la miró con confusión y se limpió un chorro de sangre que salía desde su labio.
-¿Qué quieres niñita? Este no es tu asunto.-rió Grandulón. Si no sé su nombre, lo llamaré así. Dawn lo miró con odio. Uh...Grandulón, te haz metido en serios problemas.
-Te arrepentirás de haber dicho eso.- Dawn agarró su brazo y lo dobló hasta llegar a su espalda. Lo golpeó en sus partes, e instintivamente cerré mis piernas con brusquedad. Pobre chico, la furia de Dawn duele, mucho.
Los demás rieron y siguieron grabando con sus teléfonos. Edward observaba la escena con asombro. Recogió su mochila del suelo salió del salón.
Dawn seguía humillando a Grandulón.
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Los hijos de One Direction ➸ sin editar
Teen FictionOne Direction lleva 19 años separados. Cada uno lleva una vida casi normal con sus hermosas esposas y sus revoltosos hijos. Pero, ¿qué pasará cuando anuncian que sus hijos deberán formar una banda juntos? ¿Los nuevos One Direction? Todos los problem...