Y Dawn seguía humillando a Grandulón. Seguí a Edward y lo encontré sentado en una de las bancas del campus. Miré mi reloj, tenía 5 minutos para llegar.
-¿Edward? ¿Estás bien?- logré decir al mirar como se sentaba cabizbajo.
-Es que... Siempre tiene que arruinarlo todo. ¡Siempre! No hay ningún momento de gloria para mi. ¡no quería que patearan el trasero de mi primo marica!
-Doble gracias, eh. ¡Soy bien macho, Edward!- grité con desesperación y el rió.
-Lo sé, pero odio que todas las chicas se queden mirándote cuando venimos a la escuela.- miró a otro lado. Sonreí con suficiencia y luego recordé por lo que estábamos pasando.
-Debe ser por ese gigante grano que me salió hace unos días. Pero no importa. Dawn sólo vio que tú estabas luchando y ella quería salvarte.
-No es cierto. Ella siempre se roba los mejores momentos. ¡Mis mejores momentos! Simplemente...quisiera tener alguno de ellos.- sonrió con tristeza.
-Já, y yo soy el marica...- dije de nuevo con sarcasmo. Rió. Me gusta sacarles sonrisas a los demás. Al igual que mi padre. Ese maldito ladrón de comida me debe un taco.
***
-¡No pienso cantar! Dios mio, canto como chewbacca*.-gritó Riley.
-¡Chewbacca no canta, tonta!- respondió Meghan.
-¡Por eso! ¿por qué tengo cantar yo y no Sophie?
-Está haciendo tareas por eso no vino.- explicó Liam.
Riley bufó.
-Pues comiencen mariquitas.- gritó Riley.
Edward comenzó con un solo de batería, luego Dawn se le unió y al final Meghan.
Había tensión en el aire. Sí, Edward y Dawn se mandaban miradas asesinas.
Riley comenzó a cantar Midnight Memories, una canción de nuestros padres. La letra era un poco...directa. La voz de Riley no sonaba tan mal a comparación del primer ensayo. Oh dios mio, hasta mamá tuvo que ir a comprarme tapones para los oídos.
-¡Muy bien, chicos! ¡Cantas mejor que Chewbacca, Riley!- ella rodó los ojos
-¿Y Jeydon? No lo he visto en días.- le pregunté a Meghan.
-No lo sé. Oí que viajó a Hawaii. Maldito. ¡Y recién comenzamos las clases!
Tengo que admitirlo, me enojé un poco. Mientras nosotros ensayábamos, ¿él estaba tomando sol en Hawaii?
-¡Ricky!- llamó Harry. Me acerqué y me entregó una pandereta. Lo miré con confusión.
-Tendrás esto hasta que encuentres tu talento.
-Oh claro, mejor por qué no me dan un triángulo.- ¿Rey sarcasmo? Ese soy yo.
Volteé hacia el pequeño escenario que había en la casa Styles y observé a Dawn hablando con Edward. Corrección, peleando. Ellos no hablan.
Me acerqué un poco más y pude oír todo claro.
-¡Quería salvarte, imbécil!
-¿Oh sí? ¡Yo puedo sólo! No tenías que humillante frente a casi toda la escuela. ¡Ahora me dirán marica igual que a Ricky!
-¡Yo soy bien macho, ya tengo dos pelos en el pecho!- grité harto.
Él no rió. Nadie rió. Pero se podía sentir esas miradas que Dawn y él se mandaban.
-Bien, bien. No puedo más con esta tensión, una superestrella no puede. Hablen ya.- Riley se sentó entre ellos. Meghan se sentó en el suelo frente a Edward y bueno, yo me senté la lado de Meghan.
-Este imbécil se molestó conmigo porque le salvé el pellejo.- escupió Dawn.
-¿Salvarme? ¡Yo podía sólo!- Edward se paró, pero Riley lo empujó hacia abajo.
-¡Aún puedo ver tu cicatriz en el labio! ¿Ves alguna cicatriz en mi? ¡NO!
-¡Marimacha!
-¡Marica!
Y todo un lío empezó. No sé dónde diablos estaban los adultos, pero el caos era adolescente.
Dawn y Edward se mandaban insultos y ella estaba apunto de tirarse encima de él, llegaron los grandes.
-¿Qué pasa aquí?- preguntó Louis.
-¡Ella me dijo marica!
-¡Y él, marimacha!
-Whoa, whoa, whoa. Edward, Dawn no es marimacha. Dawn, Edward... Bueno no lo sé.
-¡Hey!- gritó él.
-Chicos, por favor. Necesitamos decirles algo.- la cara serie de Harry no me gustaba para nada.
-Esto me está dando miedo.- susurré.
-¿Pueden decirnos ya? La piel se me pone de gallina cada vez que dicen eso. Desde que nos dijeron lo de la banda, ya no confío en ustedes.- Riley los señaló acusatoriamente.
-Eh...El hijo mayor de Simon Cowell les ofreció grabar un disco. Y no sé cómo, si no los ha escuchado, pero creo que es porque son conocidos y eso.- respondió mi madre.
-¡¿QUÉ?!- gritamos todos.
-Papá, no hemos ensayado ni más de cuatro veces ¿y ya tendremos un CD? ¡Récord!- grité.
Y el mismo procedimiento de cuando nos dijeron lo de la banda.
Meghan comenzó a caminar en círculos mientras Dawn se veía en el espejo con pánico. Riley gritaba como loca mientras grababa un Snap*.
Oh santa virgen. Algo me dice que ahora nos van a hacer ensayar más seguido. ¿Y yo que hago con una tonta pandereta?
---
Chewbacca*: Chewbacca es un personaje ficticio del universo de La Guerra de las Galaxias.
Snap*: acción de la aplicación Snapchat, que se refiere a grabar un video en el concreto momento.
Holaaa! Pamela aquí. Es un capítulo corto, lo sé. Pero... ¡Feliz año 2015, bitches! (Con cariño, de su escritora Pam) Gracias a todas las que comentaron. Y sigan comentando, porque si les soy sincera, eso me da más ganas de escribir.
Ojalá que este año sea mejor que el anterior!! No se si sabían, pero esta novela solo tiene un mes de publicada y me alegra que en este corto mes haya conseguido una cantidad normal de leídos!! Gracias, gracias, gracias!!
Psdta: sigan comentando o Dawn las golpeará.
ESTÁS LEYENDO
Los hijos de One Direction ➸ sin editar
Teen FictionOne Direction lleva 19 años separados. Cada uno lleva una vida casi normal con sus hermosas esposas y sus revoltosos hijos. Pero, ¿qué pasará cuando anuncian que sus hijos deberán formar una banda juntos? ¿Los nuevos One Direction? Todos los problem...