Capítulo 2

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El profesor de matemáticas estaba explicando un tema nuevo, Arvel, estaba copiando nota de todo sobre el tema, por otro lado, Stephanie era de las personas que se la pasaba en su mundo, pensando en cosas varias, como si estuviera en las nubes...

—Señorita Stephanie— De repente ella bajo de sus nubes y se fijó con el profesor que le estaba llamando la atención.

—¿S-si señor?— Respondió nerviosa.

—Pase al frente y resuelva el ejercicio porfavor.

—S-Si señor— Respondió ella.

Mientras pasaba al frente veía como todos la miraban mientras se reían, ya que la habían llamado tres veces ya y estaba perdida en su mundo, ella se había sonrojado, también logro ver a Arvel con una muy pequeña sonrisa que ella había notado por poco, ella también sonrió un poco.

Después de la clase llegó la hora del segundo receso, como siempre Arvel sacaba un pan con queso de su maleta pequeña y se iba a sentar en el pasto a pensar en las cosas o a recordar su estudio.

Mientras estaba meditando vio que aquella chica llegó de nuevo.

Oh no pensó.

—Hola, ¿Que comes? Le preguntó Stephanie.

—¿Acaso debería decirte? Le respondió de mala gana Arvel.

—Aparentas ser tan serio con la gente pero en realidad eres como cualquiera de nosotros, hoy te vi sonreír cuando pasó lo del tablero conmigo— Luego de eso, Arvel se sonrojo y volteo la mirada hacia otro lado.

—N-no estaba sonriendo, fue tu imaginación— Le respondió con voz nerviosa a Stephanie.

—Si ajá, ya me lo creí— Respondió con sarcasmo Stephanie.

Después de eso hubo un silencio incómodo, pero luego Stephanie rompió el hielo.

—Entonces... ¿Si me vas a decir que comes? Se ve delicioso.

—Ah... Esta bien, es un pan con queso.

—Me gusta el pan con queso —Dijo Stephanie con una sonrisa.

—Y piensas que te voy a dar, ¿Verdad?.

—Pues...

—No —Le respondió rápidamente, el chico era muy reservado y cuidadoso en esos temas.

—Ohh, está bien— Respondió triste Stephanie.

Luego de eso, sonó la campana y todos estaban entrando.

—Bueno, adiós chica la cual no recuerdo su nombre —Dijo Arvel.

—Adios Arv... Espera, ¡No recuerdas mi nombre! —Grito Stephanie.

Luego de eso, Stephanie le discutió a Arvel el cual se quedó callado en todo el recorrido a su salón.

Odio NegativoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora