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Era un día muy tranquilo, podía sentirse la paz y la tranquilidad. Por mi parte me encontraba algo nerviosa y demasiado emocionada. Hoy sería mi entrevista para conseguir un empleo en la agencia de el héroe número dos. ¿Qué más podría pedir?.

Estaba muy entusiasmada, y mi rostro no lo ocultaba. Mis mejillas habían tomado un color carmesí y mi sonrisa se mantenía.

Al llegar al edificio. Me detuve a mirarme un poco en el vidrio de la puerta. Acomode un poco mi cabello y me sonreí. 

- Vaya. Creí que era la puerta principal, no el espejo del baño. - Habló por detrás una voz masculina.

- Si no le molesta, puede dejarme seguir con mis asuntos. Sino la vio yo le diré, mi amigo. Hay otra puerta a un lado de... Esta... - Me quede petrificada. - ¿S- Señor Hawks?... - Pregunté. Obviamente era él. Solo que, no era la mejor primera impresión. 

Él solo arqueo una ceja y su sonrisa creció. 

- En persona pero, la palabra "Señor" es hiriente. Hawks, es más que perfecto. Ahora, ¿eres la chica de la entrevista, cierto?. - Me cuestionó inclinándose un poco, acercándose más a mi. 

- Dios... - Pensé. - Así es, se- Hawks. Vengo de la UA, de la clase de apoyo. - Respondí con seguridad y algo de pena, por nuestro primer encuentro. Él lo notó.

- Claro, eres la chica sin un quirk, ¿no es así?. - Volvió a cuestionar, mientras tomaba una mejor postura. Yo sonreí y asentí.

- La misma pero... "La chica sin quirk" es algo hiriente. ¿No le parece, Hawks?. - Él sonrió de forma burlona y negó con la cabeza.

- Muy bien. - Abrió la puerta. - ¿Le gustaría pasar, señorita?. Sí gusta, le mostrare los verdaderos espejos. - No pude evitar soltar una pequeña risita.

- Es muy amable pero, me gustaría que comenzáramos con la entrevista. Si sobra algo de tiempo, encantada me dejo guiar por usted hacía los lujosos espejos. - Respondí, adentrándome al lugar. Observe con detalle todo lo que pude. No era para nada desagradable. Todo estaba muy bien ordenado y limpió.

- Por aquí. - Dijo mientras caminaba. - ¿Sabe por qué está aquí?. -Agregó sin mirarme.

- Es más que obvio, ¿ no lo cree?. - Contesté, sin dejar de ver mis alrededores.

- No me refería a eso. - Llamó mi atención. Él no parecía querer detenerse.

- Es por mis proyectos. - Afirmé. 

- Claramente. - Se detuvo. - O, responda me algo, - Se giro y comenzó a acercarse -  ¿para qué necesitaría a alguien que no puede defenderse o siquiera cuenta con una habilidad digna de admirar? - Su mirada no reflejaba nada. Lo hacía para ejercer presión, claro, eso debe de ser.

Erguí mi cuerpo, tomando una posición firme. No me haría retroceder.

- Debe de ser por la fuerza de la persona. Un ejemplo podría ser la mental. No creó que quiera a alguien débil y quebradizo a su lado. El hecho de no contar con un quirk no lo hace menos. Solo debe de aprender de otros tipos de fuerza. - Respondí con seguridad y sin dejar de hacer el contacto visual que él había iniciado.

Hawks parecía estar satisfecho. Aún así no baje mi guardia, por lo poco que pude notar es un tipo demasiado impredecible. 

- Bien. Me alegra escuchar que no se siente inútil al escuchar esas palabras. Por aquí. - Agregó para seguir caminando. Le seguí el paso, era algo rápido pero hacía lo mejor que podía.

Llegamos a un pasillo, al fondo se encontraba una puerta. Solo me confundí. ¿Acaso era la salida?, pero, ni siquiera hemos empezado la entrevista. El héroe notó mi estado, así que solo sonrió.

- Esa puerta de el fondo, te lleva a los amados espejos. - Habló mientras me miraba. Yo solo seguía mirando lo con confusión.

- ¿Por qué me trajo a los baños?. - Pensaba. - ¿Por qué me- - No me dejo terminar. 

- Porqué necesitare que los limpies todos los días, de preferencia por las mañanas. - Me quedé en shock, ¿tan mal me había ido?. 

- ¿Qu- Qué?... - Lo cuestione sintiendo como mi sonrisa se desvanecía en su totalidad.

- Eso diría si te quisiera como mi conserje. - Suspire aliviada. Él solo rió a carcajadas. - Debes de aprender a relajarte. Para ser tan joven ríes muy poco. - Le sonreí .

- Tal vez tenga razón. - Dije mientras colocaba mi mano derecha en mi frente. - Entonces... ¿Podemos comenzar la entrevista?. - Pregunté con la misma sonrisa y él solo sonrió más.

- Aún no lo ves, ¿cierto?. - Cuestiono manteniendo su mirada llena de calma. 

- Que torpe. Esa, había sido mi entrevista... - Pensé. Mi lenguaje corporal le había dado a entender a Hawks que yo había caído en cuentas.

- Así es... - Agregó para pasar por mi lado izquierdo. 

- ¡Esperé! - Lo llamé. Él se detuvo y me miro acercarme. - ¿C- Cuál fue mi resultado?. - Pregunte con el corazón en las manos.

- Ya te lo dije. - Respondió sin cambiar su actitud tranquila. - Te mostré las instalaciones y tu lugar de trabajo.

- E- Es otra broma, ¿cierto?. - Dije tratando de sonreír y encontrar lo gracioso.

Pero, él no parecía estar bromeando esta vez.

- Esta no es una historia de ficción, pequeña. Empezaras desde abajo, como todos. Y si tu quieres podrás llegar muy lejos. Podrías llegar a ser mi mano derecha, quién sabe... Existen tantas posibilidades... - Respondió para seguir su camino.

- P- Pero, usted dijo que yo estaba aquí por mis proyectos. - Dije con un tono de decepción. El héroe solo volvió a mirar y rió.

- ¿Qué pasó con la chica que me recibió en la entrada?. - Habló para volver a acercarse. - Claro que estas aquí por tus proyectos pero, ¿qué esperabas exactamente?... Eres muy joven. Sé que es irónico que lo diga yo pero, a lo que me refiero es que, no podría ponerte en un puesto muy alto. Acabas de llegar. Poner una carga así en tus hombros solo te destrozaría. Empecemos con algo básico y ligero. - Agregó, para después revolver mi cabello con cariño.

- Baños... ¿Eh?... - Dije sin tono alguno.

- Oye, al menos podrás decir que tus proyectos te llevaron muy lejos. A los baños de mi agencia. - Respondió de forma cómica. - Si quieres empezar, adelante. Yo pasó a retirarme, nos vemos más tarde. - Agregó para despedirse sin más.

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Repito de nueva cuenta, no le prestes mucha atención al titulo, porque tal vez cambie. 

☘︎ 𝑯𝒂𝒘𝒌𝒔 𝑻𝒊𝒎𝒆. ☘︎ - Hawks & Tú -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora