Los hijos de One Direction ➸ sin editar

3: Styles' Day

Narra Meghan Styles:

-Entonces, ¿Dawn está suspendida?

-Algo así.

Estábamos almorzando en casa. Dawn fue suspendida en su primer día de escuela, ¿raro, no?

-¿Jeydon está bien?-preguntó papá.

-Sí, supongo. Se lo merecía, de todos modos. Es como si la odiara o algo.

-O le gusta.- acoté. Ambos voltearon a verme como si estuvieran viendo al exorcista.

-¿Estás demente? A Jeydon no le gusta Dawn-replicó Edward-. En realidad, no creo que a nadie en el mundo le llegue gustar Dawn.-rió.

Papá lo miró severamente y yo lo golpeé.

-Dawn puede ser algo... Dura, bravucona y tosca, pero es una buena persona y es lo que importa.

-Papá... Probablemente, si fuera dulce o una buena persona, tendría amigos que no son sus primos.-Edward se paró de la mesa y fue a sentarse en un sillón.

-Edward, no tienes porque tratar así a Dawn. Todos saben que hay alguna rivalidad entre ustedes, pero...

-¿Rivalidad? ¡No hay rivalidad entre nosotros, papá!

~~FLASHBACK~~

-¡Mira papá! ¡Hice un castillo con diez cubos!- exclamó un Edward de 8 años.

-¡Mamá! ¡Mira mi castillo!- gritó Dawn, de siete años. Perrie corrió al lado de su hija para admirar su gran castillo con veinte cubos.

Edward se sintió ignorado, por lo que intentó ser el mejor en otra capacidad: basketball.

--

-Y va Edward Styles, con la pelota entre sus manos; corre para encestar y... ¡Oh no! Dawn Malik le arranca de las manos la pelota y... ¡Anooooota!

~~FIN~~

-¡Que no hay rivalidad, papá!

-Edward no lo niegues. Quieres ser mejor que Dawn en todo, y notoriamente, no lo logras.- comenté yo.

-¡Qué sabe una niña de trece años que piensa que me gusta mi prima! ¡Me voy!- salió enojado y azotó la puerta.

-Tres, dos, uno.- conté con los dedos. Después de los tres segundos contados, Edward apareció en la puerta.

-Necesito amigos.

---

-¡A la derecha! No, no, ¡a la izquierda, Riley! ¿Cuál es tu problema?

-¡Tú me dabas las direcciones, Sophie! ¡Es tu culpa!

Papá dijo que hoy era "día de padre e hijo", así que llamó a Sophie y a Riley para que me cuidaran. ¡Cómo si yo no pudiera sola!

-¡Casi chocamos contra ese maldito poste, Ry! ¡Tranquila!

Llevaban peleándose todo el trayecto hacia la heladería.

-¿Sabes qué? Conduciré yo.- Sophie tomó el volante.- El GPS dice que el lugar está a dos calles.

Llegamos y la heladería no era como pensaba. Incluso, era peor de lo que hacía.

---

-¡No tenías que hacerlo, Riley!- grité.

-¡Ella lo provocó!

Riley se peleó con una camarera. ¿Estúpido, no? Bueno, según Ry, la chica le tiró su helado porque había coqueteado con el chico de la caja. ¿Más estúpido? No, esperen lo que se viene. Nos prohibieron volver a ese lugar. ¡Y a mi, que me habían encantado los helados!

-¡Silencio! Papá acaba de enviar un texto. Quiere que vayamos a mi casa para una "reunión de banda".

Lo que faltaba.